EL AJUSTICIAMIENTO DE TRUJILLO
El autor nos dice que Trujillo iba hacia su hacienda en San Cristóbal, solo sin escolta,
ya que decía
que “El día que no pueda ir
a mi hacienda solo, prefiero estar
muerto” esa confianza fue la que la noche del 30 de Mayo le costó la vida en el tramo de la Autopista Santo
Domingo-San Cristóbal.
Nos cuenta el autor que en el momento que Zacarías
de la Cruz notó que
le seguían y que empezaron a disparar intentó hacer una maniobra para
regresar a la Capital, pero
Trujillo exclamo: - ¡Parate,
carajo que tenemos que pelear!,
Zacarías le decía
que eran demasiados y Trujillo insistió
esta vez diciendo que tomara
la ametralladora que iban a pelear, Zacarías obedeció y
frenó. En ese momento, el carro de sus asesinos pasó
como una rafaga rociando plomo, dio una
vuelta en redondo en medio de la autopista y se colocó en frente del automóvil que ocupaba Trujillo, se pararon, abrieron las puertas
y salieron, Trujillo hizo
lo mismo abrió la puerta y con su arma, un revolver de bolsillo calibre 38 les hizo frente.
Trujillo quien yacía
herido sangraba mucho, caminó tambaleante apoyado de su automóvil
hacia sus atacantes agotando todas su carga,
ellos le disparaban a quemarropa. Antonio de la Maza se le acercó para ultimarlo (ya tenia el brazo
derecho herido).
Yacían heridos El Teniente
García Guerrero, Pedro Livio
Cedeño yZacarías
de la Cruz el chofer de Trujillo que había sido derribado y yacía boca arriba. Antonio Imbert se le acercó y le disparó en la cabeza, tuvo tanta suerte que este
disparo le resbaló y
solo le hizo un rasguño.
Trujillo estaba muerto.
Un escopetazo le había causado una herida en el lado derecho del pecho. Una bala le había penetrado por la boca, destrozandole parte de la dentadura. Y había recibido un culatazo en la frente que le hundió
el craneo. En todo su cuerpo se le contaron 17 balazos de los cuales solo 5 eran mortales.
Los asesinos
de Trujillo cargaron su cuerpo
al baúl de uno de sus automóviles. Era parte
del plan y era necesario para que se cumpliera la otra parte del plan que la llevaría a cabo uno de los conspiradores
que no estaba presente, el General Pupo Roman.
Pedro Livio Cedeño
se quejaba a gritos de la Maza lo iba a ultimar,
pero sus compañeros no se lo permitieron
cometiendo así su peor error, lo llevaron a un hospital que estaba a pocas cuadras de una de las oficinas del SIM (Servicio de Inteligencia Militar), luego de unas horas Pedro Livio Cedeño confesó todo, se conocía el nombre de todos los conjurados
que serian atrapados mas tarde y ajusticiados por Ramfis Trujillo.
Todo había Terminado. Había finalizado una era. La Era
de Trujillo Varias horas después de la muerte de
Rafael Trujillo, su hijo Ramfis Trujillo, quiense encontraba en Paris, alquiló
un avión y regresó
a Santo Domingo en las primeras
horas del miércoles
31 de mayo, poniéndose de inmediato
al frente de la situación
y convirtiéndose en el hombre fuerte del país, aunque Joaquin Balaguer seguía formalmente al frente de la presidencia. El Servicio de Inteligencia Militar (SIM) y todos los servicios de seguridad del estado
realizaron amplias redadas en todos los sectores de la ciudad buscando a los ajusticiadores.
El 2 de junio de 1961 agentes
del SIM irrumpieron en la
casa del teniente Amado Garcia Guerrero donde lo asesinaron de varios disparos de ametralladoras. El 4 de junio de ese mismo
año fueron asesinados otros dos implicados, Juan Tomas Díaz y Antonio de la Maza.
El 10 de junio fue apresado y torturado el general
José René Roman Fernandez («Pupo»)
quien fungía como secretario de las Fuerzas Armadas de la dictadura, ya que se descubrió
que éste estaba vinculado al asesinato de Trujillo.
El 18 de noviembre fueron capturados Roberto Rafael Pastoriza
Neret, Pedro Livio Cedeño Herrera, Luis Salvador Estrella
Sadhala, Modesto Díaz
Quezada, Huascar Antonio Tejeda
Pimentel y Luis Manuel Caceres Michel («Tunti»). Fueron llevados a la «Hacienda María» en San Cristóbal, donde
fueron fusilados por órdenes de Ramfis Trujillo.
Poco después, por presiones internacionales Ramfis y su familia
abandonan el país.