SEGAMOL.
Nombre Genérico: Fenoterol Bromhidrato
Presentación:
Inyectable p/infusión IV: Envase con 1 amp de 10 mL de 0,5
mg. E.F. 20.959. Comprimidos: Envase con 20 de 5 mg. E.F. 20.960
Indicaciones:
Ampollas. Tratamiento de ataque: Diluir 2 ampollas de Fenoterol bromhidrato en
500 ml de solución glucosada al 5%. Comenzar por vía IV a 10
gotas/min. si a los 20 minutos de infusión la inhibición es insuficiente y la
frecuencia cardiaca no supera las 120 latidos/minuto, aumentar la dosisa 20
gotas/minuto. Esperar otros 20 minutos y si aún es
insuficiente la respuesta, pasar a 40 gotas/minuto, siempre que la frecuencia
cardiaca materna no sea superior a 120 latidos/minuto.
Tratamiento de
sostén: En el tratamiento oral la dosis media es de ½ a 1 comprimido
administrado a intervalos de 3-6 hora (conviene
administrar el primer comprimido 15-30 minutos antes que finalice la última
infusión IV.
Mecanismo
De Acción: Palpitaciones, náuseas, temblores, cefalea, vértigo, incremento en
la frecuencia cardíaca materna y fetal, hipopotasemia, hipoglimsemia
transitoria en el neonato, mialgia, hipertensión, sudoración, arritmias
Precauciones:
Tener en cuenta los siguientes casos: Insuficiencia placentaria, toxemia
severa, hipertensión, Diabetes mellitus mal controlada, atonía intestinal
hipoproteinemia, monitoreo con electrocardiograma monograma, y de la presión
arterial o se deben llevar a cabo a inicio del tratamiento para detectar
cualquier posible contraindicación posterior
Contraindicaciones:
Glaucoma de ángulo estrecho.Tirotoxicosis, miocarditis, taquiarritmias,
lesiones de la mítral, estenosis aórtica subvalvular hipertrófica idiopática,
infecciones íntrauterinas, hemorragias genitales graves (desprendimiento precoz
de la placenta, placenta previa).
No obstante todos sufrimos aquel abandono de la madre. Nos deja antes de que
estemos en condiciones de saber que volvera. Nos deja para ir al
trabajo, de compras.
Cuando nos abandona nuestra madre lo que hacemos es
sobrevivir. Durante sus breves y pasajeras ausencias nos hace conocer un temor que puede dejar sus huellas en nuestra vida. Si en la primera infancia y muy especialmente en los primeros seis
años de vida hemos sido privados de la madre que necesitamos y
añoramos. De hecho unaprivación de este
caracter ha sido comparada con una quemadura o herida. El dolor es difícil de imaginar y la curación
trabajosa y lenta, el daño sin ser mortal puede ser permanente.
Al separar a un niño de su madre “la
frustración y la añoranza lo pueden volver frenético de
dolor”
La ausencia produce desesperación y finalmente alejamiento.
Las separaciones traumaticas en los primeros años dejan
cicatrices emocionales en el cerebro porque atentan contra la relación
humana por excelencia: el vinculo medre-hijo, el cual nos enseña que
somos seres susceptibles de ser amados, el
vínculo que nos enseña a amar. No podemos constituirnos como
seres humanos, de hecho nos puede resultar bastante difícil ser humanos,
sin el apoyo de este primer vinculo.
La clasica perspectiva freudiana nos enseña que los bebés
encuentran, en la experiencia de la nutrición, alivio contra el hambre y
otras tensiones orales, y que en la repetición del gesto de mamar y
sorber y en la agradable sensación de saciedad, comienzan a identificar
la satisfacción con el contacto humano.
En los primeros años de vida una comida es una comida
y las satisfacciones son satisfacciones. Estas fuentes
intercambiables pueden responder a todas las necesidades. Con el tiempo el
quien-la madre- llega a ser tan importante como el
qué-el alivio de todas las sensaciones corporales.
El amor por la madre comienza con lo que AnnaFreud llama “el amor
estomacal” el amor por la madre según esta teoría
corresponde a un gusto adquirido.
Existe un punto de vista alternativo que sostiene que
la necesidad del
contacto humano es fundamental, y que estamos orientados a el amor desde un
principio.
El psicoterapeuta Ian Suttie dijo “El amor por los
otros aparece simultaneamente con el reconocimiento de que los otros
existen”. En otras palabras amamos desde que aprendemos a
distinguir un “tu” de un “yo”
separados.
John Bowlby, señalo que los bebes como los terneros, patos, corderos
y chimpancés actúan de una manera que les permite estar cerca de
la madre. A esto le llama “conducta del
afecto” y dice que este vínculo
constituye la función biológica de autopreservación de
mantener a las crías lejos del
peligro.
Se acepta generalmente que hacia los seis u ocho meses la mayoría de los
bebés han desarrollado un vínculo
específico con la madre. Este es el momento en que
todos por primera vez nos enamoramos.
El precio por la separación es elevado, inclusive en familias en que el
niño recibe una atención normal, si sobreviene un divorcio, una
hospitalización, un cambio geografico o emocional que fragmenta
la relación del niño con su madre, también es elevado si
las madres que trabajan no pueden pagar o encontrar un lugar adecuado para el
cuidado de sus hijos
Habra separaciones en la primera infancia, quepueden generar angustia y
dolor. Pero la mayoría de las separaciones normales, en el contexto de
una relación normal y afectiva, no dejaran cicatrices tan marcadas en el
cerebro, sin embargo cuando la separación pone en peligro aquel vinculo
temprano, es difícil conser