antecedentes
EXTERNOS
Pensamiento político de la ilustración Reformas borbónicas
Independencia de las 13 colonias Revolución francesa Crisis
políticas y económicas de España
Los criollos novohispanos, relegados a 2do termino por los españoles
ibéricos fueron conocedores de que en Europa, específicamente en
Francia, existía una corriente de pensadores que planteaba la
posibilidad de otro orden de gobierno, diferente al monarquico. A lo
largo del
siglo XVIII, en Europa, algunos filósofos e intelectuales desarrollaron
una nueva manera de explicar la realidad. Ese grupo se centro en torno a una
nueva percepción del mundo que hacia de
la razón humana la forma mediante la cual se debía explicar la
vida misma; a esa corriente filosófica se le conoció como .
Para la segunda mitad del siglo XVIII, varios
filósofos franceses habían publicado diversos ensayos en los que
cuestionaban a las monarquías absolutas. Entre los mas
destacados se hallaron Montesquieu, Voltaire y Rousseau.
La serie de ideas que estos hombres propagaron con mucha mesura, pero
también con ironía, fueron conjuntadas en la Enciclopedia o
Diccionario Razonado de las Ciencias , las Artes y los
Oficios. A mediados del siglo XVIII la dinastía
de los Borbón decidió modificar el estilo de gobierno que
había establecido la Casa de los Habsburgo, en todo el imperio
español. Por ello, inicio un proceso de
reorganización pararestringir los atributos que la Corona
había delegado en grupos y corporaciones, y los asumió mas
directamente, tanto en la política administrativa como en la economía. La
pretensión basica era instaurar el o predominio de los intereses del
monarca y del Estado sobre los de los individuos y las corporaciones.
Esta reordenación política se propuso la recuperación de
los poderes y una mayor participación económica de la Colonia en
el funcionamiento de la metrópoli, pues España necesitaba una
transformación ordenada, racional y orientada que le permitiera a la
monarquía acelerar su propio desarrollo interno para poder competir con
sus eternos rivales: Francia e Inglaterra. Los habitantes de las 13 colonias
britanicas asentadas en parte de la costa atlantica de lo que hoy
llamamos Estados Unidos de América vivieron en la segunda mitad del siglo XVIII su guerra de
independencia respecto a la Corona
inglesa. Estos deseaban libertad religiosa, política y de trabajo, pues
observaban como
las tierras que ellos trabajaban rendían importantes beneficios que, por
disposiciones reales, iban a parar a Inglaterra. Ademas,
habían logrado una organización interna, que les permitía
margenes de prosperidad.
Formaron un grupo consolidado que se rebelo contra el
rey Jorge III de Inglaterra.
La guerra de independencia norteamericana fue apoyada por Holanda, Francia y
España, antiguos enemigos deInglaterra. Tras varias
luchas, las tropas britanicas fueron vencidas definitivamente en Yorktown, en 1781. Dos años mas tarde, Gran
Bretaña reconoció la independencia de sus colonias tras firmar un acuerdo de paz en Versalles. Fueron varias las causas que
llevaron a la determinación de combatir contra el monarca, entre ellas
el ascenso económico de la burguesía; el aumento de una
población joven que deseaba cambios políticos; las recurrentes
hambrunas resultado de malas cosechas y, por lo tanto, del incremento de los
precios de alimentos basicos; el evidente derroche de la nobleza y la
crisis hacendaría del imperio francés.
Para tratar de subsanar los problemas
económicos de Francia, Luís XVI decidió incrementar los
impuestos a los sectores realmente productivos: la reacción no se hizo
esperar. El malestar creció de tal manera que
el monarca intento conciliar llamando a asamblea de los 3 estados. La
reunión no resolvió los problemas y en el interior de la nobleza
y el clero se vivieron rupturas. El 3er estado decidió llamar a asamblea general. El absolutismo se
rompió. Al intentar formar una asamblea para redactar una
constitución con la intención de contener los excesos de la
monarquía no se llego a ningún acuerdo y surgió la
rebelión popular que desemboco en la toma de la Bastilla.
El inicio del
siglo XIX fue de grandes trastornos para la monarquía española.
Si bien larevolución francesa de 1789 había propiciado ideas de
libertad e igualdad, aceptadas por grupo liberales que surgían en la
península ibérica, la realidad francesa había desembocado
en otra nueva experiencia imperial, esta vez encabezada por Napoleón
Bonaparte. La determinación expansionista de Napoleón lo llevo a
rivalizar con Inglaterra, pero antes invadió España, hizo
prisionero al rey Fernando VII y corono a José Bonaparte como
el nuevo rey.
A partir de ese momento la realidad interna española evidencio la
existencia de 2 poderosos grupos que persistirían por muchos años:
Los conservadores: con ideología tradicionalista; y
Los liberales: con una ideología progresista.
ANTECEDENTES INTERNOS
Monopolis económicas y políticas de los españoles La
expulsión de los Jesuitas Nacionalismo criollo y problemas
económicos de la Nueva España Insurrecciones populares La conjura
del ayuntamiento de la ciudad de México, Valladolid y Querétaro
Es necesario precisar que todas las reformas introducidas por los Borbón
tuvieron un fin basico: cancelar una forma de gobierno que les
había permitido a los novohispanos cierta autonomía e imponer
otra de mayor obediencia hacia el monarca.
Ante esta determinación basica, José de Galvez se
traslado de España a tierras americanas con la orden real de promover
una serie de reformas que sujetaran a la colonia mediante la
incorporación a las funcionesadministrativas de hombres adeptos solo al
soberano, pues no podía existir poderes corporativos o privados que
rivalizaran con el, ni privilegios que atentaran contra el interés
supremo de este tipo de estado.
La principal enemiga era entonces la iglesia, corporación que desde 1492
hasta 1700 había sido el apoyo basico de la Corona, aliada y
socia, pues convertía a los americanos nativos normaba la conducta y
actitudes personales de todos los súbditos del rey y reforzaba la imagen
de reverencia y autoridad ante la corona, enseñando que el sistema
jerarquico social, político y económico establecido era el
orden natural de vida en la Tierra dado por Dios. La ultima de las ordenes
religiosas en establecerse en la Nueva España fue la
Compañía de Jesús, a cuyos miembros se denomina jesuitas.
La llegada de estos misioneros, en 1572, presento una diferencia muy marcada
respecto a las ordenes que les precedieron, pues no solo se interesaban en
evangelizar, sino también en educar.
Pronto los jesuitas fueron los principales maestros de los
criollos y su influencia, también en lo territorial, creció
poderosamente, sobre todo en sus misiones establecidas en la zona de los
chichimecas.
Difícil y lento fue el avance de estos misioneros, pero debido a su
habilidad para estudiar y comprender lenguas diferentes, así como
su idea de comunidad, se ganaron la confianza de los pobladores.
Los jesuitas seconsolidaron como una orden religiosa
económicamente muy fuerte, justo para los años en que Carlos III
pretendía un mayor control de Nueva España y de sus recursos. En
1767 dicto la orden de su expulsión, ademas de notificarles que
quedaban incomunicados y solo podían llevar consigo lo elemental. Los
criollos no se dieron por vencidos ante los embates monarquicos y
encaminaron sus anhelos de mayor participación política hacia los
cabildos municipales, los curatos y los niveles inferiores y medios del
ejercito y, por lo tanto, a transformar estas instituciones en recintos políticos
dedicados a la defensa de sus intereses.
Para principios del
siglo XIX la realidad económica en Nueva España era de crisis:
las insuficientes y malas cosechas de las tierras comunales de los
indígenas, así como
de los pequeños productores, obligaba a los campesinos a salir de sus
comunidades hacia las ciudades en busca de la asistencia hospitalaria y de la
caridad. La pobreza generaba enfermedades que se transformaban en epidemias. Nueva España vivió en estos años la miseria,
desempleo y la migración hacia las regiones y ciudades mas prosperas, lo
que pronto causo desequilibrios y malestar social. Una visión mas
completa de lo sucedido a finales del s. XVIII en Nueva España
necesariamente obliga a referir algunos síntomas de malestar que se
expresaron por los trabajadores de las minas y del campo.Ambos grupos
también resistieron el peso de las nuevas ordenes monarquicas
para la regulación de las actividades económicas y, en el caso de
la extracción de plata, fue notorio.
La respuesta indígena tuvo como soporte, en estos casos, su
rechazo a entregar mas hombres de sus comunidades para ser llevados a trabajar
a las minas, pues ya consideraban bastante el tener que entregar tributo.
El malestar social englobaba a diferentes actores y la región del Bajío los acogía a todos, por lo que en
tal región empezaron a surgir, mas frecuentemente, evidencias de querer
acabar con tal situación. Una vez que se conjuntaron las influencias
ideológicas surgidas en Europa y los Estados Unidos de América
con las situaciones internas de la Nueva España, se vivió un
conflicto interno entre quienes pretendían mantener la relación
colonial, sin alteraciones, representados por la Real Audiencia y el
ayuntamiento, lugar donde los criollos habían ganado posición y
buscaban reformar la vida de la colonia.
Las noticias de la invasión napoleónica a
España llegaron a la Nueva España. La burocracia hispanica
sabia que los criollos actuarían inmediatamente. El 19 de julio, el ayuntamiento de la ciudad de México, en
representación de todo el reino, hizo llegar al virrey una conciliadora
posición para mantener la gobernabilidad, sin dejar de precisar su
postura respecto a quien le correspondía la soberanía.