Para entender
matematicas hay que leer
Investigaciones han encontrado que el fracaso en
matematicas se debe a deficiencias en lectoescritura, y viceversa. Estas areas dependen la una de la otra para que los
estudiantes avancen.
El campeón y el subcampeón del último Concurso de
Ortografía de EL TIEMPO se mueren por leer, llenar crucigramas y
aprender palabras nuevas a toda hora. Nada raro sería verlos como
escritores o filólogos reconocidos. Pero no.
Daniel Castillo, el ganador, empezó a estudiar
ingeniería civil este semestre. Y Juan Sebastian Marulanda, el
segundo lugar, decidió irse por la ingeniería electrónica.
Parece un gran cruce de cables, pero según los
investigadores en pedadogía, desde hace algunos años encontrar
casos así es de lo mas normal. Incluso algunas investigaciones, como las que lidera Brian
Butterworth en el University College de Londres (Inglaterra), han encontrado
que así como
el cerebro humano tiene unas zonas para procesar el lenguaje, también
tiene otras para realizar calculos artiméticos. Y, ademas, dicen que las dos actividades comparten algunas
de esas zonas.
Bruno D'Amore, investigador de la Universidad de Bolonia (Italia) y quien ha
publicado librossobre el tema, dice que hace relativamente poco se esta
hablando de lenguaje y matematicas como dos areas que no pueden
sobrevivir separadas (ver recuadro). Según él, el viejo mito de que hay gente
'negada para las matematicas' se resuelve cuando se mira el
fondo del
problema: 'en realidad la falla esta en que esa persona no tiene
unas buenas bases en lenguaje y no es capaz de comprender el problema que se le
plantea', dice el experto.
Llegan con deficiencias
Eso mismo cree Ruth Angela Ortiz, jefa de
Ciencias y Artes de la Universidad de Antioquia. 'En la medida en que una
persona empieza a desarrollar procesos verbales, escritos y cosas mas
complejas como
lo semiótico (significados), puede hacer operaciones mentales mas
agiles al trabajar con números o con geometría', dice
la investigadora. 'Es un avance paralelo', agrega.
Y si no es avance sino estancamiento, el proceso
también es paralelo. De esto da fe la Universidad de la Sabana,
en Bogota, donde las primeras clases de ingeniería suelen ser un
dolor de cabeza. 'Cuando uno recibe un grupo, lo
primero que tiene que atacar es la mala comprensión de lectura. Si usted
no lee correctamente un problema matematico no
lo va a entender yno lo va a resolver. Entonces nos toca enseñarles
bases de español también', dice Mauricio Restrepo, jefe del
Area de Matematicas de esa institución.
Según Restrepo, buena parte del
problema se debe a que son pocos los maestros que enseñan
matematicas como la solución de
problemas reales, no solo como
operaciones con nombres raros. Y, también, a que la
comprensión lectora y la capacidad de interpretar no son precisamente
los pilares de las clases de español de hoy. 'Los profesores
le tienen miedo a que los estudiantes vayan a clase con calculadora o que usen
un computador para resolver los ejercicios. Pero la esencia
no esta en resolver una ecuación, sino en entender el problema y
aplicar el resultado de esa ecuación en una decisión', dice.
Es lo mismo que dice Jacqueline Duarte, investigadora en cognición de la
Universidad de Antioquia. 'Es tal la
relación entre la clase de español y la de matematicas,
que las dos tienen el mismo lío: no se aprende lo que no se usa'.
El problema es entender el problema
'Dos mas equis es igual a cinco. Busque la
incógnita'. Eso a un profesor le
parece simple. Pero uno ve al alumno y él lo que hace
es tratar de traducir eso a su lenguaje de todos losdías, para poder
comprender. Y si no lo puede traducir, no puede
resolver el problema.
Es como
cuando uno esta aprendiendo un idioma extranjero: no puedo empezar con
lo mas complejo, y ademas me tienen que dar tiempo para manejar
ese lenguaje.
Por eso los profesores deben aprender a no tener prisa, dejar que los
estudiantes hablen en sus términos, pero siempre y cuando al final del
curso ellos ya manejen ciertos conceptos cercanos al lenguaje de las
matematicas.
Ademas, cuando se estudia matematicas se utilizan registros como
dibujos o fórmulas, y en una investigación reciente descubrimos
que cada niño aprende solo con uno de esos recursos. Es clave que cuando
el profesor utilice un registro semiótico se
dé cuenta de si el niño lo entiende o no.
Y no es cierto que haya gente que no pueda aprender esta materia ni que después de cierta edad haya un bloqueo para
estudiar. Leonardo Da Vinci no aprendió
matematicas hasta que cumplió 42 años. Cuando se
enfrentaba al calculo no alcanzaba a hacer lo que un
niño de 11 años hace ahora. Pero luego fue
destacado también en esa area'.