A raíz de lo sucedido esta semana con un
auto BYD (Building Your Dreams) modelo F0 al cual no le funcionó el
sistema de encendido dactilar por estar cerca de antenas, es que en Marson
Tuning nos planteamos la siguiente interrogante ¿podemos confiar en los
autos chinos?
Las calles de Santiago, así como
también las de regiones, ya han recibido a una serie de autos chinos en
sus pavimentos. Modelos de las marcas Chery, Lifan, BYD, Great Wall, Jac y
Geely, entre otras 22, son parte de esta nueva invasión automotriz que
prometen calidad a menor precio.
Es probable que hasta el día de hoy exista un prejuicio con estos autos,
ya que cuando comenzaron a llegar a Chile (febrero 2007), se notaba la falta de
calidad en sus partes interiores y sus precios tan bajos, encomparación
a sus pares, hacía dudar. Hoy en día el escenario ha cambiado
bastante y se ven autos de marcas chinas mucho mas equipados, con piezas
firmes, motores potentes y a precios súper accesibles.
Tanto ha sido el éxito últimamente de estos vehículos, que
la marca asiatica Great Wall, se perfila en el décimo puesto del
ranking general de venta de vehículos.
Ellos son una alternativa para jóvenes y familias que buscan comprar un
auto y que en vez de comprar uno usado, tienen la opción de comprar uno
nuevo con garantía de fabrica.
Aún posicionandose en el mercado, sigue (quizas en menor
medida) el temor de adquirir uno de estos autos y que salga malo, honestamente
hablando. Entonces, ¿cómo hacer cambiar ese concepto? ¿Los
autos chinos son realmente buenos?