EMILIANO ZAPATA
Emiliano Zapata (c. 1879-1919), líder revolucionario y reformador agrarista
mexicano, nacido en Anenecuilco, estado de Morelos. Campesino mestizo, en defensa
de los derechos de su pueblo a las tierras, 'la tierra es de quien la
trabaja', reclutó un ejército de peones, en buena parte indígenas de los
pueblos y las haciendas de Morelos, y con el grito de guerra 'Tierra y
Libertad', se unió en 1910 a la Revolución Mexicana de Francisco Ignacio
Madero, cuyo objetivo era derrocar al régimen de Porfirio Díaz.
Zapata perdió la confianza en Madero, quien asumió la
presidencia en 1911, y se declaró en su contra, formulando su propio programa
de reforma agraria (conocido con el nombre de Plan de Ayala), mediante el que
pretendía redistribuir la tierra entre los campesinos.
Durante las presidencias del
dictador Victoriano Huerta (1913-1914) y del
presidente constitucionalista Venustiano Carranza (1914-1920), Zapata siguió
manteniendo sus actividades guerrilleras en contra del gobierno, extendiendo su poder por todo
el sur de México. Junto con Francisco (Pancho) Villa,
que había aceptado el Plan de Ayala, entró en la ciudad de México en 1914.
Al año siguiente, Zapata se retiró a Morelos, donde continuó
defendiendo sus posiciones, frente a las tropas constitucionalistas. En
1919 murió asesinado en una emboscada organizada por un
agente de Carranza, lo que causóuna enérgica condena de la opinión pública y de
gran parte de los propios sectores constitucionalistas.
Considerado por sus enemigos un simple saqueador,
Zapata ha sido idolatrado por los campesinos y por la gente del
pueblo como
reformador revolucionario y héroe; su vida ha inspirado innumerables leyendas y
corridos populares.
Caudillo de la Revolución Mexicana. Nació el 8 de
agosto de 1879, en San Miguel Anenecuilco, del Distrito de Villa de Ayala en el
hermoso Estado de Morelos. Fue hijo de Cleofás Salazar y
Gabriel Zapata. A los 17 años quedó huérfano de padre.
Lo que lo motivó a luchar por la defensa de la tierra, fue el ver como su padre
lloraba de impotencia, al verse despojado injustamente de sus tierras por los
caciques del pueblo y el ver cómo eran tratados los campesinos de esa época. En
esos momentos Emiliano lleno de coraje exclamó: 'Cuando yo sea grande haré
que te las devuelvan'.
Emiliano fue un joven inquieto como todos, se interesó desde muy niño por la
historia de su país, en la escuela siempre le preguntaba a su maestro acerca de
los hechos de la independencia y todo lo que tuviera relación con las luchas
que se realizaban en su país.
En 1906 participó en Cuautla en una junta en la que se
planteó la necesidad de defender la tierra de los campesinos morelenses de la
voracidad de los hacendados porfiristas.
El 12 de septiembre de 1909 fue elegido presidente de la
junta de defensa de las tierras de Anenecuilco. El principal
planteamiento de Zapata fue defenderel derecho del pueblo a la
tierra, que significaba el derecho a la existencia misma de las comunidades
campesinas. Emiliano estaba dispuesto a luchar contra todo y
contra todos contando solamente con la confianza y apoyo de su pueblo.
Al estallar la revolución, Zapata se incorporó a las fuerzas maderistas,
atraído por las demandas agrarias del Plan de San Luis; pero una vez
que triunfó este movimiento, el reparto de la tierra no se llevó a cabo. Los
hacendados, aprovechando que el ejército porfiriano se mantuvo en pie,
presionaron para que las fuerzas campesinas fueran desarmadas y tramaran una
traición que por poco le costaba la vida a Zapata. En esas
condiciones, Zapata reorganizó a su ejército y tomó Yautepec, Cuautla y
Cuernavaca. Al triunfo de la revolución maderista, se
negó a deponer las armas mientras no se hiciera efectivo el reparto de tierras.
Esta actitud la mantendría hasta el fin de su vida, la cual le provocó
enfrentamientos con quienes ocuparon el poder, mostrándose fiel a los
principios del
Plan de Ayala, ideario agrarista en el que se reflejaban los anhelos de los
campesinos, sintetizados en la frase 'Tierra y Libertad'. La
recuperación de las tierras que les habían quitado a los campesinos era su
objetivo principal.
A partir de la proclamación del Plan de Ayala los zapatitas
defenderían su arrojo contra los gobiernos de Madero, Victoriano Huerta y Venustiano
Carranza. Liquidaron el latifundismo y repartieron la tierra; confiscaron los
ingenios y una gran empresapapelera y los pusieron a trabajar en beneficio de
la población; fundaron un banco agrícola y abrieron numerosas escuelas
primarias, incluso para adultos; reorganizaron la vida política de los
municipios, dando impulso a la organización tradicional de los campesinos y
crearon comités de vigilancia.
Derrotado Villa en 1915, sólo el zapatismo representaba un
obstáculo a la consolidación del
nuevo gobierno. Contra Zapata se dirigieron numerosas fuerzas
que prácticamente arrasaron el estado de Morelos. La mujer también tuvo un papel muy importante en la vida de Emiliano, desde su
madre que fue una mujer de mucho temple y carácter hasta sus fieles revolucionarias
que lo apoyaron incondicionalmente hasta el día de su muerte.
En 1919, víctima de una celada, Zapata fue asesinado en la
hacienda de Chinameca, en el mismo lugar que ocho años atrás le tendieron igual
traición. El movimiento zapatista fue derrotado
militarmente, más no sus ideales de justicia. En una carta dirigida a
Pancho Villa, Zapata escribió: 'La ignorancia y el oscurantismo de los
tiempos no han producido más que rebaños de esclavos
para la tiranía'.
Con el paso del
tiempo, Zapata se convirtió en héroe; los defectos del
caudillo quedaron difuminados, olvidados, transformados por la pluma del poeta, la mano del
muralista o las elocuentes palabras del
político.
En México fue conocido como 'el Atila del Sur', Zapata es, hoy por
hoy, el mártir del agrarismo, el símbolo de la redención social en México.
Algunos loconsideran como un bandido, otros más como un hombre sin escrúpulos
que supo aprovechar la oportunidad, Pero lo que sí es cierto, es que este
singular personaje ayudó a mucha gente, que luchó por sus ideales, que
finalmente no fueron sólo de él sino de muchos mexicanos que ya estaban
cansados del abuso, maltrato, prepotencia y explotación de sus dirigentes.
Defendió con coraje y como un gran hombre la propiedad de
la tierra. 'Tierra y Libertad' fue su lema; aún hoy
la sociedad aclama 'La tierra es para quien la trabaja.