Para Walras la teoría económica se
basa en dos supuestos: por una parte cada persona, o empresa tiende a maximizar
su ganancia y por otra parte la demanda de cada bien debe igualar a su oferta.
Se apoyó en la curva de demanda propuesta por Cournot, pero
observó que solamente se aplica estrictamente al intercambio de dos
bienes, por lo que se ocupó de deducir la curva de oferta de uno de los
bienes a partir de la curva de demanda del otro. Para
expresar matematicamente los factores de los que depende la oferta,
usó la teoría de los servicios productivos de Jean Baptiste Say
(la venta de una unidad de un servicio comporta para
su poseedor una privación de utilidad).
Concluyó que las funciones de demanda y oferta de un
producto dependen tanto de su precio, como
de los precios de los demas productos, rentas, costos de
producción y otros factores. Los actores económicos proceden
mediante un 'tanteo', que aunque significa
respuestas individuales diferentes, finalmente resulta en un comportamiento que
tiende a maximizar la utilidad. El punto de equilibrio de cada mercado depende
de los que sucede en los demas mercados, por lo que la
determinación del
equilibrio general, de todo el mercado, implica la determinación simultanea
del
equilibrio parcial de cada mercado. Walras construyó entonces un sistema de ecuaciones que define el equilibrio
estatico de este sistema de cantidades interdependientes.
Su teoría monetaria partió de la necesidad individual de medios
de pago, analoga a la demanda de un bien (el dinero), cuyocomportamiento
se rige también por la utilidad marginal y es predecible mediante
'ecuaciones de circulación'.
[editar] El Óptimo de Pareto
Artículo principal: Eficiencia de Pareto
Alfredo Pareto desarrolla y perfecciona la teoría de Walras. Introduce
el concepto de óptimo económico que hoy en día se conoce como
el Óptimo de Pareto. El óptimo es aquella
situación en la que ningún individuo puede mejorar su
situación sin que empeore la de algún otro.
Para que se dé el Óptimo de
Pareto, es necesario que haya un sistema de
competencia pura y perfecta. Esto significa que se den estas cinco condiciones:
atomicidad de los mercados (tantos compradores y vendedores que ninguno de
ellos pueda influir individualmente en el precio del producto), transparencia y
perfecta información (todo individuo conoce perfectamente cuales
son las condiciones del mercado), libre entrada y salida del mercado (no
existen restricciones para que cualquier empresa pueda producir lo que desee),
libre movilidad de los factores productivos (tanto el capital como el trabajo
van a aquella situación según el precio de los factores), y por
fin homogeneidad del producto (a los consumidores les da igual a quién
comprar si todos los productos son iguales).
VIGENCIA DEL MODELO DE WALRAS CON LA ECONOMÍA ACTUAL
La descripción del funcionamiento de las
operaciones en todos los mercados de venta y compra de un bien, con la
dirección de un arbitro y con jornadas únicas o
consecutivas hasta lograr el equilibrio final se asemeja mucho a un tipo de
operaciones frecuentesen la actualidad en los mercados de valores.
Las operaciones bursatiles que incluyen compra-venta de acciones,
títulos públicos nacionales e internacionales, bonos diversos,
etc. conforman un variado portafolio. Existen
principalmente, dos tipos de operaciones que se realizan en esos mercados
financieros
1. operaciones de riesgo que permiten a los tomadores grandes ganancias pero
también los exponen a grandes pérdidas.
2. operaciones mas conservadoras que se basan en una selección
especial de los corredores de bolsa, quienes para atenuar las situaciones de
mayor riesgo, eligen activos cuyas operaciones de compra y venta
“calzan” entre sí, evitando así grandes pérdidas
pero logrando para sus clientes menores ganancias que con el sistema antedicho.
Dichas operaciones se denominan y no es casual tal
nombre, de arbitraje.
Ademas, el funcionamiento dentro de un rango
horario del modelo ideado por Walras para los
mercados de bienes y las horas de inicio y cierre predeterminados actualmente
para la actividad bursatil en todas las ciudades del mundo, muestra otra relevante similitud.
Luego, las teorías enunciadas por grandes economistas y
matematicos, como el caso de León Walras durante la segunda mitad
del siglo XIX, hoy tienen aplicación en las actividades
económicas y financieras de muchos países, tanto desarrollados
como emergentes o en vías de desarrollo.
* León Walras intentó aplicar a la
economía lo que Newton
había hecho en la física. Tenía la convicción
de que el conocimiento económico debía expresarse con elmismo
rigor de una ciencia exacta. La nueva teoría debía fundamentarse
en parametros abstractos, que fuesen la formalización de las
relaciones de las personas en la actividad económica real. Esa era la única vía que conduciría a la
economía a tener la misma validez lógica que la ciencia
matematica.
Para lograr su objetivo, en su libro Elementos
de economía política pura (1874), el autor propuso un modelo matematico de equilibrio general, donde se
explicara toda la economía a través de un gigantesco sistema de
ecuaciones. Para hacer el analisis, simplificó a los individuos,
aislandolos y suponiéndoles gustos y preferencias determinadas.
A eso le agregó una premisa fundamental: la
base de las conductas de las personas es que éstas son maximizadoras de
utilidad y, dado esto, se puede pronosticar su comportamiento económico.
Walras propuso representar toda la economía a través de un gigantesco sistema de ecuaciones.
En su teoría, Walras partió de la base que la economía
tiende siempre a estar en equilibrio -general y
simultaneo- en todos los mercados: Cualquier exceso de oferta o demanda
que se produzca, es rapidamente asimilado y corregido en forma
automatica. Los desequilibrios son, por lo tanto, necesariamente
de corto plazo, gracias a que la acción de los empresarios permite
restituir la normalidad.
En el modelo de equilibrio general, el empresario pasa a ser la figura central del proceso económico; es
quien compra factores en un mercado y vende sus productos en otro, utilizando como medio de cambio un bienque actúa como unidad de cuenta. Este agente, sin necesariamente tener conciencia de ello, permite
coordinar los distintos mercados y asegura el equilibrio general de la
economía.
La proyección
Aunque Walras no completó su proyecto original de acompañar su
modelo de equilibrio general con otros dos, sobre la economía aplicada y
la economía social, sí publicó obras menores sobre varios
temas económicos y monetarios. Sin embargo, fueron sus Elementos de
economía política pura, los que le hicieron famoso como
padre de la Escuela de Lausanne.
El objetivo de la obra de este autor era crear
cimientos realistas para una política de reforma social basada en la
intervención del Estado. De hecho, aunque su labor
permitió el desarrollo de la teoría económica ortodoxa en
el mundo capitalista, también estableció las bases para los
modelos de planificación económica de los países
socialistas. Quiza su mayor aporte fue el haber
constituido una de las bases de donde surgió la 'revolución
marginalista' en la economía.
No obstante, en su tiempo fue poco apreciado. Sólo
Vilfredo Pareto se convirtió en su discípulo
(sucediéndole, ademas, en la catedra de Lausanne). En
cualquier caso, es evidente que hay una calidad arquitectónica en el
sistema de equilibrio general de Walras, a pesar de su innegable
simplificación de la realidad y sus problemas teóricos. Y
no obstante haber sido un matematico
aficionado, demostró el poder de esta ciencia para resolver problemas
teóricos complejos, algo que la economía actual tiene muy en
cuenta.