El movimiento estudiantil de 1968 fue un
movimiento social en el que ademas de estudiantes de la UNAM, IPN,
y diversas universidades, participaron profesores, intelectuales, amas de casa,
obreros y profesionistas en la Ciudad de México y que fue
reprimido el 2 de octubrede 1968 por el gobierno
de México en la matanza en la Plaza de las Tres
Culturas de Tlatelolco y finalmente disuelto en diciembre de ese
año. El hecho fue cometido por el grupo paramilitar
denominado Batallón Olimpia, la DFS y el Ejército
Mexicano, en contra de una manifestación convocada por el Consejo
Nacional de Huelga, órgano directriz del movimiento. Según lo
dicho por sí mismo en 19691 y por Luis Echeverría
Alvarez, el presunto responsable de la matanza fue Gustavo
Díaz Ordaz.2 Posteriormente fueron acusados Echeverría,
Díaz Ordaz y otros altos funcionarios de haber trabajado para la CIA.
Debido a la acción gubernamental al pretender ocultar
información, no se ha logrado esclarecer exactamente la cantidad oficial
de asesinados, heridos, desaparecidos y encarcelados. La fuente oficial
reportó en su momento 20 muertos, pero las investigaciones actuales
deducen que los muertos podrían llegar a varias centenas y
responsabilizan directamente al gobierno de México.3 El
corresponsal de la BBC de Londres en México, Julian Petiffer,
quien presenció los hechos, mencionó enun despacho
noticioso4 que 'en una destacable demostración de estupidez,
brutalidad, o ambas juntas, el ejército y la policía pasaron
fuego de ametralladores por miles de manifestantes pacíficos y gente que
iba de paso por el lugar' y estimó el número de
estudiantes asesinados en (al menos) 200.5
Politólogos e historiadores coinciden en señalar
que este movimiento y su terrible desenlace incitaron a una permanente y
mas activa actitud crítica y opositora de la sociedad civil,
principalmente en las universidades públicas, así como a
alimentar el desarrollo de guerrillas urbanas y rurales y dio cabida
al periodo conocido como la Guerra Sucia. La Fiscalía Especial para
los Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (FEMOSPP), incluye el
movimiento del 68 en su informe de febrero 2006 con respecto a dicho periodo.
La visión de Cortes en primer momento frente al otro es una visón
de deslumbramiento sobre la tierra descubierta, sus riquezas son siempre
exaltadas en las cartas y hay un choque frente a la
religiosidad de los indígenas principalmente. Cortes describe en las
primeras cartas una relación harmónica con los conquistados y en
algunos momentos en que se pusieran contra sus mandamientos describe que
él consiguió volverlos a hacer la voluntad de Dios y de la
corona. En el fragmento adelante Cortés explica que Mutezuma y personas
importantes le ayudaran a sacar las imagenes de los ídolos y
describe ser comprensible a ellos tal acto.
“Mutezuma y muchos de los principales de la ciudad dicha, estuvieran
conmigo hasta quitar los ídolos y limpiar las capillas y poner las imagenes , y todo con alegre semblante.”
En los comentarios de Inca Garcilaso de la Vega, la cuestión de la
identidad y la búsqueda dereconocimiento parte del principio que
Garcilaso legitima su valor por ser indio y la autenticidad de sus afirmaciones
parten de otro foco, no de quien vivió y vio los hechos pero si de quien
oyó a través de su familia y ademas de eso su
posicionamiento frente a la cuestión de la lengua permea una argumentación
muy fuerte. Frente a relatos que se tornaran verídicos sólo por
la visión de lo conquistador Garcilaso dice no querer enfrentar lo que
ya esta puesto en la historia pero sus argumentos son basados al otro
lado de la historia, sobre la mirada del
conquistado.
“Decirlo tantas veces por este mismo
término “llamamos” es dar a entender que los
españoles se lo llaman, porque lo dice hablando con ellos.Y que los
indios no tenían tal dicción en su general lenguaje. De lo cual
yo como indio Inca, doy fe de ello”
“Mas después que los Incas sojuzgaron
todo aquel reino a su imperio le fueron llamando conforme al orden de las
conquistas y al sujetarse y rendirse los vasallos. Y
al cabo le llamaron Tahuantinsuyu o Incaprúnam.Los españoles,
advertiendo la variedad y confusión de estos nombres, le llamaron
prudente y discretamente Perú y Nueva Castilla.”
Autores como Fernand Braudel, Immanuel Wallerstein y Carlos
Antonio Aguirre Rojas coinciden en señalar al movimiento de
México inserto en un contexto planetario de luchas sociales surgidas y
recreadas de las universidades luego de vivirse un periodo de bonanza
económica por la Posguerra, siendo Braudel el primero en denominar al
movimiento Revolución cultural de 1968, caracterizado por
revolucionar para siempre los tres principales espacios de recreación de
la cultura: la familia, los medios de comunicación y la escuela.7