PELVIMETRIA
PELVIS Y RELACIÓN
FETO-PÉLVICA
ASPECTOS GENERALES ASPECTOS HISTÓRICOS ASPECTOS ANATÓMICOS Pelvis
ósea Pelvis falsa Pelvis verdadera Clasificación de la pelvis
Ginecoide Androide Antropoide Platipeloide Planos radiológicos de la
pelvis Estrecho superior Estrecho medio Estrecho inferior
RADIOPELVIMETRÍA Técnica de Mengert Técnica de
Colcher-Sussman Técnica de Snow-Lewis TÉCNICA DE SNOW-LEWIS Placa
antero-posterior Diametro transverso maximo del estrecho superior
Diametro transverso del estrecho medio o biciatico
Diametro transverso del estrecho inferior o biisquiatico Placa
lateral Diametro antero-posterior del estrecho superior Diametro
antero-posterior del estrecho medio Diametro antero-posterior del
estrecho inferior Diametro sagital posterior Correcciones de los
diametros Factor de corrección de los diametros
anteroposteriores Factor de corrección de los diametros
transversos Estudio del feto Diametro aproximado de la cabeza Tipo de
presentación Variedad de posición Grado de encajamiento ASPECTOS
CLÍNICOS Indicaciones Evaluación clínica Controversias
OTROS MÉTODOS Ultrasonido Tomografía axial computarizada
Resonancia magnética nuclear Indice feto-pélvico Otros
CONCLUSIONES REFERENCIAS
OBSTETRICIA
MODERNA
ASPECTOS GENERALES
El canal del parto es uno de los factores que influyen en el pronóstico
del parto y hay que considerar una parte blanda y una parte ósea. Desde
el punto de vistaobstétrico, la pelvis blanda es la menos importante de
las dos, aunque es indudable que la integridad anatómica del útero, cuello,
vagina, vulva y periné es indispensable para el buen progreso del parto. Para el
especialista, es importante conocer la anatomía de los órganos
genitales internos y externos, incluyendo el diafragma pélvico pero,
debido a que su descripción anatómica va mas alla
del alcance de este libro, este capítulo se va a limitar a describir la
pelvis ósea y se recomienda el estudio de los libros clasicos de
anatomía para el estudio de la pelvis blanda.
ASPECTOS ANATÓMICOS Pelvis ósea
La pelvis ósea esta formada por la unión de cuatro huesos:
el sacro, el coxis y los dos ilíacos. El ilíaco es producto de la
fusión del
ilium, el isquión y el pubis (fig. 8-1).
ASPECTOS HISTÓRICOS
Durante muchos años los investigadores han
estudiado la relación feto-pélvica con el objetivo de identificar
la presencia o ausencia de desproporción. El primero en describir la
anatomía de la pelvis materna fue Vesalio, en 1543, y es Savonarola, en
1560, quien introduce el concepto de desproporción feto-pélvica
(DFP). En 1752, Willian Smellie, realiza la primera descripción del mecanismo del parto y es la primera persona que mide
el diametro conjugado diagonal. La evaluación de la
relación feto-pélvica se siguió haciendo de forma manual
hasta después del descubrimiento de los rayos X
por Röentgent, en 1895. En 1897, la primera imagen
radiografica de lapelvis materna fue realizada por Albert, en Alemania y
Varnier, en Francia. Durante las siguientes cinco
décadas la radiopelvimetría (RP) fue considerada la herramienta
ideal para la medición de la pelvis materna y para estudiar las
variaciones anatómicas que pueden influir en el trabajo de parto.
Luego aparecieron muchas técnicas radiológicas para valorar la
relación feto-pélvica, entre las que destacan las de Jarcho;
Thoms, Cadwell y Molloy; Mengert; Colcher-Sussman y Snow y Lewis, algunas de
las cuales se analizaran posteriormente. En la actualidad el valor de la
RP, como método único para valorar una DFP es dudoso y la
decisión de una cesarea debe ser tomada sobre la base de varios
criterios y no solamente en la RP (Horrocks et al, 1991).
Figura 8-1. Huesos que forman la
pelvis ósea.
La pelvis esta dividida, para su estudio, en dos partes: falsa y
verdadera.
Pelvis falsa. Es la pelvis que se encuentra por encima
de la línea terminalis, llamada también imnominada y que
esta limitada por detras por la columna lumbar, a los lados por
las fosas ilíacas y al frente por la parte mas inferior de la
pared abdominal.
Pelvis verdadera. Que esta por debajo de la línea
terminalis y esta limitada por detras por el sacro, a los lados
por la cara interna del isquión y al
frente, por el hueso púbico y las ramas ascendentes del isquión.
Clasificación de la pelvis
Se han señalado varias clasificaciones de pelvis; la mas aceptada
es la de Caldwell,Molloy y Swenson , quienes
consideran cuatro tipos fundamentales (fig. 8-2).
FETO-PÉLVICA
Entre los factores que contribuyen a la formación de un
determinado tipo de pelvis se han señalado los factores ambientales,
culturales y genéticos. Así, se ha encontrado que la pelvis
androide es mas frecuente en mujeres expuestas a una gran actividad
física durante la adolescencia, la antropoide en la que caminaron a una
edad tardía, usualmente después de los 14 meses de nacida, y la
platipeloide en las que adquirieron la posición erecta antes de los 14
meses. Por otro lado, no se ha encontrado una mayor frecuencia de signos de
androgenización en mujeres con pelvis androide en relación con
los demas tipos (Abitbol, 1996).
Planos radiológicos de la pelvis
Para el estudio radiológico se ha
dividido la pelvis en tres planos imaginarios (Colcher and Sussman, 1944) (fig.
8-3).
Figura 8-2. Tipos fundamentales de
pelvis.
Estrecho superior. Esta limitado por
detras por el
promontorio y las alas del
sacro, a los lados por la línea
terminalis y al frente por el pubis. En este plano, el diametro mas importante es el
conjugado obstétrico o antero-posterior del
estrecho superior, que va del promontorio del sacro a la cara posterior del pubis (fig. 8-3 A - A´).
Ginecoide. Es la pelvis ideal y se caracteriza por:
diametro antero-posterior similar al transverso, sacro en
posición normal, paredes laterales rectas, espinas noprominentes,
angulo subpúbico abierto y sagital posterior algo mas
pequeño que el anterior. Constituye, aproximadamente,
el 50% de los tipos de pelvis y el pronóstico para el parto es muy
bueno. Androide. Se caracteriza por:
diametro antero-posterior algo menor que el transverso, sacro inclinado
hacia adelante, paredes laterales convergentes, espinas ciaticas muy
prominentes, angulo subpúbico cerrado y sa-gital posterior mucho
mas pequeño que el anterior. Constituye,
aproximadamente, el 15% de las pelvis y el pronóstico para el parto es
malo.
Estrecho medio. Esta limitado hacia
atras por la curvatura del
sacro, a los lados por la cara interna del
isquión y hacia adelante por el borde inferior del pubis. En este plano, el diametro mas importante es el
biciatico o transverso del
estrecho medio que une las espinas ciaticas (fig. 8-3 B - B´). Estrecho inferior. Esta formado por dos areas
triangulares que comparten una base común que es la línea que
une las dos tuberosidades isquiaticas. El triangulo anterior
tiene su punta en el borde inferior del pubis y sus límites
laterales estan formados por el angulo subpúbico. El
triangulo posterior tiene su punta en la parte mas inferior del
sacro y sus límites laterales por los li-gamentos sacrociaticos y
las tuberosidades isquiaticas (fig. 8-3 C - C´).
Antropoide. Se caracteriza por: diametro
antero-posterior mayor que el transverso, sacro largo y recto dirigido hacia
atras, paredes laterales algoconvergentes, espinas ciaticas poco
prominentes, angulo subpúbico algo estrecho y sagital posterior
mas pequeño que el anterior. Constituye,
aproximadamente, el 30% de las pelvis y el pronóstico para el parto es
bueno, aunque no es la pelvis ideal.
RADIOPELVIMETRÍA
A continuación se analizan brevemente las técnicas de Mengert y
Colcher-Sussman y se hara una descripción mas amplia de la
de Snow y Lewis, por ser considerada la mas universal de todas las
técnicas.
Platipeloide. Se caracteriza por: diametro
antero-posterior menor que el transverso, sacro curvo y corto dirigido hacia
atras, paredes laterales rectas, espinas prominentes, angulo
subpúbico abierto y sagital posterior mas pequeño que el
anterior. Es la variedad mas rara, constituye menos del 5% de los casos
y el pronóstico para el parto es malo. Estos cuatro grupos son
mas teóricos que practicos porque, en la mayoría de
los casos, se encuentran tipos intermedios como son: ginecoide
con tendencia antro-poide, androide con tendencia ginecoide, etc.
Tamaño y forma de la pelvis ósea. Tamaño de la cabeza fetal. Fuerza
externa producida por el útero. Moldeabilidad
de la cabeza fetal. Presentación y posición
fetal.
Con la RP sólo podemos evaluar el primero, segundo y quinto componente
de la DFP. El objetivo de esta técnica esmedir la
capacidad de la pelvis ósea en cm2, con el fin de hacerla mas
exacta para el diagnóstico de desproporción. Se calculan
los productos de los diame-tros transverso y antero-posterior tanto del estrecho superior como del
medio. Los límites para decir que una pelvis no es
suficiente son de 123 cm2 para el estrecho superior y de 106 cm2 para el
estrecho medio.
Técnica de Colcher-Sussman
Este método consiste en la toma de dos placas ra-diológicas de la
pelvis, una lateral y otra antero-posterior (fig. 8-4). Con el fin de hacer una
medida mas ra-pida de los diametros antero-posterior y
transverso de la pelvis superior y media, se coloca una regla en una
posición adecuada que es incluida dentro de cada una de las
radiografías. Con la suma de los diametros transverso y
antero-posterior del estrecho superior y medio, se define una pelvis suficiente
cuando el valor es mayor de 22 cm, para el estrecho superior y mayor de 20 cm,
para el estrecho medio (Thurnau and Morgan, 1995).
Figura 8-4. Técnica de Colcher-Sussman.
Técnica de Snow-Lewis
Esta técnica es una de las mas empleadas, por lo que se
dara una descripción detallada de la misma.
FETO-PÉLVICA
TÉCNICA DE SNOW-LEWIS
Se toma una placa radiológica antero-posterior y otra lateral. En la
primera, la paciente se coloca en la posición de decúbito dorsal,
apoyada sobre una tabla en la región lumbar, con lo que se trata de
llevar al estrecho superior aun plano mas horizontal. Los muslos se colocan juntos y las piernas se apoyan sobre los
talones. Para la placa lateral, se
acuesta en decúbito lateral derecho con la cabeza apoyada sobre el
antebrazo flexionado sobre el brazo. Mediante este
estudio radiológico se puede hacer el estudio de la pelvis y de la
cabeza fetal, es por eso que algunos la denominan
radio-céfalo-pelvimetría. Los diametros
pelvianos descritos por Snow en las dos placas son los siguientes (Snow and Lewis,
1940).
línea que pase por el borde externo del agujero obturador y de la
línea terminalis (fig. 8-5, línea a - a´) y en el sitio
donde estas líneas cortan las tuberosidades isquia-ticas se
marcan puntos cuya separación corresponde al diametro citado.
Placa lateral Diametro antero-posterior del estrecho
superior. Mide la distancia entre el borde antero-superior
del promontorio del sacro y el borde posterior del pubis y se conoce con el nombre de
conjugado obstétrico. Los va-lores normales son de 10,5
a 11,5 cm (fig. 8-6, X - X´).
Diametro antero-posterior del estrecho medio. Mide la
distancia del punto
medio de la cara
anterior del
sacro al borde inferior de la sínfisis púbica (fig. 8-6, Y -
Y´). Los valores normales son de 11 a 12 cm. Para obtener el punto medio
de la concavidad del
sacro, basta unir con una línea recta el promontorio y la punta del sacro (fig. 8-6,
línea b - b´).
Placa antero-posterior Diametro transverso maximo del
estrecho supe-rior. Mide laparte mas distante entre la
línea terminalis de cada lado y en condiciones
normales mide de 11,5 a 13,5 cm (fig. 8-5 A -
A´).
Diametro antero-posterior del estrecho inferior. Mide la
distancia entre la punta del
sacro y el
borde inferior del
pubis (fig. 8-6, Z - Y ´). Los valores normales son de 9,5 a 11,5 cm. En la practica, esta medida no se toma
en cuenta y, en su lugar, se usa
el sagital posterior.
Diametro transverso del estrecho medio o
biciatico. Mide la distancia entre las dos espinas
ciaticas. Los valores normales son de 10 a
11 cm (fig. 8-5 B - B´).
Diametro sagital posterior. Mide la distancia
entre la punta del
sacro y la parte media de la
línea que une las dos tuberosidades
isquiaticas (fig. 8-6, Z - Z´). Los valores normales son de 6,5 a 8 cm. Para obtener este último punto, se trazan
líneas a lo largo del borde inferior de los agujeros obturadores (fig.
8-6, líneas c - c´ y d - d´) y se marcan los puntos donde
corten el angulo posterior de las tuberosidades isquiaticas; la
mitad de estos dos puntos se toma como parte media del biisquiatico
(fig. 8-6, punto Z´).
Correcciones de los diametros
Como se sabe,
los estudios radiológicos no proporcionan una imagen real porque el
tamaño obtenido varía según la incidencia de los rayos y
la distancia foco-placa, de tal forma que la imagen pélvica
que se obtiene en la placa, no mide lo mismo que la pelvis que se esta
examinando. Esta distorsión debe corregirse mediante los factoresde
corrección de los diferentes diametros y empleando el instrumento
ideado por Snow, en colaboración con Lewis.
Figura 8-5. Diametros de la placa
antero-posterior
Diametro transverso del estrecho inferior o
biisquiatico. Mide la distancia entre las dos
tuberosidades isquiaticas y sus valores normales son de 9,5 a 10 cm (fig. 8-5 C - C´). Este
diametro se mide trazando una
MODERNA
Factor de corrección de los diametros transversos. Para la
corrección de los diametros transversos existen dos factores
diferentes.
1. El factor de corrección de los diametros transversos del estrecho medio e inferior
que se obtiene trazando en la placa lateral una línea paralela sobre el
borde de la película, tocando en forma tangencial el margen posterior del sacro (fig. 8-8, y -
y´). Esta línea base se considera como la superficie de la mesa; a
continuación se va a tomar la mitad de la línea que une ambas
espinas ciaticas y, a partir de allí, se traza una línea
que llegue a la línea base (fig. 8-8, línea z-z´). El valor
que resulte sera el factor de corrección de los diametros
transversos del
estrecho medio e infe-rior; pero como esta
línea también sufre distorsión y esta situada en el
plano sagital,
se puede corregir a su vez con el factor de corrección de los
diametros antero-posteriores que se describió anteriormente.
2. El factor de corrección del
diametro transverso del
estre-Factor de corrección de los diametros antero-posteriores.
Para la corrección de estos
diametros existe un solo factor, que se busca en la placa
antero-posterior, midiendo la distancia que existe entre la parte mas
saliente de los trocanteres del fémur (fig. 8-7, línea
I-I´); este valor se divide entre dos y se le restan tres. El valor de este factor oscila entre 12 y 13. El número obtenido,
se busca en el instrumento de corrección, llevando la parte corrediza
del mismo al número que corresponde al factor de corrección;
después se miden los diametros antero-posteriores en la placa
lateral, en la forma que se describió anteriormente con el mismo
aparato, y con la corrección se obtiene el valor real de estos
diametros.
Estudio del feto
Cuando se toman estas dos placas se pueden realizar los siguientes estudios
sobre el feto.
Figura 8-7. Forma de medición de los factores
de corrección de los diametros antero-posteriores y del
diametro de la cabeza.
Diametro aproximado de la cabeza. Para obte-ner este
diametro hay que realizar los siguientes pasos.
1. Sobre la placa antero-posterior se mide el perímetro la
distorsión, se corrige en la placa lateral con una línea que va del centro del perímetro
fetal a la línea base (fig. 8-8, línea u - u´); esta
línea se co-rrige a su vez con el factor de corrección de los
diametros antero-posteriores.
2. Sobre la placa lateral se mide también el perímetro fetal
podalica.
7. En los casos de cicatrices uterinas previas, donde se planee un parto vaginal.
Evaluación clínica
Con el tacto vaginal también se puede determinar el encajamiento, cuando
la parte mas prominente de la cabeza fetal esta a nivel de las
espinas ciaticas. No se debe confundir la parte mas
prominente con la bolsa serosanguínea, que es el edema del cuero cabelludo
que se ve con frecuencia en el trabajo de parto de las primigestas y en el
parto distócico de las multíparas. Con la palpación
abdominal se puede determinar el encajamiento, cuando no se puede palpar la
parte mas prominente de la cabeza fetal con la cuarta maniobra de
Leopold (ver cap. 2). En estos casos la cabeza esta fija y no se puede
mover libremente en la parte inferior del abdomen. Es importante tomar
en cuenta que una RP con diametros límites no es una
indicación formal de cesarea. La evaluación clínica
de cada caso en particular, tomando en cuenta factores como peso fetal, edad de
la madre, motivación a parto, etc. son factores determinantes. Si se
decide un parto vaginal, se debe dar una prueba de trabajo y, en el curso de su
evolución,decidir si continuar con la
vía vaginal o recurrir a la cesarea.
(fig. 8-8, u - u´), que se corrige con una
línea que pase en forma tangencial al trocanter mayor y paralela
al borde de la placa (fig. 8-7, línea j - j´). A
esta línea se le restan 3 cm y el resultado sera el factor de
corrección. Una vez obtenidos los perímetros de
las dos placas y hecha la corrección, se obtiene el promedio de los
valores y el resultado corresponde al diametro aproximado de la cabeza
fetal.
Tipo de presentación. Mediante
la RP se puede
determinar el tipo de presentación, que es la parte fetal que se pone en
contacto con el estrecho superior de la pelvis. De
esta manera se pueden determinar las presentaciones cefalicas, nalgas,
hombros y compuesta.
Variedad de posición. Las
diferentes variedades de posición que pueden ocurrir (ver cap. 10) se
pueden determinar mediante la RP. Grado de
encajamiento. Se dice que la cabeza
esta encajada, cuando el diametro biparietal de la cabeza fetal
esta por debajo de los límites del estrecho
superior. En la RP, la presencia de una cabeza encajada es un
índice sugestivo de que el estrecho superior tiene un tamaño
adecuado para permitir el parto vaginal.
Controversias
Existe controversia acerca de la utilidad de la RP de rutina en el manejo
obstétrico de la paciente en que se planea un
parto vaginal por las siguientes razones.
1. La pelvis ósea no es el único factor determinante de un
ASPECTOS CLÍNICOS IndicacionesEntre las posibles indicaciones de la RP
se encuentran las siguientes (Barton et al, 1982; Laube et al, 1981; Varner et
al, 1980).
1. Historia de fractura de la pelvis a cualquier edad antes 2.
parto normal porque ademas hay que tomar en cuenta el tamaño de
la cabeza, la presentación, la variedad de posición, la capacidad
de la cabeza de moldearse y adaptarse a los diversos diametros
pélvicos, el tipo de contracción uterina, la edad de la paciente,
etc.
2. Porque una RP normal no implica que la pelvis sea nordel
parto. Historia de traumatismos de los miembros
inferiores en etapas tempranas de la vida que producen cojera y, por tanto,
deformidad en el desarrollo de la pelvis. Malformaciones
congénitas de la pelvis y de los miembros inferiores que ocasionen
cojera. En los casos de sospecha de feto voluminoso.
Cuando la evaluación clínica del grado de
encajamiento de la cabeza fetal, mediante tacto vaginal, hagan sospechar una
DFP. Cuando se planea un parto vaginal en una
presentación
mal, en razón de que los estudios radiológicos tienen un factor
de error en su medición.
3. Por el posible efecto nocivo de las radiaciones sobre el
feto. La radiopelvimetría proporciona una información limitada al
médico encargado del
manejo del trabajo de parto y no se debe
anteponer a las decisiones clínicas en el manejo obstétrico del caso. Las
indicaciones de la radiopelvimetría deben ser establecidas en cada caso
en particular.113
OBSTETRICIA
MODERNA
OTROS MÉTODOS Ultrasonido
A pesar de que el ultrasonido representa en estos momentos una herramienta
indispensable en la practica obstétrica, todas las
técnicas de pelvimetría con ultrasonido han resultado
complicadas, tediosas, incompletas y sin utilidad clínica inmediata. Se han descrito técnicas para medir el estrecho inferior
de la pelvis (Nakano, 1981) y se ha logrado medir el diametro
biciatico (Vaclavinkova, 1973), pero no el resto de los diametros
pelvianos; sin embargo, a pesar de resultar poco practico para medir la
pelvis materna, resulta de un valor incalculable para la medición de la
biometría fetal. Con el se pueden obtener las medidas del diametro biparietal, circunferencia
cefalica, circunferencia abdominal y longitud del fémur y, sobre la base de estos
datos, calcular el peso fetal con un error aproximado de 100 g (Campbell and
Wilkin, 1975). De esta forma se puede hacer el
diagnóstico de macrosomía fetal que es una causa importante de
DFP.
Resonancia magnética nuclear
La técnica de resonancia magnética nuclear (RMN) re-presenta una
gran promesa para la evaluación de la relación
feto-pélvica (Stark et al, 1985; Wrigh et al, 1992). Con la RMN
se pueden obtener las mismas medidas que con la RP convencional, con un error
menor del 1%, no esta influenciada por
los movimientos fetales y uterinos y el tiempo de duración del examen es similar al
de la técnica clasica (Tukeva et al,1997).
Con estatécnica no se utilizan radiaciones io-nizantes y los estudios
preliminares en ratones no muestran ni embriotoxicidad
ni teratogenicidad. Por otro lado, la RMN permite evaluar la potencial
contribución de los tejidos blandos durante el
trabajo de parto y determinar la presentación y la variedad de
posición. Las desventajas son el alto costo y por lo
complejo de su técnica no se puede practicar de rutina.
Índice feto-pélvico
En 1986, el índice feto-pélvico fue introducido como un nuevo
método para identificar la DFP (Morgan et al, 1986). El objetivo de este índice es comparar prospectivamente la
circunferencia cefalica (CC) y abdominal (CA) del
feto (pasajero), con las respectivas circunfe-rencias del estrecho superior y medio de la pelvis
materna (pasaje). Los diametros antero-posterior y transverso del
estrecho superior y medio de la pelvis materna son medidos utilizando la
técnica de RP de Colcher-Sussman (fig. 8-4), antes de la semana 37. Las
medidas de la CC y CA se realizan con un equipo de
ultrasonido de tiempo real antes de la fase activa del trabajo de parto (fig. 8-9). Una vez que
se toman estas medidas se establece una relación entre ellas (fig. 810), si la relación resulta po-sitiva
indica que hay DFP y si resulta negativa, indica que no existe
desproporción. La ventaja es que permite comparar en centímetros
al feto en sus partes mas voluminosas y a la pelvis materna en sus
partes mas estrechas (Morgan and Thurnau, 1992). A pesar de que
losdiametros de la cabeza y abdomen fetal pueden variar durante el trabajo de parto, la respectiva
comparación del
índice ha demostrado una alta exactitud para el diagnóstico de
DFP.
Tomografía axial computarizada
El primero en describir la pelvimetría por radiografía digital
generada por un tomógrafo fue Federle, en 1982
(Federle et al, 1982), posterior a esto muchas instituciones médicas han
reemplazado la RP convencional por la pelvimetría con tomografía
axial computarizada (TAC). Usando esta técnica de obtienen dos
radiografías digitales de la pelvis y se usa un
factor de corrección para la magnificación. La antero-posterior,
donde se mide el diametro biciatico a nivel del estrecho medio y
el diametro biisquiatico a nivel del estrecho inferior y la
lateral, donde se mide el diametro antero-posterior del estrecho
superior y el diametro sagital posterior del estrecho inferior. Muchos
autores han confirmado la utilidad de la medición de la relación
feto-pélvica con la TAC por ser un procedimiento exacto, simple, de
mas facil interpretación que la RP convencional y, con los
equipos actuales de cuarta generación, tiene un menor grado de
exposición a radiaciones ionizantes para el feto (Brent, 1974; Moore and
Shearer, 1989). La exposición a estas radiaciones con la TAC es de 0,21 a 0,35 mGY, mientras que con la RP es de 0.8 a 11 mGY.
La desventaja de este método es su alto costo y
que se requiere de un equipo que no esta disponible en la mayoría
delos centros de atención hospitalaria.
Otros
Se han desarrollado otros métodos imagenológicos con el
fin de disminuir la dosis de radiación que llega al feto, sin reducir la
eficacia. Entre estos se encuentra la pelvimetría radiológica
digital, que usa las mismas placas de
la radiografía convencional, pero con un procesamiento digital
computarizado que permite una mejor medida de las distancias y ajustar el
contraste. Con esta técnica se puede disminuir la dosis de
radiación fetal a menos de la mitad de la dosis que se administra con un sistema de evaluación radiológica de alta
sensibilidad (Wright et al, 1995; Holje et al, 1997). También se ha
usado, en algunos centros, la pelvimetría radiológica con brecha
aérea, la cual tiene una dosis de radiación absorbida similar a
la TAC con una calidad de imagen también similar, por lo que resulta una
alternativa a las imagenes tomograficas en los centros donde no
se dispone de esta tecnología (Badr et al, 1997).
porque el criterio clínico debe prevalecer
sobre los resultados imagenológicos y cada paciente debe ser valorada
individualmente.
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CONCLUSIONES
La técnica e interpretación de las imagenes
pélvicas ha cambiado dramaticamente en el curso de los
años. El estudio de la relación feto-pélvica, le
permite al clínico contar con un instrumento
adicional para el diagnóstico de la DFP. La técnica mas
usada en la evaluación de esta relación es la
radiopelvimetría, de la cual se han descrito
múltiples métodos, siendo los mas usados los de Snow-Lewis
y ColcherSussman. En ambos se toman dos placas radiológicas: una lateral
y otra antero-posterior, que permiten la evaluación de los diferentes
planos de la pelvis (estrecho superior, medio e inferior) y establecer su
rela-ción con el tamaño de la cabeza fetal. También se
puede evaluar el tipo de presentación, la variedad de posición y
el grado de encajamiento del feto. Recientemente se han
desarrollado nuevas técnicas imagenológicaspara la
evaluación de esta relación entre las que se encuentran: la TAC,
que tiene una gran exactitud diagnóstica con baja tasa de
exposición ra-diológica al feto; la RMN, que permite una
evaluación de la relación feto pélvica con gran exacitud
sin necesidad de la exposición a radiaciones, pero con un alto costo; el
ultrasonido, que ha demostrado ser de poca utilidad en la evaluación de
la pelvis, pero de gran uti-lidad en la evaluación del feto; y el
índice feto-pélvico, que combina la evaluación
radiológica de la pelvis con la evaluación ecografica del
feto. Este tiene la ventaja de evaluar la relación de la pelvis
ósea con el feto en su totalidad y no exclusivamente con la cabeza
fetal. Es importante destacar que la interpretación de los hallazgos
nunca es determinante para la toma de decisiones diameter by an ultrasonic
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