Una boda Maya es una ceremonia
simbólica, sin caracter legal, que recupera la tradición
maya para unir a los novios a través de un intercambio de votos y ritos.
Una boda única, profunda y sagrada.
La ceremonia dura aproximadamente 30 minutos y a través de cantos,
caracoles, flautas, sonajas y tambores, se envuelve el ambiente de un aura mística dando paso al Shaman, quien
oficiara una ceremonia cargada de simbología.
La estructura puede tener ligeras variaciones en cuanto a la puesta en escena,
pero no en la esencia fundamental de la misma: honran a la Madre Tierra, a
través de los cuatro elementos (viento, agua, tierra, fuego) o de las
siete direcciones (arriba, a la Energía Cósmica; abajo, a la Madre
Tierra; a los cuatro vientos: norte, sur, oeste, este; y adentro, en el centro
de los mismos corazones, templos del amor).
En el altar se deben representar los cuatro puntos cardinales, bien sea con flores, con
velas o con jícaras (recipientes antiguos hechos de cascarade
calabaza seca donde se sirve el balche, bebida sagrada hecha de corteza de
arbol y miel de abeja). Se colocaran, ademas, las ofrendas
presentadas (arroz, frijoles, maíz y fruta) que posteriormente los novios
se intercambiaran como votos: el novio entregara a la mujer el
maíz (que simboliza el comienzo de la vida y el sustento de la familia)
y las semillas de cacao (significando la riqueza y el cuidado que se
pondra en el amor y unión), mientras la novia le dara
tortillas y polvo de cacao.
Los amigos y familiares participan activamente en la ceremonia, formando un círculo alrededor de la pareja, echandole flores, tocando instrumentos musicales y caracoles,
ofreciéndoles mensajes de bendición, canciones y poemas.
Para organizar este
tipo de boda lo mejor es que contactes con empresas especializadas en wedding
planner. En México son especialistas en esta
tradición, por lo que no tendras mayores inconvenientes, sobre
todo si tu deseo es celebrarla en el propio Imperio Maya.