El proceso de desarrollo económico galopante de
China
y su impacto económico y geopolítico se han convertido
en el capítulo central de la globalización. Según el Banco
Mundial, “China
ha hecho en una generación lo que a la mayoría de los países les ha costado
siglos”.
En 1980, dos años después de lanzar la reforma económica, Deng Xiaoping
explicó: “Sin reforma política, la reforma económica no puede tener éxito. Se trata de una tarea a largo plazo, que requerirá el esfuerzo de
tres generaciones”.
El rechazo de la democracia liberal, sostenido por todos los dirigentes chinos
desde Deng Xiaoping, obedece a varias razones
1) La convicción de que debilitaría el poder del Estado, haciendo imposible la
adecuada conducción de la reforma económica.
2) El temor de que la energía social se dilapide en luchas políticas, en vez de
encauzarse hacia el desarrollo económico.
3) El riesgo de ver mediatizada la soberanía china.
Para He Xin, “hoy la democracia es tal vez el instrumento
más eficiente para destruir un país en vías de desarrollo desde dentro”.
En octubre de 1987, con Zhao Ziyang como secretario general. El XIII
Congreso decidió la separación entre partido y Gobierno, y entre ambos y las
empresas (lo que suponía la supresión de las células del partido en
ministerios, universidades, empresas, etc
Descartado el ambicioso proyecto de Zhao
Ziyang, la versión minimalista del “perfeccionamiento de la
democracia socialista” incluye un conjunto de medidas, algunas de ellas de gran
alcance:
* Dirección colectiva, en lugar dela dictadura
unipersonal de Mao Zedong.
* Centralismo democrático (los órganos del partido deciden por mayoría).
* Rejuvenecimiento de la dirección (jubilación a los 70 años).
* Creación de un Estado de derecho (concepto incluido en la Constitución en
1998): ha habido un gran desarrollo legislativo, se han dado pasos hacia la
independencia del poder judicial, los particulares ganan pleitos contra el
Estado, se ha introducido la presunción de inocencia en los procesos penales,
etc.
* Creación de una función pública profesional, en lugar de la designación por
el partido.
* Devolución de poder a provincias y municipios.
* Profesionalización de las Fuerzas Armadas, lo que ha supuesto la supresión de
su financiación a través del complejo económico que ellas
mismas controlaban.
* Lucha contra la corrupción.
* Introducción de la defensa de los derechos humanos en la Constitución (en
2004) y avances hacia su mayor respeto.
* Reconocimiento de la propiedad privada, aunque la propiedad pública seguirá
siendo “predominante” (hoy solo un tercio de los
sectores secundario y terciario son de propiedad pública).
Más allá de la teoría, el impacto social y psicológico de los enormes cambios
económicos tiene un profundo impacto en el sistema
político.
1. Emergencia de nuevas clases sociales.
Ha aparecido una nueva clase capitalista o burguesa: propietarios de medios de
producción, con asalariados (a veces miles de ellos), cuyas plusvalías se
apropian. Se habla de veinte millones de millonarios. Forbespublica cada año la lista de los cien principales.
La aparición de capital privado que escapa al poder del
Estado tiene una profunda significación política. Algunos empresarios privados
financiaban a los estudiantes durante los sucesos de
Tiananmen. Uno de ellos, Wan Runnan, pronunció una frase reveladora: “Tiananmen
ha sido posible porque China
ya tiene nueva clase social, y ha fracasado porque esta clase todavía es
demasiado débil”.
Junto a la clase capitalista, hay clases medias, concentradas
en las grandes ciudades de la costa, que crecen cada día que pasa. Algunas
estimaciones sitúan entre 60 y 100 millones los miembros de familias con rentas
anuales entre los 10.000 y los 30.000 dólares.
2. Reducción del poder del Estado
Era el monopolio de la propiedad pública lo que daba al Estado un poder
omnímodo sobre los ciudadanos: la empresa o el ministerio facilitaban la
vivienda, el colegio de los niños, la asistencia médica, la pensión, etc.; si
alguien perdía su puesto de trabajo, o era enviado al campo “a reeducarse”, él
y su familia quedaban desamparados. Solo un tercio de
la propiedad de las empresas es pública.
El otro gran instrumento de control social era la
planificación estatal de la economía. Hoy, en China, el 95% de los
precios son fijados por el mercado; el Estado se limita a ejercer el control
macroeconómico, la supervisión y la planificación a largo plazo. Las
administraciones públicas controlan poco más del 20% del PIB, un
porcentaje muy inferior al de los países capitalistas más avanzados.
La conclusión detodo lo anterior es una gran reducción del poder del
Estado sobre la economía y la sociedad.
3. Difusión de la educación y la información
Si en 1989 había dos millones de universitarios, hoy hay más de veinte
millones. Por otra parte, medio millón de estudiantes cursan estudios en el
extranjero: si hace veinte años regresaba el 3%, hoy lo hacen más de la mitad.
Entre ingenieros y científicos, China
produce 1,3 millones de graduados al año.
Hay cerca de 800 millones de teléfonos móviles y más de 150 millones de
internautas. Internet ejemplifica el dilema al que se enfrentan los dirigentes
chinos: desearían tener sus ventajas, una economía del siglo XXI, pero sin sus inconvenientes,
principalmente la reducción del
control político sobre la población. Para ello
cuentan con un ejército de no menos de 50.000
censores. Pero esto es querer poner puertas al campo.
Si la disyuntiva es apostar por un país moderno, pagando el precio político de
un menor control sobre la población, o bien, para evitarlo, suprimir Internet y
tener un país del siglo XIX, los dirigentes chinos no dudan en elegir la
primera de estas alternativas.
Resquebrajado el monopolio estatal de la información, cada
vez resulta más difícil lavar el cerebro de los ciudadanos.
4. Mayores cotas de libertad individual
A diferencia de lo que ocurría hace 30 años, hoy los chinos pueden decidir
dónde viven y trabajan, pueden crear sus propias empresas y controlar el
capital acumulado, viajar dentro y fuera del país, decidir dónde educan a
sus hijos (incluso en elextranjero, si tienen medios para ello)… Por otra
parte, las provincias costeras tienen acceso a la televisión de Hong Kong y
Taiwán, el avance hacia el Estado de derecho les permite ganar pleitos contra
el Estado, disponen de móviles e Internet, etc. Un
prototipo cada vez más abundante en la gran ciudad es el de un joven de 30 ó 40
años, empleado por una empresa privada o una point-venture, con móvil y
conexión a Internet, con acceso a televisiones extranjeras, y que viaja a
menudo al extranjero. Es obvio que este ciudadano
piensa por su cuenta y es inmune a la propaganda estatal.
5. Apertura de China al mundo
Tras siglos de aislamiento, China perdió el tren de la Revolución Industrial y
el resultado fue un siglo de sumisión casi colonial a partir de la primera
Guerra del Opio (1840). China
ha aprendido la lección: no cabe el aislamiento. La reforma económica y el
ingreso en la OMC (2001) simbolizan la demolición de la Gran Muralla. Hoy hay
poderosos flujos en ambas direcciones: hombres de negocios, estudiantes,
turistas, medios de comunicación, móviles, Internet, etc.
6. Descentralización
El poder de las provincias y los municipios ha crecido mucho en los últimos
años, en detrimento del
poder del
centro.
Los dirigentes chinos no quieren una democracia liberal, pero sí un país rico y fuerte. Para
ello han de desarrollar las fuerzas productivas,
creando una economía de mercado. Este proceso conlleva los efectos sociales y
políticos descritos, que implican una fuerte reducción del poder del
Estado. Es decir, China
cabalga sobre unagran paradoja: el desarrollo económico, por un
lado, otorga una nueva legitimidad al PCCh, refuerza su poder; por otro,
debilita ese poder de mil maneras.
Hay economías de mercado sin democracia (Hong Kong,
Singapur o, antes de su democratización, España, Corea del
Sur o Taiwán), pero no hay democracia sin economía de mercado. China está sentando las bases para poder tener algún día una democracia.
En comparación con 1978, cuando Deng Xiaoping inició la reforma económica, China ya es un país
mucho más abierto y plural; un sistema autoritario, ya no totalitario,
proyectado sobre una economía de mercado cada vez más difícil de distinguir del capitalismo. China
sorprendió al mundo con sus cambios económicos. La apertura del sistema
político desde dentro es un escenario posible. El PCCh es muy
consciente de que es preciso ir adaptando el sistema político al cambio
económico.
Liu Ji, presidente de honor de la China-Europe International Business School
(CEIBS) de Shanghai: “Cuando la gente tenga lo suficiente para comer y vestirse
querrá expresar su punto de vista. Si el PC debe servir a la
gente y seguir siendo la vanguardia de los tiempos, deberá adoptar nuevas
medidas para satisfacer esta demanda del
pueblo”.
V) ESTRUCTURA DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA DEL ESTADO DE MÉXICO
En los términos de su ley orgánica esta integrada de la siguiente forma:
ï‚· Administración Central, con el titular del Ejecutivo, sus unidades
administrativas de Salud Pública, Comunicación Social, Auditorias y
Coordinación de Servicios de Asesoría y apoyoTécnico, así como el Procurador
General de Justicia, como Consejero Jurídico del Gobierno y encargado, del
Ministerio Público, y las siguientes dependencias:
ï‚· Secretaría de Gobierno. Encargada de conducir, por delación del Ejecutivo, la política interna del Estado, la
coordinación y supervisión del
despacho de los asuntos encomendados a las demás Secretarías (artículo 20 y
21).
ï‚· Secretaria de Finanzas y Planeación: Encargada de la Administración
Financiera y Tributaria del Estado. Así también, tiene
encomendada la planeación, programación, presupuestación y evaluación de las
actividades del
Ejecutivo del Estado (artículos 23 y 24).
ï‚· Secretaria del Trabajo. Ejerce las atribuciones que
en materia de trabajo corresponden al Ejecutivo del
Estado (artículos 37 y 28).
ï‚· Secretaria de Educación, Cultura y Bienestar Social.
Es la encargada de fijar y ejecutar la política educativa,
cultural y de bienestar social de la entidad (artículos 29 y 30).
ï‚· Secretaria de Desarrollo Urbano y Obras Públicas.
Encargada de ordenar los asentamientos humanos, regular el desarrollo urbano, y
proyectar y ejecutar las obras públicas del Estado
(artículo 31).
ï‚· Secretaria de Comunicaciones y Transportes. Tiene
a su cargo el desarrollo y la administración de la red carretera, y la
regulación del
transporte y las comunicaciones de jurisdicción local (artículo 32).
ï‚· Secretaria de Ecología. Le
corresponde la formulación y evaluación de la política estatal en materia
ecológica (articulo 32-bis).
ï‚· Secretaria de Desarrollo Agropecuario.Tiene encomendado regular, promover y
fomentar el desarrollo agrícola, ganadero, forestal e hidrológico del Estado, así como
el establecimiento de agroindustrias, y la de coadyuvar en la atención y
solución de problemas agrarios en el Estado (artículos 33 y 34).
ï‚· Secretaria de Desarrollo Económico. Regula,
promueve y fomenta el desarrollo industrial y comercial del
Estado (artículos 35 y 36).
ï‚· Secretaria de Administración. Se encarga de
prestar el apoyo administrativo que requieren las dependencias del
Poder Ejecutivo del Estado (artículos 37 y 38).
ï‚· Secretaría de la Controlaría. Es la encargada de
la, fiscalización y control de los ingresos, gastos, recursos y obligaciones de
la Administración Pública estatal y su sector auxiliar, así como lo relativo a
la manifestación patrimonial y responsabilidades de los servidores públicos
(artículo 38-Bis).
También se prevé la desconcentración dentro de la organización centralizada,
así como existencia de
un Tribunal de Arbitraje, una Junta Local de Conciliación y Arbitraje, y un
Tribunal de lo Contencioso Administrativo, como órganos jurisdiccionales de la
Administración Pública Estatal, dotados de plena autonomía para dictar sus
fallos.
ï‚· Administración paraestatal. Esta integrada por los
organismos auxiliares creados por el Congreso Estatal, a solicitud del Ejecutivo o por una orden de éste, quien puede además
ordenar su fusión o liquidación. Estos organismos auxiliares son
ï‚· Organismos descentralizados;
ï‚· Empresas de participación estatal;
ï‚· Fideicomisos público