La ansiedad y los miedos son fenómenos
universales que forman parte del
entramado del
desarrollo humano. Así, el miedo a la separación, la timidez
social, el miedo al fracaso, el miedo a la oscuridad, a los animales o a los
malos sueños forman parte de los problemas cotidianos de la infancia.
Los conceptos de ansiedad, angustia, miedo y estrés han
sido utilizados de forma polisémica en la bibliografía
psicológica. En este artículo hablaremos
ampliamente del significado del
término «estrés», así como
las patologías derivadas del
sufrimiento ocasionado por él. Por ello, seguidamente,
nos centraremos en la diferenciación de los términos de ansiedad,
angustia y miedo, si bien teniendo en cuenta que a menudo se utilizan
indistintamente.
Mientras que el miedo es un sentimiento producido por
un peligro presente e inminente y por lo tanto se encuentra estrechamente
ligado a los estímulos que lo generan, la ansiedad se refiere a la
anticipación de un peligro venidero, indefinible e imprevisible, siendo
la causa mas vaga y menos comprensible (Marks, 1991). En este sentido, la ansiedad ha sido definida como
miedo sin objeto, mientras que el miedo es considerado como la ansiedad ante un estímulo
determinado.
Tanto el término «ansiedad» como el de
«angustia» derivan de la misma raíz indogermanica,
anglz, que significa «malestar, estrechez o constricción».
'Posteriormente la influencia latina separó la anxietas del angor,
distinción que recogió la psiquiatría francesa,
diferenciando anxieté, referida a un malestar anímico o del
espíritu, de angoisse, referida a constricción epigastrica
con dificultadesrespiratorias e inquietud. Por su parte.
La tradición psiquiatrica española adoptó
también la distinción entre ansiedad, en la que predomina un componente psíquico, y angustia, en la que
predomina un componente somatico (Sandín y Chorot. 1995).
Aunque la ansiedad tiene una función activadora que facilita la
capacidad de respuesta del individuo ante los peligros,
cuando ésta es excesiva en intensidad. Frecuencia o duración, o
aparece asociada a estímulos que no representan una amenaza real para el
organismo, produce alteraciones en el funcionamiento del sujeto y se
considera patológica. Es en este caso cuando
hablamos de trastornos de ansiedad.
Acorde con ello, una cuestión clave para los clínicos es
determinar en qué punto es apropiado redefinir esos síntomas
normales como
trastornos emocionales. Algunos criterios que pueden esclarecer las diferencias
son los siguientes: cronicidad, intensidad de los síntomas,
interferencia con el funcionamiento e interferencia con el proceso de
desarrollo psicológico.
De acuerdo con Echeburúa (1996) los trastornos de ansiedad en la
infancia pueden clasificarse de la siguiente forma
- Trastornos fóbicos: fobias específicas, fobia escolar y
trastorno de evitación.
- Trastornos de ansiedad sin evitación fóbica: ansiedad de
separación y ansiedad excesiva.
- Otros trastornos de ansiedad: trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno mixto
de ansiedad y depresión.
En nuestra opinión, esta clasificación recoge
los principales trastornos de ansiedad que se presentan en la infancia.
Nosotros, ademas, incluimos en este artículo la descripción
y explicación de otro que,aunque es menos
frecuente, esta también representado en la población
infanto-juvenil, a saber: trastorno de angustia con o sin agorafobia. Ademas, el trastorno por estrés agudo y el trastorno
por estrés postraumatico, si bien son trastornos por ansiedad.
Aunque frecuentemente se utilizan los términos miedo y
fobia indistintamente, fundamentalmente cuando se aplican a niños, es
importante delimitar su significado. A continuación se realiza un estudio de ambos conceptos, así como de las fobias mas frecuentes en
cada período evolutivo. En los siguientes apartados se expone la
sintomatología asociada a cada uno de los trastornos de ansiedad,
teniendo siempre en cuenta la importancia de la edad del sujeto como variable
moduladora de la manifestación concreta de cada trastorno. Comenzaremos en esta primera parte hablando de las fobias y sus
repercusiones en la infancia y adolescencia.
Miedos y fobias
El miedo se considera una respuesta de activación fisiológica
normal provocada por hechos nocivos o amenazantes, que capacita al organismo
para reaccionar ante una situación de peligro (Echeburúa. 1993).
En este sentido, los miedos constituyen respuestas
adaptativas que permiten que los niños adquieran las habilidades para
enfrentarse a situaciones peligrosas o nocivas. Así podemos afirmar que
son instintivos y universales sin aprendizaje previo.
Campbell (1986) describe
la evolución de los miedos en la infancia como
una característica del
desarrollo humano. Así, desde una aproximación etológica,
Bowlby (1993) plantea que inicialmente la incomodidad, el dolor y los sonidos
agudos y repentinos provocaninquietud en el bebé e incluso pueden
inducir al llanto, así como la tensión muscular y los movimientos
difusos. Por el contrario, el bebé se tranquiliza cuando se lo acuna o
se le dan palmaditas o por medio de la succión sin fines alimentarios. En estas reacciones de temor el aprendizaje tiene nula o escasa
participación. Con el desarrollo cognitivo aparecen otros miedos
evolutivos; por ejemplo entre los 8 y 12 meses el niño comienza a
manifestar respuestas de temor ante las personas extrañas. Cuando el niño aprende a moverse por sí mismo,
aumenta el número de situaciones temidas. Y a medida que progresa
el desarrollo cognitivo, con la adquisición del lenguaje y la capacidad
para efectuar operaciones simbólicas, aparece el miedo a la oscuridad, a
los seres imaginarios y a los animales, mientras que los anteriores temores
comienzan a desaparecer. Las reacciones de temor son entonces menos situacionales,
ya que el niño es capaz de anticipar
situaciones peligrosas que no se encuentran en su entorno inmediato.
De los 6 a los 9 años surgen nuevos temores que
tienden a ser mas reales, asociados a situaciones que implican
daño físico y miedo al fracaso o a hacer el ridículo.
Los miedos a fantasmas y monstruos empiezan a desvanecerse, aunque aún
permanece el miedo a la oscuridad, a estar solos y a
la separación de los padres. En la adolescencia se incrementan los
miedos relacionados con las situaciones sociales: el temor a fracasar, a hacer
el ridículo, a las relaciones con el otro sexo, a ser no ser aceptado
por el grupo, a las relaciones sexuales.
Morris y Kratochwill (1983) consideran que los miedos evolutivosson un componente del
desarrollo normal del
niño que le proporcionan medios de adaptación a diversos
estresores vitales. En este sentido
o Se trata de un fenómeno evolutivo, hasta el punto de que la presencia
de miedo debería considerarse como una
parte integral del
desarrollo psicológico normal. Lo anómalo sería su
ausencia. El miedo tiene la finalidad de señalizar la
presencia de una amenaza.
o La mayoría de los miedos suelen ser
transitorios, aparecen en niños de edad similar y, por lo general, no
suelen interferir en el funcionamiento psicológico cotidiano. Estos
miedos parecen estar en estrecha interdependencia con los cambios evolutivos y
desaparecen al poco tiempo.
o Las experiencias, vivencias y emociones aparejadas
con los miedos evolutivos permiten al ser humano generar y consolidad medios y
recursos encaminados a resolver de modo satisfactorio situaciones estresantes.
o La dimensión cognitiva se presenta con una
especial relevancia. Los miedos son reacciones ante una serie de
estímulos, unos externos y otros generados por el propio sujeto, que son
autocalificados como
amenazadores o emparejados con estímulos percibidos como peligrosos.
En la adolescencia adquieren gran relieve los temores sociales (p.e. miedo a la
interacción con personas del sexo opuesto), los miedos sexuales y los
relacionados con la autoidentidad y el rendimiento personal (p.e. temores al
fracaso, a no ser popular, a la inadecuación personal, al aspecto
personal, a ser incompetente, a parecer loco/a). Ademas
se incrementan los miedos de tipo académico, político y
económico. También suelen darse con ciertafrecuencia los
miedos de fases anteriores, tales como los miedos a los animales,
oscuridad, muerte, cementerios, daño corporal (Sandín, 1996).
Mientras que los miedos son considerados como
reacciones normales del niño, las
fobias son conceptuadas como
alteraciones o trastornos psicológicos. Así, la
característica esencial de la fobia específica es un miedo intenso y persistente a objetos o situaciones
claramente discernibles y circunscritos (DSM-IV; APA, 1994).
Marks (.1961) entiende la fobia como
un tipo de miedo que
- Es desproporcionado respecto al peligro de la situación.
- Se acepta como
irracional, esto es, es resistente a las explicaciones o razonamientos
correctos.
Es involuntario, no esta sujeto al control de la
persona.
- Lleva a evitar la situación temida.
MilIer, Barret y Hampe (1974) ampliaron la definición propuesta por
Marks, añadiendo tres nuevos criterios
- La reacción de temor persiste durante largos períodos de
tiempo.
- Es una reacción desadaptativa.
- No corresponde a la edad' o estadio evolutivo.
Con esta ampliación de criterios se evita considerar como fobias las
reacciones de miedo evolutivamente normales, por ejemplo las respuestas de
miedo intenso ante la separación de la madre que manifiestan los
niños entre uno y dos años de edad. Tal y como argumenta Bragado (1994), este
comportamiento es transitorio, ocurren en la gran mayoría de los
niños y puede ser considerado como una
parcela mas del
desarrollo.
También el DSM-IV considera un criterio
indispensable para diagnosticar una fobia que el miedo o la evitación
interfieran con la vida normal delindividuo, produciéndose un intenso
malestar. En este sentido, se hablara de miedos
cuando no se produzca interferencia con la vida del niño. La evitación del estímulo temido puede
producirse tanto cuando los miedos son normales como
cuando son exagerados o irrazonables, y siempre que no interfiera o
límite la vida del
niño podra ser considerada funcional o adaptativa. Si la
evitación es adaptativa, el comportamiento del niño no
debera ser considerado fóbico (Fernandez, 1996).
Como hemos
expuesto anteriormente, Marks (1969) considera que las fobias no pueden
explicarse o razonarse. En la misma dirección, la 'APA
(1994) señala que el individuo debe reconocer que su miedo es excesivo o
irracional, aunque establece que dicho requisito no es imprescindible para
realizar el diagnóstico en la población infantil.
Hay dos categorías que suelen aplicarse al niño
y al adolescente, a saber, las fobias específicas y la fobia social.
Sin embargo, la agorafobia es menos frecuente en esta
población.
Las fobias específicas (o fobias simples) se refieren al miedo exagerado
y persistente a un objeto o situación
determinados. El DSM-IV establece cinco categorías de fobias
específicas, a saber, animal, ambiental (p.e.
altura, tormentas, agua), sangre- inyecciones-lesión situacional (p.e.
aviones, lugares cerrados) y de otro tipo (p.e. ruidos estridentes o personas
disfrazadas), y no diferencia las fobias que ocurren durante la infancia y
adolescencia de las que suceden en la vida adulta.
En los niños las fobias mas frecuentes son las referidas a los
animales, a la oscuridad, a dormir solos, a los dentistas, médicos
opracticantes (Jiménez, 1995), y la ansiedad se puede expresar llorando,
mediante rabietas, quedandose paralizados o abrazandose a alguien que les dé seguridad.
Las fobias específicas tienden a remitir espontaneamente con el
paso del
tiempo en períodos que oscilan entre uno y cuatro años. La
maduración cognitiva del niño y las experiencias
de aprendizaje debidas a la exposición al estímulo temido o
mediante aprendizaje vicario pueden explicar esta remisión
espontanea.
Las fobias sociales (o trastorno de ansiedad social) se refieren al miedo
exagerado y persistente a actuar de un modo humillante
o que suponga la evaluación por parte de los demas ante personas
que no pertenecen al ambito familiar. Ejemplos de situaciones de esta
categoría son los siguientes: hablar en público (leer en voz alta, hacer un comentario sobre un libro, contestar a una
pregunta del
profesor), comer, beber y escribir en público, ir a fiestas, utilizar
los aseos públicos, hablar con figuras de autoridad y reuniones o juegos
con otros niños. De entre ellas, cabe destacar
las relacionadas con hacer examenes escritos u orales, que les devuelvan
el examen corregido o escribir en la pizarra, por su relativa frecuencia en el
ambito escolar.
Generalmente estos niños o adolescentes temen que los demas
perciban los síntomas de su ansiedad, tales como enrojecimiento, temblor
de manos o de la voz, agitación respiratoria, sudoración, que a
su vez les genera mas ansiedad.
Tener alguna característica física diferente del resto de
compañeros (p.e. sobrepeso, alguna minusvalía física)
puede hacer al niño o adolescente vulnerable al desarrollode una fobia
social, por el temor a sufrir las burlas. Esta
situación desgraciadamente, cada vez mas frecuente en el
ambito escolar actual debido, en parte, al aumento de la agresividad en
esta población.
Generalmente aparece ansiedad anticipatoria, y ello genera preocupaciones antes
de afrontar la situación temida, lo que, a su vez, provoca ansiedad,
constituyéndose un círculo vicioso que
da lugar a un mal rendimiento real o subjetivo en la situación temida
debido a dicho malestar.
Cuando se realiza este diagnóstico en niños o adolescentes, es
necesario establecer que tienen la capacidad de entablar relaciones sociales
adecuadas para sus niveles de edad y que la ansiedad social aparece ante el
contacto con otros niños de la misma edad y no sólo ante adultos.
Dado que la adolescencia es un período del desarrollo durante el cual la ansiedad social es
bastante frecuente, sólo se realizara el diagnóstico en el
supuesto de que dicha alteración suponga una interferencia en la vida del adolescente y/o le
cause un malestar intenso y duradero, c1ínicamente significativo. En los
niños, las fobias sociales pueden manifestarse mediante lloros,
tartamudez, paralisis o abrazos o aferramiento a familiares cercanos,
junto a la abstención de mantener relaciones con los demas,
pudiendo llegar al mutismo.
La razón fundamental que justifica este cambio
es la poca frecuencia con que era diagnosticado y el escaso conocimiento del curso,
evolución y respuesta a la ira. tratamiento de
este trastorno en la infancia (Jiménez, 1995).
Así, el «trastorno por evitación» se aplica cuando se
cumplen los tres criteriossiguientes durante al menos seis meses (y el
niño tiene mas de dos años y medio)
a) timidez excesiva y persistente con los adultos y compañeros;
b) deseo de afecto y aceptación, y, por lo general, relaciones
calidas y satisfactorias con los familiares
e) conducta de evitación lo bastante intensa como para interferir en el
funcionamiento social y las relaciones con los compañeros. Dicha sintomatología es analoga a la de fobia social.
Los niños que sufren este trastorno
generalmente son remitidos al psicólogo de la escuela, pues en el
ambiente familiar no presentan ansiedad.
Los Mecanismos de Defensa
Freud llamo “mecanismo de defensa al rechazo de lo instintivo por parte
del Yo, luego, a este rechazo prefirió llamarlo represión; pero
en los últimos años ya definitivamente; volvió a la
primera denominación y aclaro que era el nombre común para todas
las diferentes técnicas del yo emplea en contra de las exigencias de los
instintos y que la “represión” era solamente una de dichas
técnicas.
Freud descubrió o admitió numerosos mecanismos
de defensa y posteriormente, otros sicoanalistas describieron algunos
mas. La clasificación de los mismos ha provocado
discusiones técnicas pero en general; puede decirse con Otto Fenichel:
“teniendo en cuenta los mecanismos señalados, tanto por freud como
por otros investigadores” que los mecanismos que el yo emplea pueden clasificarse
en excitosos (sublimación), que ocasionan la cesación de los
reprimido, y en ineficaces o patógenos, que deben actuar constante y
repetidamente, con el objeto de evitar la irrupción de lo reprimido.
Las defensas ineficaces opatógenas son las que constituyen la base de
las neurosis.
A.- Mecanismo de Defensa Eficaz o Sublimación
En la sublimación los impulsos sublimados encuentran por otras
vías permanentemente salidas y, lo instintivo, al ser sublimado,
desaparece por que su energía le ha sido extraída y puesta a
dispocision del
sustituto. La sublimación necesita constantemente un
aparte de libido, por eso, solo es posible cuando no hay represión, sin
duda alguna, entonces, solo los impulsos pre-genitales pueden ser sublimados.
B.- Mecanismos de Defensa Ineficaces o Patógenos
I.- Mecanismos de Defensas contra lo Instintivo
1) Negación.- Freud lo define, especialmente las percepciones internas o
ideas intolerables que el sujeto no quiere dejar llegar a si conciencia. Por
ejemplo: “Cuando alguien dice: “No se a quien puede representar
esta persona de mi sueño; seguramente no es mi madre” quiere
decir, “se que es mi madre pero, todavía, estoy condiciones de
negarlo”.
2) Proyección En general, se llama así
a la tendencia a atribuir (proyectar) ciertos procesos mentales reprimidos,
cuyo origen personal no se quiere admitir, al mundo exterior. Como
lógica consecuencia, esos procesos, no son admitidos como propios por el sujeto, sino como una
percepción externa, Freud puntualizo que en su forma mas
común, la proyección consiste en atribuir a otras personas lo que
el individuo experimenta.
3) Introyección – Identificación
La introyección es el mecanismo por el cual se absorbe en el propio
psiquismo, el ambiente u la personalidad de otros y se reacciona frente a
determinados estímulos exteriores como si se produjeronen el propio ser.
Como resultados, el sujeto se identifica con otras personas; La
Identificación, es llevada a cabo mediante la introyección es el
tipo mas primitivo de relación con los objetos. Todo tipo ulterior de
relación con los objetos, por eso, cuando
tropieza con dificultades puede regresar a la identificación y todo
ulterior fin instintivo puede regresar a la introyección. La
introyección es un de los mecanismos de la psicosis maniaco depresiva y
de la esquizofrenia; la identificación aparece depresiva y de la
esquizofrenia; la identificación aparece en la paranoia aunque en sus
formas mas suaves puede constatarse en seres normales.
4) Represión – Borramiento Freud la
define como el
proceso que relega a lo inconsciente aquello que angustia al Yo pero, que no
quita a lo reprimido su fuerza dinamica. Evidentemente, este mecanismo, al que considera como el mecanismo de ajuste
psicológico que relega todo impulso no aceptable para el Súper Yo
a lo inconsciente.
La represión implica un verdadero borramiento
de ciertos fenómenos.
El borramiento, si bien se encuentra presente donde actué una
represión, es considerado por algunos psicoanalistas, siguiendo el
pensar de Freud, como
otro mecanismo, cuya finalidad es suprimir un suceso ocurrido.
La represión es el mecanismo fundamental en la histeria.
5) Formaciones Reactivas Caracterológicas.- Este mecanismo provoca
formas de conducta que protegen algún aspecto de la personalidad o
historia del individuo, de la auto investigación o de la
investigación por parte de los demas; recurriendo con frecuencia
a actos disfrazados. Por ejemplo; obedecerciegamente para
ocultar rebeldía; ser exageradamente limpio para ocultar la suciedad
inconsciente; etc. Vale decir, mediante este mecanismo,
una tendencia determinada es sustituida por otra contraria.
6) Anulación o reparación consiste en
hacer lo contrario que se hizo anteriormente para anular (o reparar) su
significado. La anulación se distingue de la negación y de las
formaciones reactivas en que, mientras que en la primera se niega lo que la
consciencia no admite y en la segunda se adopta una actitud opuesta a la
originaria, en la anulación va mas lejos, se realiza un acto concreto
contra algo que se hizo o pensó antes.
7) Aislamientos Este mecanismo destruye las
conexiones existentes entre una causa y su consecuencia. Gracias al asilamiento
el sujeto conoce las vivencias que han sido causa de
sus trastornos, pero no sabe que aquellas son las que provocan sus
síntomas; recuerda hechos recientes o pasados, pero desprovistos
(aislados) de tono afectivo y desconectados de otros hechos. El aislamiento se
observa en casos especiales, tales como
el del paciente que solo admite el
analisis durante la sesión con el analista, pero, luego; lo
aísla del
resto de su vida.
8) Regresión la regresión como mecanismo de defensa
es el retroceso de la libido a una organización libidinosa anterior (por
ejemplo de la organización instintiva genital a la anal). Para ser humano a añorar
estados anteriores cuando los presentes son hostiles, se vea aumentada por dos
factores que estan íntimamente ligados entre si: el grado de
vacilación con que el sujeto adopta las nuevas formas de
satisfacción y la intensidad de sufijación a las etapas
anteriores.
II Mecanismos de Defensas Contra los Afectos
Todos los mecanismos hasta aquí estudiados se originan en el deseo del
ser de no experimentar ninguna sensación angustiosa, por lo tanto, todo
defensa es, en última instancia, una defensa contra los afectos, desde
el momento que los instintos son rechazados no por ser instintivos sino por las
reacciones de ansiedad, culpabilidad, etc. que provocan.
1) Represión o bloqueo de afectos En
líneas generales, el bloqueo de afectos es la represión actuando
contra determinadas cargas afectivas. Produce rigidez emocional, ciertas formas
de despersonalización y se delata en sueños, síntomas y
fonaciones sustitutivas. Estas últimas provocan
inestabilidad afectiva.
2) Postergación El bloqueo afectivo retiene
pero no anula los afectos, de aquí que consecuencia directa del bloqueo son las
reacciones desproporcionadas al estimulo ya que estas son las reacciones
desproporcionadas al estimulo ya que estas se nutren de los afectos reprimidos.
La postergación es considerada un mecanismo de
defensa desde el momento que la descarga postergada alivia las tensiones
internas y no ocasiona mayor angustia al Yo, por que lo que ocasiona la
descarga, en realidad, o contiene elementos para ello.
3) Desplazamiento la postergación no seria
posible si lo afectos no se desplazan. de aquí
que la postergación no sea mas que una formación de otro
mecanismo: el desplazamiento, el cual ademas permite las descargas de
tensiones por lo mas diversos caminos. El mecanismo consiste en el
desplazamiento del
afecto de una idea a otra. Pudiendo lasegunde ser sustituto
de la primera. El afecto experimentando hacia un
objeto determinado se vuelca sobre otros.
4) Equivalente de Afectos al estudiar las neurosis
vimos que es posible la sustitución de las experiencias físicas y
motoras específicas de un instinto. La excitación sexual, por
ejemplo, puede ser sustituida por sensaciones localizadas en los distintos
aparatos que integran al hombre.
5) Formaciones reactivas contra los afectos
Finalmente se pueden adoptar las siguientes formaciones defensivas:
a) Cambio de cualidad del
afecto. Este mecanismo cambia la cualidad del afecto. Así por ejemplo, la excitación sexual puede
convertirse en angustia.
b) Aislamientos de afectos. Los afectos pueden ser aislados
de sus conexiones psíquicas. Cuando esto
ocurre, el sujeto puede recordar hechos, pero, desprovistos de las emociones
que los acompañaron. Es una variación del bloqueo.
c) Proyección e Introyección. Son los
mecanismos ya estudiados en las defensas contra lo instintivo, pero que
aquí actúan solamente con relación a los afectos.
d) Racionalización. Por este mecanismo, el
sujeto se convence razonando consigo mismo de los motivos que tuvo para actuar
de una manera determinada o para explicarse las frustraciones provenientes del mundo externo, con
lo que en ambos casos, “al darse la razón”, elimina la
angustia que tales hechos pueden provocarle. La nacionalización se
emplea constantemente.
e) Defensas contra sentimientos de culpa. Contra estos sentimientos el sujeto
emplea las distintas formas de defensas ya estudiadas: represión,
racionalización, proyección, intrayeccion, aislamiento, etc.