ANALISIS DE OTELO
Una de las mas grandes obras dramaticas de la historia de la
literatura es Otelo de William Shakespeare, que duda cabe. La obra de
Shakespeare se presume fue escrita luego de Hamlet y
forma junto a la mencionada, Macbeth y el Rey Lear la selecta colección
de las mejores obras maestras del
bardo inglés. Una pieza teatral inmortal que ha sobrevivido al paso del tiempo y que nos plantea la
reflexión acerca de los celos humanos, la intriga y la desconfianza como fieras agazapadas que esperan el momento oportuno
para lanzarse sobre el corazón del
hombre y así darle un certero zarpazo.
El drama de Otelo se presta a muchas lecturas. Por ejemplo no pierde vigencia su crítica a la xenofobia
europea. Es un caso curioso el de la obra del
Moro iracundo. Shakespeare era conocido por su xenofobia frente a algunas
etnias como
la judía. Su clasico “El mercader de
Venecia” retrata de manera muy desfavorable a los judíos.
El inolvidable personaje de Shylock, usurero de la peor ralea, no duda en hacer
un trato por dinero que incluya como recompensa carne humana. Una
increíble situación que dice mucho de los prejuicios del
dramaturgo respecto a los judíos. Pese a la abierta declaración
racista de la obra, no se puede negar que la construcción de personajes
es impecable y resulta un verdadero placer leer la
exquisita trama de Shakespeare, ungenio sin parangón en la historia.
La historia del moro
al servicio del
Dux de Venecia no muestra una imagen tan negativa de la raza arabe. Al
contrario el moro es presentado por Shakespeare como un hombre leal y lleno de
virtudes que llega a servir al Dux de Venecia con lealtad y cuenta con el
aprecio de sus compañeros de armas y camaradas. Contrariamente a la
Europa actual, la Venecia que retrata Shakespeare es tolerante y valora a los
hombres por sus méritos y no por su color de piel. Incluso el drama del bardo inglés presenta
el amor genuino e ideal entre una noble veneciana (Desdémona) y el
gallardo moro (Otelo), un romance que incluso en la primera mitad del siglo XX hubiera sido fuertemente censurado en una
potencia progresista como
los Estados Unidos. Es esta visión amable del extranjero la
que llama la atención en la tragedia. Sin embargo, la posterior intriga
desarrollada por Yago es una habil maniobra de Shakespeare para decirnos
que el hombre europeo envidia la fortaleza
y virilidad del hombre africano o del hombre de color.
Todos los prejuicios existentes acerca de la mayor potencia sexual, fortaleza y bravura de los
hombres de color moreno
son puestos en escena por el dramaturgo isabelino sin que se mencione de manera
clara el prejuicio. En la obra teatral se percibe la atmósfera de
resentimiento de los hombre blancos europeosfrente a la mayor fortaleza y
virilidad de los hombres de color oscuro. La trama misma de Otelo puede ser
leída como
la historia de amor prohibida y condenada al fracaso entre una mujer blanca y
un hombre negro.
El racismo y el temor a la raza negra puede ser una segunda lectura del tormento del habil Yago. Las razones que lo
llevan a traicionar al compañero justo y leal se pueden atisbar en el
omnipresente prejuicio de los hombres de raza frente a los hombres negros. La leyenda universal de la mayor potencia sexual de
la raza negra cobra insoportable confirmación en el enamoramiento entre
Desdémona y Otelo. No es aventurado decir que la intriga de Yago se haya
alimentado de esa comprobación terrible para Yago. La lógica es
muy simple. Un hombre negro llega a mi casa y no solo
se lleva todos los honores sino que también se gana el corazón de
la mujer mas bella y sensata de todas. Una afrenta al orgullo de Yago y
quizas al orgullo de todos los hombres blancos.
La puesta en escena de la xenofobia permite una segunda lectura al
clasico drama de Shakespeare. Esto no significa que la
obra no sea universal en su contenido. Todos podemos sentir
identificación con el drama de los celos y la intriga. Igualmente la
traición del
amigo se puede identificar como un tema
común a cualquier realidad social y cultura, pero el tema de la
xenofobia en unasociedad culta y refinada como
la veneciana si sobresale como
un tema que guarda relación con la actualidad. En tiempos en los que los
africanos y otras minorías afincadas en Europa elevan su protesta por
los constantes ataques que sufren en una sociedad, supuestamente, tolerante y
liberal nos indica que quizas en lo mas profundo del
europeo común sigue subsistiendo el miedo al extranjero.
Un ejemplo interesante de este malestar que sigue
rondando las sociedades europeas se descubre en el deporte rey, el
fútbol. Los futbolistas extranjeros han sido
siempre la principal atracción de los principales clubes de Europa. En los últimos años la presencia de futbolistas
africanos ha ganado relevancia en los grandes campeonatos o ligas europeas.
Son aclamados por los hinchas y viven una vida de lujo gracias a sus indudables
dotes deportivas. En cierta forma son como el leal Moro
que sirve con eficacia al rico Dux europeo. Nadie niega el talento de ellos,
pero en lo mas profundo del subconsciente colectivo de los
aficionados europeos existe todavía ese odio irracional frente al hombre
de piel oscura africana.
Los recientes sucesos de ataques racistas a grandes futbolistas como
Eto’o nos dan cuenta que la figura se repite. Los
grandes profesionales africanos son aclamados por su gran desempeño,
pero secretamente se les odia y se aprovecha cualquieroportunidad para
demostrarlo. La clasica obra de Shakespeare es una lectura del
mismo contada siglos atras. Los celos, la intriga y el drama se repiten como
en un círculo. La genialidad del bardo sigue inmortal.
Es un tema abierto a debate, pero es una muestra
también de como
los grandes clasicos no envejecen y siguen aportando una mirada
crítica a la historia de la humanidad a lo largo de los años. Hoy
siguen surgiendo los Otelos y muchos somos sus Yago.
Para dar una mirada nueva y refrescante a ese clasico de la literatura podemos leerlo
gratuitamente en este link. Nos sorprendera como el drama
shakesperiano no pierde actualidad
APARTE
Afortunadamente, la vida de casi todos los escritores que han
significado algo en la larga historia de la literatura es bastante conocida,
con la ventaja que ello aporta a la hora de entender sus inquietudes e
interpretar sus obras. Es esta una afirmación cierta salvo en un caso.
Y es que no deja de resultar sorprendente que, cuando leemos una
biografía de un genio como William Shakespeare, casi todo sean
conjeturas. Cada parrafo de ellas se inicia con
un ‘probablemente’ o un ‘se cree’ porque muchos pasajes
de su vida constituyen, aún hoy, un misterio. Ello ha dado lugar a
teorías un tanto peregrinas como las que identifican su nombre con un
seudónimo, bien de uno, bien de varios escritores.
Lo que esindiscutible, sea quien fuere, es que William Shakespeare
(Stratford-on-Avon, 1564-1616) fue un extraordinario
dramaturgo. Tras una infancia económicamente precaria, se casó,
con tan sólo dieciocho años, con una mujer mayor, Anne Hathaway.
Trabajó como
actor al tiempo que escribía obras para su compañía,
alcanzando cierta notoriedad que le permitió vivir un retiro parcial en
sus últimos años.
En cualquier caso, nos quedan sus obras, comedias y
tragedias. Y, entre éstas últimas, se
encuentran algunas de las mas perfectas que se hayan escrito
jamas. Es muy difícil hallar creaciones
dramaticas de la talla de Macbeth, Otelo, Romeo y Julieta o Hamlet.
Se cree que Otelo fue estrenada hacia el año
1604 y constituye una tragedia humana, en el sentido de que su fuerza
tragica reside en la desgracia de un hombre normal. El protagonista, que
da título a la obra, es un noble moro al
servicio de la República de Venecia. Esta casado con
Desdémona, a la que ama profundamente. Uno de sus lugartenientes, Yago,
lo desprecia porque cree que le ha usurpado el ascenso
que merecía y, como
venganza, inocula el virus de los celos en Otelo, insinuando relaciones de su
esposa con el apuesto Cassio.
El protagonista comienza a sufrir una transformación respecto a
Desdémona, a la que empieza a tratar como a una ramera y a quién
termina asesinando, para suicidarse después.