La celiaquía es la intolerancia permanente
al gluten, conjunto de proteínas presentes en el trigo, avena, cebada y
centeno (TACC) y productos derivados de estos cuatro cereales. Pueden padecerla
tanto niños como
adultos. Actualmente, la incidencia es mayor en mujeres, que
en varones.
Las proteínas se clasifican en dos grupos, prolaminas
y gluteninas. Las prolaminas reciben distintos nombres según el
cereal de origen:
Trigo = gliadina
Avena = avenina
Cebada = hordeína
Centeno = secalina
El gluten de los cereales mencionados es la forma mas conocida de
presentación de las prolaminas tóxicas para los celíacos.
La gliadina constituye el mayor problema, es la mas utilizada en la
industria alimenticia.
La avena pareciera no producir daño pero, en su proceso de
industrialización, puede encontrarse contaminada granos de trigo, cebada
o centeno.
La Celiaquía se presenta en personas que tienen predisposición
genética a padecerla. Se sabe que aparece con mas frecuencia
entre miembros de la misma familia.
Se estima que en Argentina 1 de cada 100habitantes
puede ser celíaco.
Esta intolerancia produce una lesión característica de la mucosa
intestinal provocando una atrofia de las vellosidades del intestino
delgado, lo que altera o disminuye la absorción de los nutrientes de los
alimentos (proteínas, grasas, hidratos de carbono, sales minerales y
vitaminas). Es este fenómeno el que produce el
clasico cuadro de mala absorción.
La característica principal que define a esta
atrofia vellositaria es que, la mucosa intestinal se normaliza cuando se inicia
la dieta sin TACC.
También se presenta asociada a enfermedades
autoinmunes y genéticas y se puede descubrir en pacientes
asintomaticos
Se dice que la celiaquía es una condición autoinmune, es decir
que el sistema de defensa de los celíacos reconocería como
'extraño' o no perteneciente al organismo, al gluten, y
produciría anticuerpos o 'defensas' contra el mismo. Estos
anticuerpos provocarían la lesión del intestino con destrucción o atrofia
de su mucosa (capa interior del
intestino), produciéndose una alteración en la absorción
de los alimentos.