El problema agrario
hondureño
La iniciativa mas importante de reforma agraria en Honduras data
de 1962, año en que se promulgó la Ley de Reforma Agraria, la
cual preveía una distribución de las tierras que no cumplieran
los requerimientos de la función social de la propiedad. La”era de
oro” de la reforma agraria en Honduras fue la década de los
70, sobre todo entre 1973 y 1977, cuando se distribuyeron 120 mil
hectareas en sólo cinco años. En total se adjudicaron en
el transcurso de tres décadas 409 mil hectareas que corresponden
al 12,3% de la tierra con vocación
rústica del
país, beneficiando a un total de 60 mil familias campesinas que
representan el 13% de
Las familias rurales. Aunque el programa de reforma agraria ha tenido un impacto positivo, éste apenas pudo Contrarrestar
el proceso simultaneo de concentración de tierra. La tenencia de
la tierra refleja hasta hoy una
Desigualdad dramatica.
El Censo Agropecuario de 1993 reveló que existen mas de 126 mil
familias rurales que no tienen acceso ni a la tierra
ni a un empleo permanente, representando un 27 % de la población rural.
Junto con las mas de
80 mil familias que tienen menos de una hectarea, se observa la
situación preocupante de que mas de 200 mil familias campesinas
(lo que equivale a un 44 % de la población rural) no tienen
ningún acceso o un acceso muy deficiente a la tierra. Estas
familias viven en condiciones sumamente precarias y constituyen indudablemente
el núcleo de la pobreza extrema en elcampo hondureño.
A partir de 1992 el proceso de reforma agraria ha sido casi
paralizado. En el marco del Programa de Ajuste
Estructural, la Ley de Modernización entró en vigencia limitando
seriamente el acceso a la tierra para los que no pueden expresar sus
necesidades en ”demanda efectiva”, es decir, en dinero para
comprarla. Para esta ley, que respira la
lógica neoliberal, la tierra es una mercancía entre otras que se
vende y se compra sin intervención alguna del
Estado. En este sentido, la ley redujo
drasticamente las causas de afectación de la reforma agraria que
implementaban anteriormente la función social de la propiedad privada
establecida por la Constitución de la República. Por otro lado, la
ley llevó a un proceso de venta de las tierras que se había
adjudicado en el marco de la reforma agraria, lo que condujo a una
reconcentración de la tierra: en sólo tres años,
mas de 15 mil hectareas de tierra fértil en la Costa
Atlantica regresaron a manos de las dos compañías
bananeras Standard Fruit (Dole) y Tela Railroad Company (Chiquita) las mismas
que a comienzos del siglo pasado habían acaparado miles y miles de
hectareas en la Costa Norte.
La nueva dinamica
Ante los estragos que originó el huracan
”Mitch” en noviembre de 1998, el tema de la reforma agraria
ha resurgido en la agenda nacional como parte de
la reconstrucción del
país.
Evidentemente la vulnerabilidad económica, social y ecológica
esta estrechamente ligada a la estructura de la tenencia de latierra:
Las víctimas mas afectadas por el huracan fueron los
grupos campesinos que, por falta de tierras aptas para la agricultura,
habían tenido que asentarse en zonas precarias para vivir y cultivar, y
luego perdieron todo cuando la tormenta se les llevó la tierra y el
techo.
La manifestación que dio inicio en Tegucigalpa a la Campaña
Global por la Reforma Agraria el 12 de octubre de 1999 fue un reflejo de la
importancia que ha cobrado el tema en la agenda de los sectores campesinos,
indígenas y sociales en el país. A pesar de la represión
en contra de la manifestación que contó con mas de 12 mil
participantes - 19 resultaron heridos
- la gran movilización social dejó en claro que el tema de la
reforma agraria es inevitable en el proceso de reconstrucción.
En foros posteriores a la manifestación, el gobierno hondureño ha
reconocido que el acceso a la tierra y el desarrollo rural constituyen
elementos fundamentales para rehacer el país y, en esa medida,
esta dispuesto a evaluar la Ley de
Modernización Agrícola, que había paralizado el proceso de
Reforma Agraria en Honduras desde 1992.
En vista de esta nueva dinamica, la Campaña Global por la
Reforma Agraria - coordinada por FIAN y La Vía Campesina - quiere apoyar
de manera intensiva la promoción de la reforma agraria en Honduras. Para el año 2000 el trabajo apuntara a tres
objetivos específicos
1. Integrar la reforma agraria en la Estrategia de Reducción a la
Pobreza que el país tiene que elaborar para poder lograr
lacondonación de la deuda externa.
2. Procurar que el Fondo de Tierras que promueve el Banco
Mundial en el país sea complementario y no sustituya los demas
instrumentos de reforma agraria en Honduras.
3. Lograr la implementación de las leyes vigentes de la reforma agraria
en caso concretos como
en el caso del
conflicto agrario que involucra a la empresa agrícola y ganadera CAGSSA
cuya posesión de tierras excede los límites legales.
Reforma Agraria y Derechos Humanos
La reforma agraria es una obligación del Estado
de
Honduras
frente al Derecho Humano a la Alimentación, reconocido en el art. 11 del Pacto de Derechos
Económicos
Sociales, y Culturales de las Naciones Unidas. Las familias campesinas sin
tierra no podran realizar su Derecho a
Alimentarse, no podran liberarse del
hambre y de la miseria, si no se les abre acceso a los recursos productivos,
primordialmente la tierra.
El acceso a la tierra y la Estrategia de Reducción de la Pobreza
A raíz de la campaña mundial”Jubileo 2000”, cuya
demanda fundamental es la condonación de la deuda externa de los
países en desarrollo, los principales acreedores han decidido condonar
una parte de las deudas al grupo de ”Países Pobres Muy
Endeudados” (PPME). Si bien esta iniciativa no puede ser mas que un inicio, es necesario aprovechar los espacios que ella
abre particularmente en el caso de Honduras.
Siguiendo las decisiones de los gobiernos de los países acreedores, el
Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI)establecieron una serie
de condiciones para los países que quieran ser incluidos en la
iniciativa de los PPME. Para beneficiarse de
la condonación parcial de la deuda externa, los gobiernos de los
respectivos países se tienen que comprometer a
elaborar una estrategia de reducción de la pobreza en cooperación
con la sociedad civil y las instituciones financieras internacionales.
La implementación de la reforma agraria y el caso CAGSSA
EL conflicto entre 250 familias campesinas de la comunidad de Guanchías,
departamento de Yoro, y la empresa agrícola CAGSSA es un caso
ilustrativo de la falta de implementación de la legislación de
reforma agraria vigente en Honduras. Las familias se encuentran en este momento en peligro de ser desalojadas de las tierras
que han trabajado durante los últimos cinco años, hecho que
amenaza de manera alarmante su Derecho a Alimentarse.
Según el art. 25 de la Ley de Reforma Agraria,
las tierras que exceden un límite maximo
de la propiedad agrícola (los llamados”sobre techos”) o que
se encuentran ociosas, deben ser afectadas por la reforma agraria. Ambas condiciones se dan en el caso de Guanchías. El
Instituto Nacional Agrario (INA) ha declarado que existe un
sobre techo ocioso de 1.352 hectareas. Sin embargo, el INA no ha podido
afectar estas tierras en propiedad de la
Compañía Agrícola y Ganadera de Sula S.A. (CAGSSA) porque
la
Secretaría de Agricultura y Ganadería, con base en su facultad
interpretativa de la ley, autorizó el sobretecho deCAGSSA.
Desde enero del
presente año, representantes de la empresa CAGSSA han comenzado amenazar
nuevamente con el desalojo violento de los campesinos. Bajo
circunstancias similares fue asesinado uno de los campesinos en agosto de 1998.
El asesinato ha quedado impune hasta hoy.
El caso CAGSSA es un ejemplo evidente de que el gobierno de Honduras a
través de la Secretaría de
Agricultura y Ganadería se niega a implementar las leyes vigentes de
reforma agraria y, por lo tanto, se niega también a cumplir con su
obligación de garantizar el Derecho Humano a la Alimentarse, establecido
en el art.
11 del Pacto
Internacional de Derechos Humanos Económicos, Sociales y Culturales, ratificado
también por
Honduras.
La importancia política del
caso en cuestión es que constituye un precedente para la
implementación o no-implementación de la reforma agraria en Honduras. Si se
ganara este caso, se abriría la posibilidad de
expropiar también otros sobre techos ociosos.
La estrategia de reducción de la pobreza debe considerar tres elementos
claves: debe, en primer lugar, indicar quiénes son los pobres,
dónde viven, y cuales son las causas de su pobreza. En un segundo paso, debe señalar las políticas
públicas mas adecuadas para combatir la pobreza y sus
raíces. Finalmente, la estrategia debe definir
indicadores que permitan evaluar los resultados de la estrategia a corto,
mediano y largo plazo. En los documentos del
Banco Mundial y del FMI que describen el marco de esta nueva
”Estrategiade Reducción de la Pobreza” se hace
mención explícita del acceso a
la tierra, tanto en lo relacionado con las posibles causas de la pobreza como en lo concerniente a
las posibles políticas gubernamentales para reducir la pobreza.
En el caso de Honduras,
la estrategia de reducción de la pobreza se elaborara en los
próximos meses. Tomando en cuenta la importancia que tiene el
acceso a la tierra para la reducción de la pobreza, es absolutamente
necesario que un amplio programa de reforma agraria forme parte de la
estrategia de reducción de la pobreza. El gobierno de Honduras debe definir claramente un programa de acceso a la tierra y de desarrollo rural para
la reducción de la pobreza con la activa participación de los
movimientos sociales en todas las etapas del
proceso.
Mercado de tierras y reforma agraria
Al igual que en muchos otros países, en Honduras
se estan discutiendo actualmente propuestas para promover el mercado de
tierras como
un instrumento para mejorar el acceso de las familias campesinas pobres a los
recursos productivos.
Las bondades de tal modelo son bastante limitadas, ya
que el mercado como instrumento de
distribución y redistribución de la tierra tiende por sí
mismo a polarizar aún mas la propiedad rústica, excluyendo
a toda persona que no disponga del
capital necesario para participar activamente en el mercado. La
orientación fundamental de la reforma agraria de que”la tierra es
para quien la trabaja”, se transforma en el nuevo lema de que”la
tierraes únicamente para quien la puede comprar”.
Este cambio paradigmatico, si se lo pone en praxis,
tiene una serie de consecuencias sumamente problematicas.
En primer lugar, entorpece la función social de la
propiedad reconocida en la Constitución hondureña. Ademas, tiende a cuestionar el caracter de mandato
constitucional que goza la reforma agraria en Honduras. La tierra se
convertiría en una mera mercancía en un
mercado que esta lejos de conocer un nivel mínimo de igualdad de
oportunidades. La gran mayoría de los grupos vulnerables queda por fuera
de este proceso ya que no puede expresar su demanda
urgente de tierra por falta de poder adquisitivo.
El proyecto de Fondo de Tierra tiene que ser analizado en este
contexto. La idea de promover el acceso a la tierra mediante el mercado debe
ser complementaria del
proceso de reforma agraria y de ninguna manera debe sustituirlo.
La Campaña Global por la Reforma Agraria de FIAN y La Vía
Campesina promueve una reforma agraria que parte de un enfoque de derechos humanos
y persigue una agricultura que:
les dé control sobre la tierra, las semillas y el agua a las campesinas
y los campesinos pobres para que vivan con dignidad;
produzca alimentos sanos para todos, libres de toda manipulación
genética;
produzca de modo sostenible para conservar los medios de subsistencia de
generaciones futuras;
fortalezca los derechos de las mujeres campesinas;
garantice la soberanía alimentaria;
fortalezca las comunidades rurales locales.