MONARQUÍA ROMANA
La monarquía romana (en latín, Regnum Romanum) fue la primera
forma política de gobierno de la ciudad estado de Roma, desde el momento
legendario de su fundación el 21 de abril del 753 a. C., hasta
el final de la monarquía en el 509 a. C., cuando el
último rey, TARQUINIO EL SOBERBIO, fue expulsado, instaurandose
la República romana.
Los orígenes de la monarquía son imprecisos, si bien parece claro
que fue la primera forma de gobierno de la ciudad, un
dato que parece confirmar la arqueología y la lingüística.
La mitología romana vincula el origen de Roma y
de la institución monarquica al héroe troyano ENEAS,
quien, huyendo de la destrucción de su ciudad, navegó hacia el
Mediterraneo occidental hasta llegar a Italia. Allí fundó
la ciudad de Lavinio, y posteriormente su hijo ASCANIO fundaría ALBA
LONGA, de cuya familia real descenderían los gemelos RÓMULO y
REMO, los fundadores de Roma. La leyenda cuenta que Roma fue fundada por
RÓMULO en el año 753 a.C. El y su hermano REMO, descendientes de
troyanos, fueron abandonados de pequeños y sobrevivieron amamantados por
una loba, hasta que alguien los recogió. Con el tiempo, Rómulo
decidió fundar una ciudad en ese lugar.
Problematica histórica de la monarquía romana
Las crónicas tradicionales de la historia romana, que han llegado hasta
la actualidad a través de autores clasicos como TITO LIVIO,
PLUTARCO, VIRGILIO, DIONISIO DEHALICARNASO y otros, cuentan que en los primeros
siglos de la vida de Roma hubo una sucesión de siete reyes. La
cronología tradicional, narrada por VARRÓN, arroja la cifra de
243 años de duración total para estos reinados, es decir, un
promedio de 35 años por reinado (mucho mayor que el de cualquier dinastía
documentada), aunque ha sido desestimada actualmente, desde los trabajos de
BARTHOLD GEORG NIEBUHR. Los GALOS, liderados por BRENO, saquearon Roma tras su
victoria en la batalla de Alía en el 390 a. C. (POLIBIO da la
fecha del 387 a. C.), de forma que todos los registros
históricos de la ciudad resultaron destruidos, incluyendo aquellos de
las fases mas antiguas, por lo que las fuentes posteriores han de
tomarse con cautela. Las crónicas tradicionales analizan las evidencias
arqueológicas de los inicios de Roma, que no obstante coinciden en
señalar su poblamiento a mediados del siglo VIII a. C.
Características de la monarquía romana
Antes de su etapa Republicana, Roma fue una monarquía gobernada por
reyes (en latín, rex, pl. reges). Todos los reyes,
excepto RÓMULO (por haber sido el fundador de la ciudad), fueron
elegidos por la gente de Roma para gobernar de forma vitalicia, y ninguno de
ellos usó la fuerza militar para acceder al trono. Aunque no hay
referencias sobre la línea
hereditaria de los primeros cuatro reyes, a partir del
quinto rey, TARQUINIO PRISCO, la
línea de sucesiónfluía a
través de las mujeres de la realeza. En consecuencia,
los historiadores antiguos afirman que el rey era elegido por sus virtudes y no
por su descendencia.
LA REPÚBLICA ROMANA
La palabra República viene de las voces latina Res: Cosa; Pública: Pueblo. Corresponde
así, del año 509 al 29 a.c., periodo en el cual Roma alcanza su
mayor esplendor y poderío con el afianzamiento de sus instituciones de
gobierno y de justicia, así como de la administración del bien
público y del anhelo de superación de las cuestiones sociales.
Fue un periodo de la civilización romana
antigua caracterizado por un régimen de Gobierno Republicano. Se
inició con el derrocamiento de la Monarquía Romana, 509 a. C., y
duró mas de 450 años, hasta los conflictos por el poder, a
través de una serie de guerras civiles, hasta desembocar en un forma de gobierno imperial.
La República Romana se rige por una constitución compleja, que se
centró en los principios de una separación de poderes, controles
gubernamentales, equilibrios de poder. La evolución de la
República Romana fue fuertemente influenciada por la lucha entre la
aristocracia, patricios, y los romanos con riquezas,
pero que no eran de familias nobles, que eran apoyados por los plebeyos por
pertenecer a esta clase social.
El gobierno reposaba en el equilibrio de los poderes, que se alcanzaba con el
mutuo control por parte de las diferentes clasespolíticas: senadores,
magistrados y el pueblo.
Poco a poco la República Romana extendía su poder, y en menos de
40 años ya se había expandido hasta abarcar Sicilia,
Macedonia, el Asia Menor,
Africa del
Norte y España. Cartago (cerca de la actual Túnez),
declaró la guerra a Roma a la que consideró una amenaza; al final
de las famosas Guerras Púnicas, Cartago fue derrotada y Roma
consolidó el control de todo el Bajo Mediterraneo.
Desde el siglo II a.C. la sociedad romana sufrió numerosos cambios: se
aceptó el divorcio, las mujeres podían poseer bienes y hasta se
controlaban los nacimientos; el romano se hizo
mas fino, cultivado y se interesaba mas a la vida pública.
Pero los campesinos, empobrecidos y carecientes de los
derechos de la aristocracia, se rebelaron. Fue la época de la
revuelta del
famoso esclavo Espartaco, que culminó con la caída de la
República en el 71 a.C.
EL CRISTIANISMO EN ROMA
El 27 febrero del
año 380, el cristianismo se convirtió en la religión
exclusiva del Imperio Romano por un decreto del emperador FLAVIUS THEODOSIUS, lo que
tuvo trascendentales consecuencias.
El decreto unió las raíces judeo-cristianas del continente
europeo con la cultura greco-romana. Hasta el Concilio de Nicea, en el
año 325, las iglesias cristianas eran
incendiadas, quienes profesaran la religión cristiana eran perseguidos y
su patrimonio era confiscado. Particularmente bajo el emperadorDIOCLECIANO
(245-316) se intensificó la persecución cristiana.
DIOCLECIANO quería revivir los viejos cultos paganos y que éstos
se convirtieran en la religión del imperio. Pero
su política anticristiana fracasó y fue eliminada por su sucesor,
el emperador Constantino (285-337).
El aparato militar y el administrativo funcionaban bien en el
Imperio Romano. Una zona de libre comercio
había impulsado el bienestar económico. Los
habitantes de Roma gozaban de derechos civiles, lo que promovía una
creciente cohesión entre la población, sin embargo, no
había libertad religiosa.
Las relaciones entre el Imperio y la Iglesia atravesaran por diversas
etapas: primero, en el período mas temprano, una indiferencia de
aquél y una comprensión de la segunda del rol histórico del Imperio, en el
marco de un Plan Providencial, lo que se refleja en la temprana
aparición, a fines del
s. I d.C.,
en la liturgia, de la oración por los gobernantes para que Dios los
ilumine en su tarea. En segundo lugar, la etapa llamada de las persecuciones,
cuando los cristianos se niegan a adorar imagenes del emperador, por
considerarlo un acto de idolatría. La autoridad imperial
respondió duramente frente a lo que juzgó un
crimen de lesa majestad, un acto de rebeldía contra Roma y sus
practicas. Siendo, pues, perseguida la Iglesia, sus
miembros se reuníansecretamente en lugares ocultos, corriendo siempre el
peligro de ser vistos y denunciados. Fueron tiempos aciagos, turbulentos
y cruentos, pero también heroicos; muchos cristianos llevaron su fe hasta las últimas consecuencias, prefiriendo
entregar su cuerpo a los verdugos antes que su alma. Quienes de esta manera obraron son los
llamados martires, puesto que dieron testimonio de su fe.
Al martirio estaban llamados todos los cristianos, y encontramos en las Actas
de los Martires a hombres comunes y corrientes, mujeres, niños y
ancianos; es un nuevo tipo heroico -que calara profundo en el Mundo
Medieval- en el cual tiene cabida la santidad, la lucha interna y personal
contra la tentación y la debilidad, frente al antiguo heroísmo de
las grandes gestas protagonizadas por grandes y sobresalientes hombres. Este triste
episodio de las persecuciones llegara a su fin -salvo contadas
excepciones- en el año 313 con la promulgación del Edicto de
Milan por el emperador Constantino el Grande (306-337). No podemos
detenernos aquí en la debatida cuestión de la conversión
de Constantino; bastenos con señalar que, aunque pudieron tener
peso en un primer momento cuestiones de tipo
político o la pura superstición, no cabe duda que su
conversión, a la larga, fue sincera. No fue esta la única reforma
de Constantino, pero sí la mas relevante y de mayor alcance, ya
que implicó un giro histórico de alcance
universal.