El 1º de septiembre de 2004, un grupo de hombres armados irrumpía en una escuela
de Beslan y tomaba niños, padres y profesores como rehenes. Al cabo de tres días de
crisis, de una serie de explosiones y el asalto de las fuerzas del
orden, 376 personas encontraron la muerte, entre ellas 172 niños. La
acción fue reivindicada por Shamil Basayev, un
jefe militar checheno. Extrañamente, la prensa occidental, lejos de
expresar la menor compasión por los rusos, arremetió con
saña contra el presidente Putin, acusado de ser responsable de la
carnicería por mantener una atroz guerra colonial en Chechenia y a la
vez por haber organizado un asalto a ciegas.
Chechenia es un Estado miembro de la Federación
Rusa que vivió dos guerras sucesivas en un decenio y sigue inmersa en el
caos. La visión étnica es la que defienden la extrema derecha, en
Rusia y en la misma Chechenia, y en Occidente, los partidarios del
choque de civilizaciones. La visión euroasiatica es la que
promueve el presidente Putin, quien no deja pasar ninguna ocasión de
celebrar el aporte musulman a la edificación de Rusia.
Para la realización del ataque de
Beslan, Shamil Basayev no pudo contar con sus fuerzas militantes.
Tuvo que recurrir a toxicómanos, pagados en droga y
comandados por varios combatientes aguerridos.Basayev no goza de
legitimidad alguna en Chechenia y no tiene partidarios. Es un jefe militar que tuvo una carrera de mercenario en
diferentes conflictos antes de tratar inútilmente de entrar en la
política en Chechenia y volver, finalmente, a la acción armada.
La operación estaba concebida para que se
terminara en una matanza. El comando había emplazado bombas en el
gimnasio pegandolas a los techos con esparadrapo, sistema tan precario
que uno se pregunta cómo pudo aguantar tres días. Al parecer, la
dirección militar del Revivió y redobló sus esfuerzos para complacer a los clientes del
hotel, pero sufrió un colapso físico y mental en 1911.
Después de esto nunca recupero plenamente su brío y la
energía que siempre lo caracterizaba para el trabajo Después de
que César Ritz “murió en Küssnacht, cerca de Lucerna,
Suiza, el 24 de octubre de 1918, se suponía que el hijo que le quedaba,
Carlos, tomaría el lugar de supadre quedando a cargo de los hoteles Pero
Carlos estaba mas inclinado a viajar, e incluso antes de la muerte de su
padre viajó a los Estados Unidos para trabajar allí.
En 1928 su madre hizo una peregrinación a
través del Atlantico para persuadirlo de
que regresara a París y trabajara en el hotel de su padre. Ante tanta
insistencia por parte de su madre, Carlos cedió, pero una vez en
París se encontró con que todos los puntos de la alta
dirección en el hotel estaban llenos, por lo que trabajó en la
oficina local de un corredor de bolsa de Nueva York.
En la crisis mundial los hoteles cayeran en una
depresión económica haciendo muchos cambios y los personajes
adinerados q los visitaban, ya no eran ricos y dejaban de frecuentar los
hoteles
Con la segunda guerra mundial y la crisis económica los viajes que se
acostumbraba ah hacer fueron paralizados pro completo y los huéspedes
del hotel dejaron de visitarlo pues las salas de comedor se cedieron para las
reuniones entre militares.
Entre los años de 1950 y 1960 los hoteles se adaptaron ala nueva forma
de vida; cuando Carlos Ritz se convirtió en presidente de la junta
directiva de los hoteles, en 1953, la mayor parte de la riqueza y aristocracia
se habían ido y en 1968, el 70 % de los clientes alojados en el Ritz de
París eran hombres de negocios estadounidenses en cuentas de gastos
grupo había decidido
huir sacrificando al resto de sus compañeros, pero se vio sorprendida
cuando los hechos se precipitaron. El comando no formuló demanda alguna
antes del final del segundo día, o sea, antes de la llegada de los
periodistas extranjeros, y la exigencia que planteó era irrealista
así como puramente formal.
La toma de rehenes tuvo lugar tres días después de la
elección presidencial en Chechenia y horas después
final de la cumbre ruso-germano-francesa de Sochi, que saludó la
normalización política en Chechenia.