Al iniciar el siglo XVII la tenencia de la
tierra era irregular y compleja para lo cual se implantó una
técnica jurídica llamada composición con al cual se
acreditaba la propiedad de baldíos o realengas adquiridas de forma
ilegítima mediante un pago a la corona.
La injusta distribución de la tierra y el alto índice de
concentración de propiedad rural en manos de peninsulares y criollos
ocasionaron el descontento general lo cual influyó en la lucha de la
independencia iniciando así un estancamiento en
el orden catastral.
El catastro en el periodo de la independencia se caracteriza por generar las
primeras disposiciones de los antecedentes legales del catastro en
México esto se refleja en la Ley de Colonización la cual
favorecía la política colonizadora y al expansionismo
norteamericano.
Consumada la independencia, se evaluó la necesidad inaplazable
defomentar el desarrollo demografico y poblar bastas regiones del
territorio. Las leyes que se promulgaron posteriormente se inspiraron en tres
principios: reparto de tierras baldías a los militares, a los colonos
extranjeros y como
adjudicación de terrenos a los habitantes de los pueblos para lo cual se
promulgó la Ley sobre Ocupación y Enajenación de Terrenos
Baldíos.
Esta lucha por organizar al país e impulsar su desarrollo derivó
que en 1824 se promulgara la primera Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, con un sistema de gobierno republicano y
dividió el territorio en 19 estados, 4 territorios dependientes del
centro y un Distrito Federal.
En 1856 se promulgó la Ley de Desamortización de Bienes
Eclesiasticos cuyo objetivo era poner en circulación comercial
los bienes inmuebles eclesiasticos, civiles, ayuntamientos y pueblos indígenas.