Apoptosis. Muerte celular
programada
Desde el embrión hasta el organismo adulto fisiológicamente sano,
millones de células mueren sin dejar cicatrices
ni activar células inflamatorias. Este fenómeno se trata de un proceso activo, bien definido genéticamente, en el
que las células estan destinadas a morir en un tiempo fijado. La
muerte celular programada entran a formar parte de los procesos
fisiológicos que resultan necesarios para el funcionamiento normal de un organismo.
Hasta el año de 1972 fue cuando Kerr, Wyllie y Currie implantan el
termino “apoptosis”, que evoca a la caída de las hojas desde
los arboles en otoño o la de los pétalos de las flores.
En la muerte celular existen dos grupo: necrosis y apoptosis.
El termino necrosis reúne los procesos violentos y catastróficos,
donde la degeneración celular es pasiva sin un
requerimiento de energía en forma de ATP. Aparece frecuentemente como
consecuencia de un daño traumatico o por la exposición a
toxinas. Este fenómeno conduce a las células vecinas
también hacia la muerte y a las células inflamatorias lo que
origina una reacción de inflamación y una cicatriz fibrosa que
deforma el tejido y el órgano afectado.
En la apoptosis o muerte celular programada. En este proceso las células se autodestruyen sin
desencadenar reacciones de inflamación ni dejar cicatrices en los
tejidos. Es considerada como una muerte celular
fisiológica, resultando en un mecanismo de eliminación de
células no deseadas, dañadas o desconocidas y que
desempeñan un papel protector frente a posibles enfermedades.
Intervienen en algunos procesosfisiológicos como son; en las
etapas de desarrollo donde se producen células en exceso
(formación de órganos, remodelación de huesos entre
otros), en la selección de linfocitos (eliminación de
células infectadas o tumorales por histólisis). Dependiendo de la
etiología, los procesos apoptóticos pueden resultar
perjudiciales, siendo responsables de diversas afecciones y su
desregulación conduce a situaciones patológicas. Los procesos
apoptóticos se caracterizan por cambios morfológicos como;
aumento brusco en la densidad intracelular, incremento moderado, pero
sostenido, de la concentración de calcio libre citoplasmatica,
cambios en la composición de la membrana celular, alteración en
la conformación de elementos en el citoesqueleto, aumento y
activación de la síntesis de determinadas proteínas
necesarias en las rutas metabólicas de los procesos de muerte celular y
en la condensación y fragmentación de la cromatina. Las
técnicas mas utilizadas para la detección de la
participación de procesos de apoptosis son; el uso de fluocromos capaces
de intercalarse en el ADN que permiten visualizar la morfología de la cromatina;
la microscopia electrónica; la electroforesis en geles de agarosa de ADN
aislado de tejidos, permiten el analisis de la integridad del genoma; la
tinción TUNEL y el marcaje de fostatidilserina. Durante los procesos de
muerte celular se pueden distinguir tres etapas: activación, propagación
y ejecución.
Los procesos apoptóticos pueden ser activados por una inducción
negativa (la falta de factores de crecimiento o lo disminución de los
contactos con lascélulas que lo rodean) o por inducción positiva como
es la unión de un ligando a un receptor o la recepción de
señales conflictivas.
Localizados preferentemente en la membrana citoplasmatica, los
receptores que participan en los procesos de muerte celular se pueden
clasificar en dos grupos: aquellos cuya activación siempre conduce a la
muerte de la célula, conocidos como receptores de la muerte y aquellos
que desempeñan una función fisiológica, pero su sobre
activación puede producir también a la muerte (receptores de
glutamato, de trombina y canales iónicos dependientes de voltaje). Una vez
activados, los receptores transfieren la información al interior celular
mediante un sistema complejo de interacciones
proteína-proteína que activan diversas cascadas intracelulares.
Entre los segundo mensajeros que participan en los procesos de muerte celular
mas estudiados se encuentran el calcio y las especies reactivas del
oxigeno. La activación de estos segundos mensajeros suelen conducir a la
disfunción de las organelas citoplasmaticas, como la mitocondria
y el retículo endoplasmico, o la regulación de la actividad de
complejos enzimaticos como cinasas y fosfatasas que a su vez regulan la
función de otras proteínas. Durante el proceso
normal de señales tienen lugar aumentos transitorios de calcio libre
citoplasmatica. Sin embargo, crecimientos aberrantes
pueden producir daño celular y en algunos casos su muerte. La
ceramida empieza a ser considerada como un segundo mensajero que
participa en los procesos de muerte celular. Su traslocacion a la mitocondria
provoca cambios iónicosentre la matriz mitocondrial y el citoplasma,
produciendo un descenso del
potencial transmembrana mitocondrial y la formación del poro de permeabilidad transitoria
mitocondrial, conduciendo a la apoptosis. En alteraciones no corregidas del ADN, en especial mutaciones cancerígenas, activan
el p53 que provoca apoptosis a través de un mecanismo mediado por
ceramida. Un mal funcionamiento del gen p53 puede promover el desarrollo de
tumores al permitir la proliferación de células que no han
completado la reparación del ADN. Bcl-2 da nombre a
una familia de oncogenes en los que se encuentran miembros que favorecen la
supervivencia celular mientras que otros el suicidio celular.
Una vez que la célula recibe una señal de
muerte, debe decidir si debe sobrevivir o desencadenar los procesos de muerte.
En esta fase se ha situado a la mitocondria como organelo
fundamental. Uno de los acontecimientos principales que tienen lugar en la
mitocondria es la alteración de la permeabilidad de sus membranas debido
a la formación de un complejo multiproteico que
conduce a la liberación de contenido intramitocondrial como el citocromo C, el factor inductor de
apoptosis y miembros de la familia de caspasas.
Una vez que la célula ha tomado la decisión de
morir, en su interior se produce una serie de procesos bioquímicos que
conducen a la degradación de proteínas y de la cromatina.
La naturaleza controlada de la vía apoptótica permite la
intervención o interrupción en la progresión de las
patologías degenerativas. Sin embargo, en los casos de
necrosis, el daño celular es irreversible e imparable.