Modelo
económico de España en esa época.
EL impacto de la prolongada invasión musulmana, el temprano y acelerado
fortalecimiento de la realeza, la evolución peculiar de un campesinado
semilibre, la explotación ganadera para el mercado externo, el
surgimiento de las ciudades de un nuevo sector de trabajadores y de una
burguesía comercial, relativamente poderosa, condicionaron una
España que se abría paso hacia el capitalismo.
Esta generalización no significa conocer le existencia
de remanentes feudales todavía activos. Si nos
atreviéramos a afirmar que la España del siglo de la conquista americana
era ya una nación típicamente capitalista, cometeríamos la
misma apreciación unilateral que los sostenedores de la tesis feudal. En
la península Ibérica se mantuvieron durante
siglos instituciones feudales, títulos de nobleza y señores de la
tierra que persistieron en consolidar una relación feudal con los
campesinos.
A pesar de estas trabas España evolucionó hacia un sistema capitalista. En el siglo XVI la
monarquía decretó la extinción de la servidumbre.
Los reyes pusieron su poderío sobre la
tendencia autonomista de los señores feudales y la nobleza se
convirtió en cortesana, dependiente de la monarquía.
En la guerra contra Doña Juana por la posesión del trono, Isabel
se apoyó en la burguesía y en las comunidades urbanas en contra
de la aristocracia terrateniente. Los monarcas
españoles tendieron a lograr la unidad nacional,
característicaesencial de los estados modernos. NO por casualidad
Maquiavelo en El Príncipe elogiaba los intentos de Fernando por alcanzar
la unidad nacional de España en el siglo XV.
Conclusivamente, podemos caracterizar la España del siglo de la
conquista americana como un país en transición del feudalismo al capitalismo; una
nación de desarrollo desigual y combinado en la que junto a
instituciones feudales coexistía una burguesía relativamente
poderosa que trabaja para el mercado externo. No era todavía un capitalismo industrial moderno, sino un capitalismo
incipiente y esencialmente comercial.
Los Reyes Católicos son dos personajes que han
marcado un antes y un después en la historia de España. Bajo su
reinado, también se produjo uno de los descubrimientos mas
importantes de la historia, el descubrimiento de América, hecho que
concedió a las coronas de Castilla y Aragón su maximo
esplendor, echando raíces en el nuevo continente y propagando la palabra
de Dios a los habitantes de América.
Fernando II de Aragón e Isabel I de Castilla, (popularmente conocidos como
los Reyes Católicos) se caracterizaron por el control de la pureza de la
fe. Fue así como
los musulmanes que habitaban en España se encontraron obligados a
convertirse o abandonar el país, al igual que los judíos entre
otras religiones, hecho que provocó una profunda crisis. Estos hechos,
sumados al Patronato concedido por Inocencio VIII a los reyes
para el control del Estado en los temasreligiosos, instauró una
nación sostenida por la fe, la religión y la patria.
En 1486 Cristóbal Colón ofrecería un proyecto a los Reyes Católicos para crear una nueva
ruta hacia las Indias
por el océano Atlantico. En aquel momento, como era prioridad la conquista de Granada, el proyecto fue
duramente cuestionado.
Tras alcanzar el objetivo impuesto por la corona, se decidió llevar a
delante el proyecto, con fin de crear una ruta propia para el transporte
comercial, sin tener que depender de Génova o Portugal, partiendo la
Santa María y las dos carabelas (la Pinta y la Niña).
Fue así como el
12 de Octubre las embarcaciones llegan a tierra firme, no justamente al destino
deseado, sino topandose con un continente nuevo, dando comienzo a la
colonización de las Indias.
En estas nuevas tierras, se comenzaron a instaurar bajo el mando de los reyes las bases y estructuras administrativas tradicionales del reinado castellano.
Gracias al Patronato concedido por el Papa, los reyes
consiguieron controlar la implantación y difusión de la Iglesia
Católica en América, instaurando la dura y polémica tarea
de evangelización a los habitantes del lugar.
Hoy en día América se encuentra compuesta por los legados de
estos reyes que aplicaron la política de la
Iglesia en el nuevo continente. No sólo cambió por completo la
cultura que anteriormente subsistía en aquel lugar, sino también
la gran cantidad de legados arquitectónicos, estructuras,
política y ciudades quehoy conforman el continente Americano.
Llegada a América.
El éxito del
proyecto colombino sólo es históricamente comprensible si
admitimos que hay todo un ciclo de navegaciones previas y de mejoras
técnicas que crearon las condiciones para que su éxito fuera
posible. De la llamada Media Luna Fértil de los descubrimientos
geograficos, la región comprendida entre el Algarve portugués
y la costa de Huelva, habían partido desde comienzos del siglo XV
innumerables embarcaciones que recorrían la costa africana en busca de
especias adentrandose cada vez mas hacia el sur y hacia el oeste,
ya que en su camino de regreso debían practicar la llamada 'Vuelta
de Guinea', dirigiéndose hacia el oeste en busca de los vientos
alisios para poder tomar entonces el rumbo a la península.
Con todo, la obstinación, experiencia y genialidad de Cristóbal
Colón son indiscutibles. Experto marinero, influido por el ambiente de
Portugal y por las lecturas de Ptolomeo, Estrabón, Mandeville, Marco
Polo y otros, Colón concibió el proyecto de alcanzar la India a
través del océano, siguiendo rumbo al oeste. Un famoso humanista,
Toscanelli, influyó decisivamente en él y le indujo a cometer
importantes errores de calculo, que le llevaron a pensar que la Tierra
era mas pequeña y Asia mayor; eso suponía que las
distancias se acortaban considerablemente, por lo que estaba convencido de que
podía realizar el viaje en carabelas sin necesidad de hacer escalas.
En 1484 Colónpresentó su proyecto a Juan II de
Portugal y le pidió apoyo económico para llevarlo a la
practica. Pero una junta de expertos
consideró que el plan era descabellado, y el rey, mas preocupado
por las exploraciones africanas, no quiso prestarle su ayuda.
Decepcionado, se trasladó a Castilla para exponer sus ideas a los Reyes
Católicos, puesto que necesitaba el apoyo de un
monarca o un noble poderoso que corriera con los gastos.
Acompañado de su hijo Diego, se instaló en Palos de la Frontera
(Huelva), donde entró en contacto con algunas personas que le ayudaron y
que mas tarde tuvieron un papel destacado en la realización de la
empresa. Estas personas eran los frailes franciscanos de La Rabida, que
le pusieron en contacto con los reyes; los
Pinzón, que prestaron a Colón sus pertrechos, conocimientos e
influencias; y los marineros andaluces, acostumbrados a navegar por el
Atlantico y que formarían la tripulación del viaje colombino. Los monarcas
castellanos tardaron un tiempo en aceptar los
proyectos de Colón; fueron siete años, durante los cuales se
hicieron frecuentes contactos con personas influyentes de la corte, pero los
reyes demostraban estar mas interesados en la conquista de Granada.
Las capitulaciones de Santa Fe
Eran varios los motivos por los que los Reyes Católicos no se
decidían a prestar su apoyo al proyecto colombino. Aparte de la guerra de Granada,
las exigencias de Colón resultaban exageradas y los expertos que
analizaron elproyecto determinaron que era muy arriesgado. Algunos
cortesanos, como
Luis de Santangel y Francisco de Pinelo, convencieron a los reyes de la
necesidad de transigir. Cuando la guerra de Granada tocaba a su fin,
Colón fue recibido por los monarcas en Santa Fe, y le manifestaron su
intención de financiar la empresa.
El resultado de la negociación fue recogido en las
capitulaciones de Santa Fe,
firmadas en abril de 1492. En ellas se
hacían una serie de concesiones a Colón, pero todas condicionadas
al hecho del
descubrimiento. Los puntos fundamentales de este
contrato otorgaban a Colón enormes privilegios, como el título de Almirante y
Gobernador General de las tierras por descubrir. También
se le concedían el diez por ciento de los beneficios comerciales, aparte
de otras ventajas económicas.
Con unas cartas para el Gran Kan
y las instrucciones para organizar la armada, Colón se marchó al
puerto de Palos de la Frontera, que fue elegido como punto de
partida porque en él se contaba con una buena flota y marineros
experimentados en navegaciones atlanticas.
El primer viaje de Colón
Cuando terminaron los preparativos, unos noventa hombres
se embarcaron en tres naves: dos carabelas, la Pinta y la Niña
capitaneadas por los hermanos Pinzón, y una nao, la Santa María,
en la que iba Cristóbal Colón. La mayoría de la
tripulación era de Palos; sólo quince expedicionarios no eran
andaluces: diez vascos y cinco extranjeros. No se embarcaron mujeres,frailes ni soldados, pero sí oficiales reales para
velar por los intereses económicos de los monarcas, y un
intérprete de lenguas orientales.
El 3 de agosto de 1492 zarpó la flota con rumbo a las Canarias y con un objetivo claro: alcanzar la costa asiatica
atravesando el Atlantico. Todos los pormenores del viaje se encuentran recogidos en un documento
excepcional, el 'Diario' que escribió Colón, conocido
por la copia que del
mismo hizo fray Bartolomé de Las Casas.
En la travesía se presentaron algunos problemas.
El mas importante fue el descontento de la
tripulación por el alejamiento de las costas y la presencia continua de
vientos alisios, que los llevaban directamente hacia el oeste, temiendo que no
encontrarían vientos favorables para volver a la península.
Pero antes de acabar el mes de agosto aparecieron vientos contrarios, gracias a lo cual se sosegaron los animos.
Los problemas reaparecieron al entrar en la zona de calmas,
lo que, unido a la ausencia de señales de tierra, mostró de nuevo
el descontento de los marineros. Colón llegó a pensar que
había sobrepasado el Japón, y sus problemas se acrecentaron
cuando estalló un motín general que pudo
contener tras lograr convencer a sus hombres de que en unos pocos días
mas encontrarían tierra. Pronto los vientos aumentaron, se
avivó la velocidad de navegación y comenzaron a aparecer indicios
de hallarse cerca de la costa: algunas bandadas de pajaros y maderas que
flotaban en el mar.Llegada al nuevo continente
Cuando, por fin, el 12 de octubre se divisó tierra, la alegría de
los expedicionarios fue inmensa. Habían llegado a una isla de las
Bahamas, a la que Colón dio el nombre de San Salvador y que los
indígenas llamaban Guanahaní. Esta isla
corresponde a la que en el siglo XVIII los ingleses denominaron Watling.
Colón desembarcó y tomó posesión de ella en nombre de los Reyes Católicos. Todos quedaron maravillados de las tierras y de los hombres, que
Colón comenzó a llamar indios (por creer que había llegado
a las costas asiaticas) y que le recordaban a los guanches de las
Canarias. Estos hombres eran pacíficos,
pero carecían de las riquezas que los descubridores esperaban encontrar.
Pronto pasaron a reconocer la costa de la isla y,
creyéndose en Extremo Oriente, zarparon de nuevo en busca de Cipango (Japón). Recorrieron
las costas de varias islas Bahamas,
de Cuba y de Haití, que recibió el nombre de La Española.
Al mismo tiempo que seguían manteniendo relaciones con los
indígenas, los españoles buscaban especias, aunque, en su lugar,
vieron por primera vez el maíz, las canoas, las hamacas
y el tabaco.
En la Nochebuena de 1492 naufragó la nao Santa María
en la costa norte de La Española. El cargamento se pudo salvar
gracias a la ayuda de los indígenas, y con los restos de la nao
Colón resolvió construir un fuerte, llamado de La Navidad, que
fue el primer establecimiento español en América. Allí quedaron
39 hombres conel fin de mantener las relaciones
amistosas con los isleños y buscar minas de oro. A
mediados de enero, el Almirante dio la orden de volver. Junto a los españoles se embarcaron algunos
indígenas, papagayos, pavos, productos de la tierra y objetos
exóticos. En los primeros días de
navegación, Colón escribió su famosa 'Carta',
que estaba destinada a difundir la noticia de su fabuloso descubrimiento.
Las dificultades del
viaje de regreso fueron enormes, pero en todo momento Colón
demostró sus magníficas cualidades marineras. Los vientos y las
tormentas separaron las dos embarcaciones, y Colón, al mando de la
Niña se vio obligado a poner rumbo hacia Lisboa, siendo recibido por
Juan II, que fue el primero en escuchar el relato de su aventura. El rey
portugués reclamó sus derechos sobre las tierras descubiertas, en
base al pacto de Alcaçovas, pero Colón le demostró que no
había ido a Guinea,
sino a las Indias.
Ante el temor de represalias de los Reyes Católicos, el monarca le
dejó partir rumbo a Palos.
Martín Alonso Pinzón, al mando de la Pinta, se había
perdido en una tormenta y arribó a las costas de Galicia, y de
allí tomó rumbo a Palos, donde llegó al mismo tiempo que
Colón, a mediados de marzo. El Almirante se puso en camino para ver a
los reyes, que se encontraban en Barcelona. Atravesó la
península despertando la curiosidad de todos con su espectaculo
de papagayos, indígenas, plumas exóticas, etc., dejando a los
españoles impresionados yadmirados.
La nueva división del
mundo
El recibimiento que tuvo Colón en Barcelona
fue grandioso, y los reyes le confirmaron todos los privilegios pactados en Santa Fe. Enseguida
iniciaron contactos diplomaticos con el Papa para conseguir la
concesión sobre las tierras descubiertas y por descubrir, y con Portugal para
establecer una frontera en los descubrimientos, tema que provocó
tensión entre ambos reinos.
El punto de partida fueron dos bulas otorgadas por Alejandro
VI. La primera anexionaba las nuevas tierras a la Corona de Castilla, y
la segunda limitaba la zona de expansión de portugueses y castellanos
con un meridiano situado a 100 leguas de las Azores. Las negociaciones fueron muy duras y los
portugueses no quedaron conformes con la sanción papal, pues, aunque
estaban de acuerdo en que debían repartirse el mundo, preferían
que la línea divisoria fuera un paralelo, ya que así se
adueñaban del hemisferio sur
Finalmente, en junio de 1494, el problema se consideró zanjado con el
tratado de Tordesillas, según el cual ambas partes aceptaron que la
línea de demarcación fuera el meridiano situado a 370 leguas al
oeste de Cabo Verde. Las imprecisiones del acuerdo y las dificultades
para determinar la longitud (que sólo se pudo lograr en el siglo XVIII),
hicieron que no acabaran los problemas jurisdiccionales. Por ello, la
expansión de los portugueses en Brasil y de los españoles en el
Sudeste Asiatico, con la conquista de las islas
Filipinas,suscitaría problemas diplomaticos entre los monarcas de
la Península Ibérica, que se resolvieron por la política
de fuerza y los hechos consumados.
Segundo viaje
En septiembre de 1493 se hacía a la mar una Armada formada por 17 barcos
y una fuerza formidable, cercana a 1500 hombres. Sus objetivos eran socorrer a
los españoles que habían quedado en América durante el primer viaje en el establecimiento de Fuerte
Navidad, continuar los descubrimientos tratando de alcanzar las tierras del Gran Khan, y
colonizar las islas halladas anteriormente. Tras una escala en Canarias, que
con el tiempo se convertiría en algo habitual en la Carrera de Indias,
Colón ordenó poner rumbo mas al sur que en el primer
viaje, pensando que de esta manera llegaría a Cipango (Japón)
mas facilmente.
Los cuatro viajes de Colón
Lo que Colón halló en este segundo viaje
fue, en realidad, la ruta mas rapida y segura para navegar a
América. En sólo 21 días consiguieron llegar a las islas
Deseada y Dominica, y descubrir a continuación Guadalupe, Monserrat y
Puerto Rico. En la costa norte de Haití, donde se hallaba Fuerte
Navidad, Colón supo que los 39 hombres que había dejado en el
primer viaje habían sido asesinados, según le dijeron a manos del
cacique Caonabó y sus compañeros. El 6 de enero de 1494
Colón fundó en ese lugar La Isabela,
primera población española en América. Desde ella
mandó algunas expediciones en busca de oro, del que remitió
algunas muestras a España,y propuso a la corona que autorizara el
intercambio de ganado y vituallas por esclavos indios caribes. En abril se trasladó a Cuba
y poco después a Jamaica.
A su regreso a La Isabela, Colón descubrió que muchos
descontentos se habían marchado de ella,
mientras las enfermedades hacían presa en los pobladores que quedaban y
los indígenas se rebelaban. Tras una corta lucha, Colón impuso a
los vencidos la esclavitud y el pago de un tributo en
oro y algodón. Sabedores de la terrible
situación en sus nuevos dominios, los Reyes Católicos toman la
decisión de enviar a Juan de Aguado para que les informe de lo que
esta sucediendo. En marzo de 1496 regresaba Aguado a España, acompañado por Colón, que no
quería perder el favor de la corte para su empresa descubridora. Dejaba construidas seis fortalezas y el mando de los territorios
otorgado a su hermano. En la entrevista mantenida con los reyes el otoño siguiente, Colón recibe
críticas por la conflictividad y la falta de rentabilidad de sus
empresas, pero se justifica con el fin evangelizador.
Tercer viaje
Tres años tarda Colón en conseguir organizar su siguiente viaje,
mientras su prestigio y el de la propia empresa americana, que
parece un negocio ruinoso, decae por momentos. De las ocho naves que componen
esta vez la flotilla colombina, que parte de la península en enero de
1498, cinco pasan a reforzar los establecimientos de La Española, y tres
se dedican a nuevos descubrimientos. A finales dejulio desembarcaba Colón
en la isla de Trinidad y poco después explora la costa venezolana de
Paria y la desembocadura del
gran río Orinoco, donde considera que
había estado localizado el paraíso terrenal. En
agosto de 1498 estaba de vuelta en La Española.
En adelante, los conflictos políticos y administrativos absorben por
completo a Colón, impidiéndole continuar con las exploraciones. Primero tiene que hacer frente a una sublevación
indígena y, mas tarde, se rebelan los propios españoles,
acaudillados por Francisco Roldan. Sólo la
autorización del
reparto de las tierras de los indígenas y la concesión del servicio personal de
los mismos a los españoles, junto a algunas medidas de fuerza, consigue
detener la revuelta.
En 1500 llega a La Española un enviado real,
Francisco Bobadilla, que viene como
juez pesquisidor con plenos poderes para poner orden en la colonia. Bobadilla
halló culpable a Colón de todos los males, se apoderó de
su casa, papeles y bienes, le abrió un proceso
y lo remitió a España cargado de grilletes junto a sus hermanos
Diego y Bartolomé. A continuación dio libertad
para coger oro, vendió tierras y repartió indios. Acababa
así la etapa de gobierno personalista del Nuevo
Mundo y empezaba un nuevo orden. Colón llegó a
España en noviembre de 1500. Aunque los reyes
mandaron ponerlo en libertad de inmediato, sus enormes privilegios
habían desaparecido. Colón había triunfado como
marino y descubridor, pero había fracasadocomo gobernante.
Cuarto viaje
A pesar de todo, en marzo de 1502 recibe el cometido de preparar un cuarto y
último viaje, cuyo objetivo debía ser hallar el estrecho que se
creía separaba las tierras firmes del norte y del sur, para lograr paso
franco al continente asiatico. Colón
tenía prohibido desembarcar en La Española para evitar
conflictos, al igual que la captura de esclavos. Se prepararon cuatro
carabelas con 140 hombres, entre los cuales figuró el hijo del descubridor, Hernando
Colón, que nos legó un relato del viaje.
En mayo de 1502 partieron de la península, dirigiéndose a
Martinica, Dominica, La Española (pese a la prohibición), Jamaica
y Cuba. De allí navegó hacia la costa de Honduras, Nicaragua,
Costa Rica y Panama, donde logró rescatar (comerciar) cierta
cantidad de oro. En noviembre fundaron Portobelo y poco
después, también en la costa panameña, Nombre de Dios.
Tras sufrir un ataque indígena tuvieron que
poner rumbo a Cuba, pero
naufragan a la altura de Jamaica.
Hasta ese momento, el cuarto viaje colombino
había servido para probar que desde Brasil a Honduras no existía paso
alguno hacia el oriente. Desde Jamaica,
Colón despacha a siete de sus hombres para que pidan socorro
en La Española (Santo Domingo).
Por fin, en julio de 1504 los naufragos son
rescatados y en noviembre de aquel año Colón llegaba, ya muy
enfermo, a España. Fallece en mayo de 1506, sin reconocer que, en
realidad, había hallado un nuevo continente.