El arte rupestre
1.
Técnicas de representación
En la Península Ibérica existen unos 84 yacimientos localizados, y aunque
repartidos de forma muy desigual, es el área cantábrica donde se encuentra el
núcleo más numeroso e importante.
Las técnicas usadas en el arte rupestre son dos: el grabado y la pintura. De
momento no se han recogido en la Península muestras de
escultura o bajorrelieve.
El grabado se realizó mediante buriles o con los dedos, siendo esta técnica
digital la datada con más antigüedad, se solía realizar con los dedos sobre la
arcilla fresca de la cueva bien con figuras de animales (cueva de la Clotilde
de Santa Isabel) o formando figuras de difícil interpretación, como los
llamados 'macarroni' de la cueva del Cudón o de Altamira. La técnica del
grabado con buril permite la realización de figuras más finas y el poder marcar
mejor los detalles. En un primer momento se usan trazos muy profundos y
marcados (Venta de la Perra), que progresivamente se van afinando, llegando a
las finísimas figuras de la Cueva del Castillo o Altamira.
Pero, sin lugar a dudas, la técnica más importante empleada
por los artistas paleolíticos es la pintura en sus tres modalidades. La
primera seria la del
pincel, realizados con pinceles de cerda o fibras vegetales, los colorantes se
hacían de óxidos minerales o materiasvegetales. Otra técnica de la pintura
seria el tamponado, para esto se mojaría un fragmento de piel o de musgo sobre
la pintura y con ella se iría extendiendo sobre la pared, un ejemplo de esta
técnica serian las ciervas de Covalanas (Santander) o Arenaza (Vizcaya). La
tercera técnica seria el soplado, para ello se rellenaría un
tubo de materia colorante y soplando a través de él, se colorearía la pared.
Esta es la técnica empleada en las pinturas de manos de la Cueva del Castillo o Maltravieso (Cáceres).
El dibujo también formó parte de estas representaciones, generalmente los
trazos dibujados han sido realizados con carbones
procedentes de hogares.
En las cuevas puede haber un sólo santuario, o varios,
diferenciados entre sí por el tipo de representación material (grabado o
pintura), así como
por el estilo y de más aspectos técnicos o artísticos de sus figuras.
Las pinturas suelen ser de color rojo o negro, y tanto
estas como los
grabados debieron de tener desde muy antiguo un sentido litúrgico, lo que debió
de continuarse en el arte rupestre ya que los distintos santuarios ofrecen uno
de los tres tipo de representación.
La presencia de varios santuarios en la misma cueva, así como la
superposición de figuras en varios estilos y técnicas permiten asegurar la
mayor o menor antigüedad de las figuras de un santuario respecto a otro.
La temática
La temática del
arte rupestre en la Península Ibérica sigue las normas generales a todo el
occidente europeo. Los temas más utilizados son la figura
humana, la figura animal y los signos.
La figura animal es, sin duda, la más importante, representando alos animales
que el hombre veía en su entorno medioambiental. Las especies
animales que se encuentran son el bisonte, el caballo, el ciervo y el jabalí.
El reno,
tan importante en Francia, apenas aparece aquí. Son poco
representados el elefante, el rinoceronte y la foca. Esta fauna
corresponde a los yacimientos rupestres del área cantábrica, sin embargo
para la zona mediterránea la fauna representada son el ciervo, la cabra, el
caballo y el toro.
El animal aparece como
tema único en varios santuarios, aunque representados por varias especies, como ocurre con las figuras rojas de Covalanas o en
grabados como
en Llorin II. Son más frecuentes las representaciones de conjuntos que
presentan varias especies animales, asociados a
ideomorfos de distintos tipos (Las Chimeneas, Las Monedas, etc.) a los que hay
que agregar una serie restringida en los que están presentes los antropomorfos
(Altamira, Hornos de la Peña, Cándamo, etc.). Por lo tanto, las representaciones de animales son más numerosas
que las de los ideomorfos, mientras que los antropomorfos son más minoritarias.
Dentro de cada santuario el número de representaciones de cada especie animal
es variable, aunque siempre una de ellas aparece como mayoritaria. La
presencia mayoritaria de este grupo de animales ha de
ponerse en relación, bien con la mayor abundancia del
mismo en el biomedio donde se halla enclavada la cueva - santuario, o bien ser
preferencia del
cazador, aunque ambos supuestos pudieran actuar conjuntamente. Se puede hablar
de la existencia de un animal mayoritario y dominante,
estrechamente relacionado con el resto de los que componenel santuario, que
podrían considerarse complementarios y todos ellos consecuencia de un
determinado biomedio. Pudiéndose por tanto establecer la relación binaria
dominante - complementario que se presenta como el elemento
básico de todo sistema religioso e los santuarios paleolíticos.
3. Iconografía y signos
El tema ideomorfo no está presente en todos los santuarios. Muchas de sus
figuras fueron interpretadas como trampas de caza, casas de
espíritus, etc. Aunque todo hace suponer que son elementos de
carácter simbólico, relacionados no sólo con lo religioso, sino también con lo
social.
Algunos signos alargados han sido identificados como lanzas o venablos, un caso particular serian los
signos de la cueva de Santian (Santander), identificados
como mazas. algunas representaciones como
las vulvas de Tito Bustillo se relacionan con representaciones femeninas y
sobre todo los signos ovalados o rectangulares de cuevas como El Castillo o La Pasiega. Otros de
difícil interpretación serían las puntuaciones, en casos como las de El
Castillo tendrían un significado de orientación en el interior de la cueva,
pero en otras como las de la Meaza o Chufin permanecen desconocidos sus
significados.
Buscar los significados a estas representaciones es
uno de los temas más interesantes sobre el arte paleolítico. Algunos etnólogos
actuales han basado sus estudios en la observación de
los primitivos actuales, cuyas condiciones de vida en muchos casos son
semejantes a las el Paleolítico.
Reinach buscó una explicación basada en el teoteismo y a partir de él el
significado mágico del arte rupestre fue tomando sentido.Para otros, el arte
era la expresión de una serie de formalismos que el hombre paleolítico
utilizaba para proporcionar la caza y asegurar la fecundidad y abundancia de
las especies de las que vivía.
Los tipos de ideomorfos son muy variados y para cada una de
las etapas culturales ofrecen tipos nuevos. Así durante
el Auriñaciense sólo aparecen figuras grabadas, formando series de trazos en
haz. Mientras en el Gravetense siguen los haces lineales y hacen acto de
presencia las formas angulares, apareciendo las primeras series de puntos o
discos pintados en rojo y asociados a una mano (Castillo I). Durante el
Solutrense aparte de los signos anteriores aparecen las formas rectangulares
que más adelante se transformaran en curvas cerradas u oblongas con divisiones
internas o sin ellas. A estas
formas siguen grandes haces de líneas paralelas y de gruesos trazos o bastones
asociados a series de puntos. Los ideomorfos tienden a desaparecer en las
últimas etapas del Magdalenense.
En lo que respecta al arte antropomorfo sus tipos son
escasos, aunque variados. Las figuras grabadas son las que ofrecen un mayor número de antropomorfos y sus primeras figuras
aparecen en el arte mueble del Gravetense. En el rupestre
aparecen en el Magdalenense inferior.