La pradera, pastizal o dehesa, es un bioma
o ecosistema cuya vegetación predominante consiste en hierbas. El clima es templado,
entre semiarido y húmedo; hay una estación calida y, generalmente, otra estación fría en invierno.
En este ecosistema
las gramíneas, juncales, pastos o césped constituyen la vegetación dominante. Aunque en las praderas
de las regiones templadas pueden existir mas de 50 especies de plantas vasculares y en las praderas tropicales mas de 200, en general, dos o tres
especies de gramíneas
son las que dominan mas del 60% de la biomasa del terreno; aquí habitan grandes herbívoros y aves, ademas de una gran cantidad
de flora.
Las praderas templadas se encuentran en cinco areas principales: las prairies (praderas) de los Grandes Llanos de Norte América, la pampa de Argentina y Uruguay,
la sabana de Africa del Sur, las
estepas de Eurasia Central y rodeando
los desiertos en Australia.
De las praderas de América del Sur son originarios roedores y otros animales pequeños: vizcachas, maras y cuises, armadillos como los
peludos y mulitas, comadrejas, lagartijas y zorros. Entre las
aves se encuentran ñandúes, perdices americanas, lechuzas, patos,martinetas, chajaes, teros, chimangos y caranchos. De las especies
de pajaros que pueblan los sitios
arbolados se distinguen horneros, cardenales, calandrias, benteveos, tijeretas, churrinches y picaflores. En las regiones de pajonales abundan los pechos
colorados,
las cachirlas y los chingolo.
En América del Sur corren peligro
de extinción el puma y el venado
de las pampas. En América
del
Norte los bisontes, que hasta el siglo
pasado formaban grandes rebaños, ahora viven en reservas naturales. Por otra parte, también
son animales característicos
de esas praderas el tejón americano, la mofeta rayada y el coyote.
En las praderas
asiaticas se encuentra
el antílope saiga, que también frecuenta las estepas.
La fauna de la pradera cumple
un papel fundamental en la preservación del
equilibrio natural, esencial
para la cadena alimentaria. Numerosas especies de animales
excavadores de las praderas, al remover el suelo, modifican el contenido postresal mineral de éste
y posibilitan el crecimiento
de las especies vegetales. Bajo tierra actúan
las lombrices y otros invertebrados que, ademas, oxigenan el suelo, junto con millones de bacterias que descomponen
los residuos organicos.