Consultar ensayos de calidad


Ana María Shua



Ana María Shua nació en Buenos Aires en 1951. Su primer libro, El sol y yo, fue publicado cuando tenía dieciseis años. Por ese libro de poemas recibió dos premios. Desde entonces ha publicado diecisiete libros. Ha trabajado en publicidad, periodismo y como guionista de peliculas. Estudió en la Universidad de Buenos Aires, donde recibió su Maestría en Artes y Literatura. En 1976, con el advenimiento de la dictadura militar, su su familia se vio dividida por el exilio: su hermana y dos primos se vieron forzados a dejar el país, y Ana María decidió radicarse por algún tiempo en Francia con su esposo. En París trabajó para una revista españolapublicada por Cambio16. De vuelta en la Argentina, su primera novela, Soy Paciente, recibió el Primer premio del concurso internacional de narrativa de Editorial Losada. Un año más tarde publica Los días de pesca (historias cortas) y en 1984 la novela Los Amores de Laurita. Sus dos primeras novelas fueron llevadas al cine, en lo que marcó el comienzo de su trabajo como guionista de cine. Las mismas novelas fueron además traducidas al italiano y al alemán La sueñera (1984) es un libro difícil de clasificar: 'historias brevísimas', sea quizás la mejor definición. Este libro, que fue el menos vendido de sus libros, fue uno de los más elogiados por la crítica. En 1988 escribió una nueva colección de historias cortas (Viajando se conoce gente), y comenzó su carrera en la literatura infantil con los libros La batalla entre los elefantes y los cocodrilos y Expedición al Amazonas, a los que segurían otros como La fábrica del Terror (1990) y La puerta para salir del mundo (1992). Sus libros infantiles han sido reconocidos y premiados en Argentina, Estados Unidos, Venezuela y Alemania. En 1992 publicó un nuevo libro de historias brevísimas: Casa de Geishas. Entre 1993 y 1995 publicó varios libros relacionados a la cultura y a las tradiciones judías: Risas y emociones de la cocina judía, Cuentos judíos con fantasmas y demonios y El pueblo de los tontos. En 1993 recibió la beca Guggenheim para trabajar en su novela El libro de los recuerdos. Ana María Shua es casada y tiene tres hijas.


Soy paciente (1980), Ed. Losada.Los amores de Laurita (1984), Ed. Sudamericana.
El libro de los recuerdos (1994), Ed. Sudamericana.
Los días de pesca (1981) Ed. Corregidor.
La sueñera, (1984), Ed. Minotauro.
Viajando se conoce gente (1988), Ed. Sudamericana.
Casa de geishas (1992), Ed. Sudamericana.
La Que no Está
Doncella y Unicornio I
El sol y yo (1967
El marido argentino promedio (1991), Ed. Sudamericana.
Risas y emociones de la cocina judía (1993), Grupo Editorial Shalom.
El pueblo de los tontos (1995), Ed. Alfaguara.
La batalla de los elefantes y los cocodrilos (1988), Ed. Sudamericana.
Expedición al Amazonas (1988), Ed. Sudamericana.
La fábrica del terror (1990), Ed. Sudamericana.
La puerta para salir del mundo (1992), Ed. Sudamericana.
Cuentos judíos con fantasmas y demonios (1994), Grupo Editorial Shalom.
El tigre-gente (1995), Ed. Sudamericana

Pronto adquirió una gran pericia con el microscopio y practicamente se consagró a la investigación histológica. En 1872, movido quizas por necesidades económicas, ganó el concurso para ocupar una plaza de médico general en el Hospital de Beneficencia (Pio el Luogo degli lncurabili) de Abbiategrasso, cerca de Pavia y Milan. El ambiente con el que se encontró no favorecía en absoluto el desarrollo de la investigación. Se trataba de un hospital de beneficencia y para crónicos que apenas contaba con un presupuesto digno para el funcionamiento basico. Ante la adversidad, poco a poco, Golgi fue montando un laboratorio en la cocina de su casa adjunta al Hospital.
Un año mas tarde, en 1873, encontró una reacción nueva para demostrar las estructuras del estroma intersticial de la corteza cerebral. Se trataba de añadir nitrato de plata a las muestras de cerebro endurecido en bicromato potasico. La llamada 'reazione nera' o reacción cromoargéntica, iba a cambiar el panorama de la neuroanatomía y neurofisiología de finales del siglo XIX. Publicó este hallazgo en forma de nota corta en la Gazzetta Medica Italiana. Parece que llegó a este método pordistintas tentativas y quizas por indicaciones indirectas. El desarrollo de las técnicas histológicas a lo largo del siglo XIX fue importantísimo. Durante la segunda mitad se ensayaron de forma especial las impregnaciones con sales metalicas. Con algunos antecedentes, su utilización fue introducida por Daniel von Recklinghausen, que empleó el nitrato de plata a partir de 1860. Casi de inmediato Ranvier mejoró la técnica y la utilizó para el estudio del sistema nervioso. Siguió Golgi y también Santiago Ramón y Cajal, y sus correspondientes escuelas.
Los estudios de Golgi permitieron cambiar varias cosas. Por ejemplo, entonces se creía que las dendritas eran el elemento fundamental de la transmisión nerviosa y se fundían en una tupida red que se extendía por todo el sistema nervioso; en ella se originarían las fibras de la sustancia blanca. Golgi demostró que lo que se llamaba cilindroeje (axón) estaba ramificado y descartó que las dentritas se fundieran en una red. Quedaba así falsada la teoría reticularista de Gerlach, pero Golgi no la abandonó del todo. Es mas, con su método cromoargéntico, se sumó a ella de otra manera. Incluso cuando ya todos aceptaban las aportaciones de Cajal sobre la teoría neuronal, seguía defendiéndola.
En esos momentos otros hallazgos avalaban el reticularismo, como la idea de Marie-Jean P. Flourens quien afirmaba que las funciones de la corteza cerebral se producían por una actividad cortical global. Nacía, ahora con los axones, la teoría de una enorme rednerviosa difusa interaxonal por la que fluían los impulsos nerviosos. Por tanto, podríamos decir que se creía en un tejido nervioso que era una red continua, bien dendrítica (Gerlach), bien cilindroaxil (Golgi).


A las tesis reticularistas de Gerlach y Golgi se opusieron científicos como His y Forel. El primero sentó el fundamento histogenético de la teoría que defendía la independencia de las células nerviosas.


En 1874 Golgi publicó algunos t
Política de privacidad