Anarquismo hecho en Argentina
Aunque entre fines del siglo XIX y principios del XX el movimiento anarquista
argentino fue el de mayor importancia en Latinoamérica, ademas de
que su envergadura podía compararse con la de las organizaciones de esta
índole en Italia y España, fue perdiendo fuerza gradualmente
hasta casi desaparecer. Aún hoy sigue existiendo pero no con la misma
fuerza de accionar que tuvo hasta principios de la década de 1930, a
pesar de que sus ideas fueron, entre otras, impulsoras del movimiento obrero en Argentina.
Para entender un poco esta corriente de pensamiento, que siempre fue vapuleada
por todos aquellos políticos y opresores hambrientos de poder, vale
destacar que lo que motiva al anarquismo es la creación de una sociedad
libre de todo dominio autoritario, como el Estado, en la cual cada integrante
actúa con absoluta libertad y en defensa de ella, ademas de que
brega por el bien común ensamblado al propio. También persigue el
ideal del
colectivismo laboral sin existencia de jefes sino de organizaciones de
trabajadores en la cual cada uno sea dueño de aquello que produce sin
necesidad de tener a nadie por encima ni por debajo. De este
modo, destierra por completo el concepto de piramide jerarquica.
Sus bases principales son los principios de libertad, igualdad y fraternidad.
Los principios del
movimiento
El arribo de los primerosanarquistas provenientes de Europa a la
República Argentina
se remonta a 1871, quienes escaparon de París, Francia, luego de formar
parte del breve movimiento conocido como “Comuna de
París” que gobernó durante algunas semanas la capital
parisina. Alrededor de 1876 aparecía en el país la primera
agrupación acrata conocida como “Centro de Propaganda
Obrera”, quienes llevaban a cabo, principalmente, los principios del
ideológo ruso Mikhjail Bakunin. El 6 de enero de 1879, con Pedro Sanarau
como
director, surge la primera herramienta de propaganda de esta ideología:
el diario “El Descamisado”. Dentro de los inmigrantes que trajeron
consigo la ideología para comenzar a desarrollarla dentro de Argentina,
los mas resaltantes, ademas de los españoles, fueron los
italianos impulsados por la llegada del filósofo Errico Malatesta, quien
ademas se convirtió en uno de los principales pilares del
movimiento e influyó fuertemente dentro del país. Según dijo el historiador Osvaldo Bayer, esto se
debió a que poseía la predisposición para ver en los
obreros y sus organizaciones el mejor medio para difundir las ideas
anarquistas, ademas de su internacionalismo y su tendencia
organizacionista. Aunque regresó a Europa en 1889, creó un
grupo de estudios sociales, que organizaba sus conferencias durante su
estadía, y ayudó a la fundación del sindicato de
panaderos, también conocidacomo “Sociedad Cosmopolita de
Resistencia y Colocación de Obreros Panaderos”, el cual
impulsó el nacimiento de otras organizaciones de este tipo luego del
éxito de su primera huelga en 1888. El camino ya
estaba abierto para la nueva oleada.
El anarquismo comienza a organizarse
En la última década del siglo XIX comenzó la
reorganización de los grupos de afinidad, muchos de los cuales fueron
altamente combativos. Aunque parecía que la
consolidación de los acratas comenzaba a forjarse, aparecieron
enfrentamientos entre los que conformaban el movimiento. El choque se produjo entre los anarco- comunistas, que estaban
divididos entre quienes se manifestaban contrarios al sindicalismo y aquellos
que estaban a favor y defendían las ideas de Malatesta. Este
último grupo fue el que obtuvo mayor cantidad de adeptos, lo cual
generó que los opuestos a esta tendencia llegaran casi a desaparecer e
impulsó la celebración de un congreso que culminaría con
la creación de la FOA (Federación Obrera Argentina) el 25 de mayo
de 1901, que con el paso del tiempo pasaría a ser conocida como FORA
(Federación Obrera Regional Argentina). Ademas
de los anarquistas que formaban dicha organización, también
contaban con miembros socialistas. Pero no lograron
congeniar, por lo cual los sindicatos de estos últimos se apartaron
formando así la UGT (Unión General de Trabajadores), para
luegodisolverse y formar en 1909 la CORA (Confederación Obrera Regional
Argentina). En 1906, como
parte del movimiento obrero argentino, los
conflictos gremiales en señal de protesta impulsados por estas
organizaciones llegan a 323, lo cual comenzaría a desencadenar la
represión por parte del
gobierno.
Huelgas y represión gubernamental
La FORA y el Partido Socialista, ambos por separado, realizan manifestaciones
por el 1 de mayo de 1909, lo cual desembocaría en una masacre y la
llamada “Semana Roja”. El coronel Ramón
Falcón, jefe de la Policía de la Capital (la actual
Policía Federal Argentina), reprimió duramente el acto de la
FORA, cobrandose la vida de 80 manifestantes pacíficos y cientos
de heridos. En respuesta a esto, el 14 de noviembre de ese año el
acrata ruso Simón Radowiztky, de 17 años, decidió
vengarse y arrojó una bomba al auto que transportaba a Falcón y a
su secretario, asesinandolos a ambos. En 1910, con motivo de la
celebración del primer centenario de la Revolución de Mayo y con
gran repudio por parte de los grupos anarquistas, el gobierno realiza varios
festejos. Las organizaciones sindicales declaran una huelga general y el 14 de
mayo el gobierno decreta un estado de sitio que desemboca en las detenciones de
los miembros del Consejo General de la FORA y de los directores de los
periódicos acratas “La Batalla” y “La
Protesta”. Ademas, se organizaronmanifestaciones
en contra de los obreros, destrozando y asaltando locales y periódicos
anarquistas, lo que produjo la reacción de los trabajadores, generando
así muertos y heridos de ambos bandos. Este accionar
congeló durante un tiempo la actividad sindical y culminó con la
sanción de la Ley de Defensa Social, suspendiendo así la libertad
de imprenta, de manifestación, de asociación y de reunión.
El 2 de diciembre de 1918, los metalúrgicos de los talleres Vasena,
afiliados a la FORA anarquista, se declararon en huelga, lo que produjo una
fuerte represión que desembocó en una nueva huelga el 9 de enero,
en la cual se estima que le costó la vida a decenas de manifestantes. A
esto se sumaron grupos paramilitares, como la Liga Patriótica, que
persiguieron y asesinaron a líderes acratas durante esa
época.
Un anarquismo mas violento
Aunque no vuelve a tener la misma fuerza que tuvo hasta la represión del centenario, a partir
de 1921 resurge el movimiento de cierto modo. En ese año se produce la
Patagonia Rebelde, que se cobra la vida de varios anarcosindicalistas en una
huelga contra la explotación laboral, sumado a la masacre de obreros
chaqueños y a los homicidios perpetrados por la Liga Patriótica
el 1 de mayo. Esto generó una nueva serie de represalias por parte de
los anarquistas, pero ya desde un modo de
acción mas violenta y directa, también motivada por
laejecución de los acratas Ferdinando Sacco y Bartolomeo Vanzetti
en Estados Unidos. Los grupos activos detonaron bombas en varios puntos de la
Ciudad de Buenos Aires, como sucedió en una sede del City Bank, en la
embajada estadounidense y en el consulado italiano, las tres de la mano del
ideólogo Severino Di Giovanni, ademas de la voladura de la
fabrica Ford. El golpe de Estado de José Féliz Uriburu, el
primero de la historia argentina,
determinó la mayor persecución de anarquistas en el país,
llevandolos casi a su ocaso.
El anarquismo en la actualidad
Hoy, luego de ser vapuleado entre las décadas del ’40 al ’60
y perder protagonismo frente a las organizaciones sindicales peronistas, el
anarquismo se encuentra muy empobrecido respecto al gran auge que tuvo a
principios del siglo XX. De todos modos, quedan aún
organizaciones que persiguen sus principios ademas de varios medios de
propaganda. Uno de los mas fuertes dentro de este ambito
es la FORA actual, que fue restablecida por viejos y nuevos acratas
entre 1960 y 1970 y mantiene vivos los ideales anarcocomunistas. Adherida a la
Asociación internacional de Trabajadores (AIT), cuenta con sitio web
(www.fora-ait.com.ar), periódico de propaganda propio, que puede
descargarse desde la pagina, ademas de una sede central ubicada
en el barrio porteño de La Boca y una secretaría de prensa. Otra organización que levanta lamisma bandera es la FLA (Federación Libertaria Argentina).
Según cuentan ellos mismos, el recambio generacional
los revitalizó, sumado al resurgimiento de ideas anarquistas a nivel
mundial. Cuentan con ediciones propias de difusión como “Reconstruir” y
“El Libertario”, una biblioteca de archivo llamada BAEL (Biblioteca
Archivo de Estudios Libertarios), y prestan servicios como apoyo escolar y un merendero a fin de
involucrarse en el ambito social. Lamentablemente, la agrupación
CNA (Cruz Negra Anarquista de Buenos Aires) se apropió de la sede que
poseían el 23 de diciembre de 2011, dejandolos así sin un lugar físico en donde llevar a cabo sus
actividades. La Compañía Argentina de Teatro Libertario,
encabezada por el director y guionista Pablo Soler, difunde las ideas
anarquistas desde las tablas. La obra mas destacable es “Severino
Di Giovanni, ¡Libertad o muerte!”, que relata en tan solo 65
minutos la vida y obra del famoso anarcodinamitero con destacables actuaciones,
como las de los protagonistas Fausto Soler y Mickaela de Luca, capaces de
llegarle al corazón a mas de uno.
En la actualidad, este movimiento todavía no
encuentra en la movilización y las huelgas su medio principal para
accionar, pero de a poco va ganando adeptos mediante la propaganda y diversos
medios. Tal vez logre resurgir para cambiar algo de esta sociedad cada vez
mas tirana y oportunista.