Tipo De Empresas De Conquista
Unidad 2: Construcción de una identidad mestiza
Contenido: La conquista española
Fuente: El Ferrocarril, 8 de Junio de 1869. Néstor Meza Villalobos
EXTRACTO (Con fragmentos en español antiguo)
Cuando se tuvo conocimiento en la Corte de los Reyes Católicos de la
Bula Papal por la que se concedía y repartía a los reyes de
España y Portugal, las tierras recién descubiertas por
Colón, en 1492, se apresuraron los preparativos para que éste
realizara una segunda empresa a las Indias. Se invirtió en ella el
socorro anual de quince mil ducados que el Tesoro Real percibía de la
Hermandad, el dinero y valores secuestrados a los judíos que se
expulsaron en 1492, y lo que resultó de la liquidación de las
cuentas pendientes que los expulsos dejaron en España. El financiamiento se hizo conforme al principio de que debe
gastarse “tanto que no crezca en la costa porque el dinero no
falte”.
Para controlar los gastos y centralizar los rescates de oro se nombró un contador general de la empresa, dependiente de los
contadores mayores del
Reino de Castilla, y veinte lanzas de a caballo pedidas a la Hermandad, a
quienes se pagó del Tesoro de la institución seis meses
adelantados, tuvieron a su cargo la defensa militar. La empresa debía
realizar en las Indias
dos objetivos: Rescatar oro exclusivamente para los Reyes y establecer una
colonia agrícola en la isla Española. Con este
últimoobjeto se pidió a Fernando de Zafra veinte labriegos, los
cuales gozarían de un sueldo de treinta maravedíes diarios,
aparte del mantenimiento; se exigía en la Real Cédula que
ningún labriego fuese moro, ni a un aquel que supiere construir
acequias, exigencia esta última la mas importante de la orden.
La empresa, destinada al rescate y a la colonización, fue financiada y
controlada por los Reyes Católicos dentro del marco
de la administración y régimen tributario del naciente Estado español; se
realizaba en territorio de propiedad y dominio de los Reyes para satisfacer sus
intereses. Fue, pues, estrictamente una empresa de tipo
estatal.
El interés que despertó mas tarde la riqueza de las Indias
mostró los inconvenientes de esta política que limitaba y
constreñía el paso de la emigración y actividad
españolas a las Indias al débil e insuficiente caudal que
permitía la capacidad económica del Estado y la actividad de
Colón. Así, pues, sólo se mantuvo hasta el año
1495; el 9 de abril de este año los Reyes dictaron una Real
Cédula en la que abandonan la política colonizadora, se quitan
los privilegios conferidos a Colón y se abre el paso a las Indias a todo
el que quiera “rescatar en ellas y buscar oro e otros metales e otras
mercaderías” sic. En ella se resume lo
que va a ser, conforme a los intereses de la época, la política
de Indias.
Esta política señala el triunfo de una poderosa corriente
opositora que pedía unapolítica de “puerta abierta”,
esto es, una política que permitiera empresas privadas para buscar oro
en las Indias, por considerarla mas beneficiosa para el Estado que la
seguida hasta entonces. Colón había comprendido la importancia
que tenía este pensamiento y por lo mismo se
esforzaba en desvirtuarlo enviando a los Reyes la mayor cantidad de oro que le
era posible. A pesar de ello, no pudo impedir la promulgación de la Real
Cédula suscitada, cuyos efectos tardaron en manifestarse hasta el
año 1498, debido a que Colón pudo detener la partida de las
empresas que por ella se autorizaban, basandose en los privilegios que
tenían por la capitulación del año 1492.
El descubrimiento de la costa de Paria y las noticias que sobre sus riquezas en
perlas y oro pasaron a España, en vez de
afirmar el privilegio de Colón, produjeron su caída definitiva y
la Real Cédula entró en plena vigencia. Desde entonces el reconocimiento
de la energía y riqueza individuales fue absoluto, ningún campo
le fue vedado: la población, los rescates, las conquistas, toda la
tierra indígena se entregó a su ambición. El pasajero a
las Indias vio allí un medio libre de trabas; no existen clases sociales
difíciles de escalar, y que por su larga y respetada tradición le
impidan satisfacer su afan de ascenso social; el vínculo con el
estamento quedó deshecho al desatracar en la costa española y el
señorío de las Indias “levantó los corazones de las
viles yserviles personas a pensar y a presumir de sí mismas, que
habiendo nacido para servir y trabajar corporalmente y ser mandados, en
poniéndole pie en esta tierra no asentaban con nadie, y ya que
querían asentar, no para bajar el lomo en servicio alguno corporal, sino
para estar y andar enhiestos y con una varilla en la mano y ser verdugo de
los…indios y mandar”.
El individualismo renacentista que en Europa dominó en alguna medida el
Estado, se manifestó libremente en las Indias, donde era nuevo y nadie
inquiría sobre el pasado, “los hijosdalgos” y los plebeyos
comenzaban del mismo modo su carrera por la honra: sabemos que Pedro de
Alvarado ocultó su manto de caballero de Santiago mientras estuvo en la
isla Española, y de eso se le acusa en una probanza. No existen otros
méritos que las obras y con ellas todos los
conquistadores aspiran a ser hidalgos
y a obtener un escudo de armas para dejar “perpetua memoria”. Una fe orgullosa en las fuerzas del
hombre se manifiesta en la actividad española de las Indias que tuvo
su exacta expresión en la siguiente frase de Lope de Aguirre:
“Dios hizo el cielo para el que lo mereciese y la tierra para quien
mas pudiese.
La relación entre el Estado propietario y soberano y el individuo
avido de riquezas y de renombre, se efectuó mediante la
capitulación; éste es un documento público de naturaleza
contractual en el que, por una parte, el Estado autoriza la empresa y estipula
suparticipación de beneficios, y por otra, el empresario que se
compromete a realizar a su costo la empresa de rescate o conquista aceptando la
repartición de beneficios establecida por el Estado. Si la empresa que
se autorizaba tiene por objeto la conquista de algún territorio, y por
ello se otorgan títulos y salarios, éstos se pagaran de los
derechos que deben percibir los Reyes una vez conquistado el territorio.
Obedeciendo a diversos intereses, se constituyen, en España y en las Indias, empresas que van a realizar su objetivo
fuera del
territorio sometido a Conquista.
Aquí intentaremos una clasificación de tipos de empresas
según sus objetivos:
a) Empresas de Rescate;
b) Empresas de Conquista;
c) Empresas de Indios o Cabalgadas.
a) Empresa de rescate. Uno de los incentivos mas poderosos de la
actividad española en las Indias fue
el afan de oro. De este hecho dan fe la mayoría de las
crónicas y con extraordinaria precisión, ciertos frailes
Gerónimos que en 1512 escribieron una carta al Rey diciendo: “De
quinientos a mil hombres que van, no conocen estando alla
sujeción a Dios cuando mas a Vuestra Majestad, han gastado
cuanto tenían por ir a venir cargados de oro”. El
español no aspira a crear la riqueza indirectamente en la
creación de valores económicos; la desea de una sola vez, en
abundancia y sentir el placer de su adquisición. De la naturaleza
afectiva de esta ambición de oro nos da el padre Aguado unainteresante
observación, “Gascuña y su gente enterraron estos
setenta mil pesos al pie de una ceiba, arbol muy grande y
señalado en aquellas comarcas y casi dejando sus corazones allí soterrados
con aquel metal, comenzaron a caminar por aquellas montañas”.
Esta sed insaciable de oro dio origen a las empresas
que hemos llamado de rescate. El término rescatar, es, según el
Padre Las Casas, “vocablo que nuestros españoles por trocar una
cosa por otra han usado”. Para realizarlo,
la empresa navega por las proximidades de la costa y entra en
relación con los naturales vara obtener oro Y objetos preciosos
dandoles, en cambio, cuentas de vidrio y bonetes de colores; una vez
terminado el material de rescate, retorna al punto de partida.
Un inventario de los gastos de la empresa de Gil Gonzalez Davila
nos da una muestra de los objetos que se usan para los rescates y el monto de
ellos:
“7 paños
15 nienes
I palmilla verdegay
I palmilla prensada
I veinticuatrén colorado
2 veintiseisenes, I amarillo y I colorado
4 frisas de colores
Total: 389,279 maravedíes
I pieza de seda con que hizo una ropa de terciopelo turquesa verde, I ropa de
damasco grana
12 marlotas de cotín de Brujas
Total, 31,122 maravedíes
7 masos de avalor 2,380 maravedíes
3 fardos de angeo 18,198
y otras cosas para rescate costaron 78,717 maravedíes.
Las ganancias que se obtienen en estas empresas derivan de la
diversa valoraciónde los objetos entre indígenas y
españoles. Los indígenas, que gustan de los colores
brillantes, y, en general, de todo lo que contribuye al adorno de su persona,
valorizan en este sentido; en cambio, el
español lo hace en un sentido, estrictamente económico. El oro
es, para él, la riqueza y sólo en este
sentido lo avalúa. La reducción de las piezas de oro a barras
apreciables monetariamente, sin considerar su valor artístico, es la
expresión objetiva de esta valoración económica. Sin embargo, el rescate es en su fondo subjetivo, en ambos
tratantes, equivalentes. Fray Bartolomé, el inexorable impugnador
de la actividad de los españoles, dice, refiriéndose a la empresa
de Cristóbal Guerra, que “los indios, quedaron muy contentos
pensando que iban engañados los cristianos que adquirieron entonces en
sus rescates mas de ciento cincuenta marcos de
perlas”.
Por la naturaleza de su objetivo, la empresa de rescate hace grandes recorridos
y los mas dilatados reconocimientos de costas; por esto, nuestros
historiadores siguiendo la tradición historiografica de los
cronistas, les han denominado “viajes de
descubrimiento”.
Las empresas de rescate comienzan desde España el
año 1499.
Gonzalo Fernandez de Oviedo dice que por su ejemplo los vecinos del Darién compraron navíos o los hicieron de
nuevo para rescatar en las costas, de cuyos beneficios entraron en aquella
ciudad mas de cincuenta mil pesos oro.
Aunqueson entre sí idénticas las empresas de rescate de Indias y las de Sevilla, estas últimas
muestran, en la explotación, mas dependencia del mercado de productos.
Los cargamentos de brasil dan una muestra de ello.
b) Empresa de Indios o “Cabalgada”. El
afan de oro del español no sólo dio origen a una
economía inestable, basada en la aventura heroica de la empresa de
rescate, sino que fue el principio de la economía de la Conquista,
esencialmente minera.
La población indígena que la encomienda sometió a un régimen de prestaciones de servicios personales,
suministraba la mano de obra para esta explotación. Debido a la ausencia
de escrúpulos con que se les trataba y a las epidemias que produjeron
las nuevas formas de vida que instituyó la encomienda, la
población indígena disminuyó rapidamente en todas
partes del
continente. Esta disminución dio origen a un
intenso trafico de indios para suministrar trabajadores a los mineros.
Aquí nos dedicaremos a estudiar este
trafico destinado a suministrar indios a los mineros de la isla
Española y del Darién.
La esclavitud de los indios tuvo dos fundamentos jurídicos: la guerra
que permitía hacerlos esclavos cuando se les sorprendía con las
armas en la mano y las Reales Cédulas de1513 Y 1525 que autorizaron,
para esclavizar a los indios de las islas de Curazao, Oruba y Bonaire y las
costas de Venezuela por su naturaleza reacia al Cristianismo. Las empresas que
realizaban estetrafico tenían que acomodar sus propósitos a estos dos principios. Según Fray Bartolomé,
antes de 1511, los pobladores de la isla Española traían indios
de las islas de los Lucayos, Jamaica y San Juan. Cuando la
reserva indígena disminuyó en las islas mencionadas, algunos de
estos empresarios se dirigieron hacia el Norte en busca de indios, llegando a
vislumbrar las costas de La Florida.
Posteriormente, los traficantes se orientaron hacia las regiones de Venezuela.
La caza de indios fue tan abundante en estas costas después del
año 1525, que según Pedro de Aguado había “en la
isla Española muchos vecinos que hacían armadas y pasaban a las
demas islas y a las costas de Tierra Firme a hacer cabalgadas y entradas
en las poblazones de los indios y prender los que podían y hacerlos
esclavos, que éste era su principal trato y contrato”.
Según el mismo autor, este trafico
produjo la despoblación del territorio
en que después se fundó la ciudad de Coro, cuyo origen se debe a este
trafico. Estas empresas contribuyeron notablemente al
reconocimiento de las costas de Santa Marta y Venezuela.
Aparte de las abundantes alusiones de los cronistas citados, se dedicaron a este comercio, Rodrigo de Bastidas yJuan de Ampirés.
La explotación de minas de oro en el Darién dio también origen a un intenso comercio de indios. Según Pascual
de Andagoya, “de las provincias de Acla y Cueva se llevaron los
mas indios que fueron al Darién, porquecomo eran las mas
cercanas y bien pobladas no era ido un capitan
cuando venía otro”. Un fragmento del libro de Tesorería de la ciudad de Santa
María del Darién, publicado por don José Toribio Medina en
su obra “El descubrimiento del
Océano Pacífico”, nos ha permitido ratificar, aunque en
forma insuficiente, la observación de Pascual de Andagoya. Este fragmento nos ha permitido reconstituir el movimiento de
cabalgadas entre los años 1514 y 1518.
Este tipo de empresa presenta las formas de la “razzia”, o sea, una
entrada violenta de los españoles en los territorios indígenas
saqueando sus habitaciones y aprisionando los indios.
c) Empresas de Conquistas Frente a la magnitud
territorial del
continente, el español siente la tierra vinculada a su destino. Sobre ella, en su extensión y su riqueza, como sobre un pedestal, destacara su
nombre. Por todas partes en el continente indígena, las empresas de
rescate o de indios tienen un caracter
precursor. Ningún territorio que por ellas se
descubra quedara fuera del
radio de la conquista. Ellas han preparado el acto
definitivo del
español: la Empresa Conquistadora. Pedro de Aguado, refiriéndose
a la conquista de Santa Marta, dice que
“Rodrigo de Bastidas tomó entera noticia della
por su particular rescate, de donde, como
se ha dicho, vino a tomalle afición y a procurar poblalla y
gobernalle”. Esta observación puede hacerse
extensiva a toda la conquista de las Indias.La empresa conquistadora es la
expresión de intereses diversos en el jefe y en el soldado. En el
primero es el afan de honra y el impulso de dominio, y el impulso
económico de tierras y de indios para vivir “conforme a su calidad
y condición”, en el segundos. No se puede decir que el predominio
de un impulso implique la ausencia absoluta del otro en los miembros, jefe,
soldados, de la empresa, sino que por su diferencia de intensidad mueven a la
misma acción diversamente.
Los jefes de empresas conquistadoras se reclutan entre antiguos soldados de
empresas anteriores que, una vez ricos encomenderos, deciden realizar, por
sí solos, una nueva empresa con el objeto de adquirir nombradía.
En ellos se presenta en grado culminante el ethos de las Indias, el
individualismo y el afan de mayor valía y ascenso social
Pedro de Aguado dice, refiriéndose al conquistador de la isla Trinidad:
“estando Antonio Cedeño en la isla de San Joan de Puerto Rico por
contador de la Hacienda Real, viviendo prósperamente con lo que Dios
allí le había dado, no contentandose con su mediano estado
y pasadía y queriendo emprender cosas arduas para dejar alguna
particular memoria intentó que se le diese la isla de Trinidad por
gobernación y adelantamiento para poblarla y pacificarla. Con
analoga fineza de observación, muestra el mismo cronista el
propósito de Diego de Ordaz de quien dice que fue a la conquista de
Nueva España “con propósito deemprender alguna cosa ardua
con que esclarecer mas su nombre y dejar de sí memoria como los
demas pretenden “ ” De la Nueva España
llevó algunas riquezas, don Diego de Ordaz a España con las
cuales y con la codicia que los españoles suelen tener de subir y valer
mas juntó mil y dos cientos hombres y con ellos se partió
de España”.
Don Diego de Almagro, en una probanza hecha en Panama, dice,
refiriéndose al descubrimiento del Perú:
“Nuestro propósito fue y es servir a S. M. en el dicho
descubrimiento porque obiese noticia de nosotros, e nos honrase e hiciese
mercedes e no respeto de otros provechos, pues teníamos los dichos
quince mil pesos de que podíamos vivir”.
Motivo poderoso de los jefes de empresa conquistadora es el impulso de dominio;
de Valdivia dicen ciertos conjurados que era “soldado cudicioso de mando
y que por mandar había aborrecido del Perú donde el
Marqués le daba de comer”.Bernal Díaz comenta
irónicamente cuando Cortés se hace de rogar ante las insistencias
de sus soldados para que acepte la autoridad que ellos le confieren; en las
crónicas contemporaneas se dice frecuentemente que “en el
mandar no se quiere igual”.
Se emprende una conquista para hacerse un nombre,
lograr fama y riqueza a través de ella y obtener un título de
gobernador. Desde este punto se aprecia la riqueza de
la tierra, pues los soldados de la Conquista se desplazan hacia las tierras
ricas. Góngora de Marmolejo noscuenta cómo habiéndole
traído a Valdivia una batea llena de oro, en viéndola, no dijo
mas que estas palabras: “Desde agora comienzo a ser señor,
sin dar gracias al Criador de todo aquello; que cierto no es creedero que un
hombre de tan buen entendimiento dejase de dar gracias a Dios, pues de un
escudero había levantado tanto que era señor”.
La fama de los territorios auríferos corre por las Indias y pasa España y junto con ella el nombre de su conquistador; es por esto que el
español alejandose del
círculo de Las Antillas, perseguira, incansable, al continente
hasta agotar la tierra bajo sus pies.
Es indiscutible que el Capitan de Conquista siente el afan de
riquezas como
el Conquistador en general; pero se diferencia de aquél en que se
desprende de ellas, sufre privaciones con el objeto de mantener territorio y
títulos, pues éste es invalido sin aquél. Valdivia usa de toda clase de
atractivos e impone privaciones a los pobladores de su colonia para traer
nuevos hombres del Perú; Pizarro impone la pena de muerte a aquellos que
deseen volver a Panama estando ya de camino al Perú. El
Conquistador de Chile
dice que por poblar este Reino vendería hasta
su mujer, y en sus peticiones al Rey para que le confirme su título de
Gobernador, se nota un patetismo y calor de extraordinaria sinceridad.
En estas empresas satisfacen los soldados su ambición
de oro, de tierras y de indios. A todos ellas
se aluden toda provisión paraempresas de conquista, pues se autoriza al
jefe para repartir tierra e indios en nombre de Su Majestad, es decir, hacer
repartimientos inamovibles. Valdivia pregonó en el Cuzco para conquistar
y hacer repartimientos de indios, y aseguró a los que antes
habían venido con Almagro que les daría de comer,
expresión que en esa época es idéntica a repartirles
indios. Diego de Velasquez, para reclutar la gente que
pensaba enviar bajo el mando de Cortés a la costa de México,
pregonó que ésta tenía por objeto poblar, cuando el
verdadero objeto era el rescate. Debido a esto, se produjo el conflicto
entre los encomenderos de Cuba que fueron a la empresa de rescate y los
soldados que se enrolaron con el fin de obtener, tierras e indios en los nuevos
territorios, de lo que se valió Cortés para trasformarla en una
empresa de conquista El libro de Bernal Díaz, en su primera parte, es la
historia de esta trasformación y de sus vicisitudes.
FORMAS Y FINANZAS DE LAS EMPRESAS DE INDIAS
La empresa o conjunto organico en que se expresa la voluntad del
empresario, esta determinada en sus formas por el siguiente hecho
jurídico: en virtud de la Bula de Demarcación, el territorio de
las Indias es propiedad y dominio político del Estado español y
nadie, sin especial autorización de los Reyes, puede realizar en ellos
ninguna clase de objetivos. A este hecho se deben, en
gran parte, las formas político-militares que presenta la empresa
deIndias.
La capitulación establece la jefatura de la empresa que los Reyes autorizan
en calidad de reconocimientos de servicios, y crea una autoridad
fundamentalmente política en la que el Estado español delega
soberanía y funciones de gobierno, como la de Gobernador, justicia o
Alguacil Mayor. Por su origen político, esta
jefatura es inamovible, indiscutible y su desconocimiento implica un acto de
rebelión.
Las provisiones que los gobernadores dan a sus capitanes
tienen por objeto mantener las empresas bajo su jurisdicción mediante
una jefatura idéntica a la anterior, pero que depende de ellos
directamente. Diego de Velasquez, gobernador de la isla de Cuba,
confirió a Grijalba y a Cortés título de capitanes para
las empresas de rescate a la costa de México que éstos
dirigieron.
El jefe de empresa reúne en sí la directiva de un
negocio que en parte es privado y las funciones políticas que permiten a
los Reyes mantener bajo su jurisdicción el territorio en que de
cualquier modo actúa el español.
Las formas militares: organización centralizada y jerarquica,
basada en una rígida disciplina que caracteriza a la empresa de Indias y
el título de Capitan General que ostenta su jefe, se deben al
medio guerrero en que debe realizar sus operaciones.
El comando único y la organización centralizada de la empresa, no
corresponden, en su constitución económica, a la unidad en el
financiamiento del instrumental necesario parala realización de su
objeto, ni riesgo exclusivo del empresario.
Toda empresa comienza con la creación de su jefatura; su
constitución económica y organica es un
proceso posterior que comienza con el pregón de las capitulaciones o
provisiones y de su jefatura en calles y plazas de las ciudades
españolas o indianas
para reclutar gente. Vasquez Coronado “tocó caja y atambor
por Su Majestad con bandera tendida para recoger gente, para hacer la dicha
conquista y entrada”. En términos parecidos a
éstos, cuenta Bernal Díaz el pregón de las provisiones de
Cortés; Valdivia
hizo leer las suyas en el Cuzco y Pedro de Urzúa las pregonó por
todo el Perú. El pregón de las provisiones
tiene por objeto atraer a los emigrantes recién llegados de la
Península y a las masas de soldados flotantes que son los residuos de
otras empresas en las que sólo ganaron experiencia.
Esta masa de soldados flotantes que es un fenómeno típico de las
grandes ciudades de la Conquista: Santo Domingo,
Santiago de Cuba, Panama, Cuzco, se debe a la
combinación de tres causas:
1º. La pronta repartición de la tierra y de los indios a un reducido número de conquistadores, lo que
dejó siempre un gran número de fallidos encomenderos-terratenientes.
2º. La economía minera basada
exclusivamente en la explotación aurífera o argentífera
que se desarrolló en las Indias inmediatamente
después de la Conquista.
3º. Las prestaciones de
servicios impuestas alos indígenas por los conquistadores.
Para esta masa flotante, la formación de una empresa significa
la posibilidad de realizar su hambre de tierra, oro y honra. De los
soldados que salen del Perú, dice Pedro de la
Gasca: “cuando se proveen las semejantes conquistas y gobernaciones, los
que van alla pretenden, mas que por el servicio que en ellas
hacen a Su Majestad, que se les encomiende en su nombre indios de
repartimientos”. Bernal Díaz dice, refiriéndose al primero
de sus viajes a la costa de México: “ acordamos de nos juntar
ciento y diez compañeros de los que habíamos venido de Tierra
Firme y de los que en la isla de Cuba no tenían indios y concertamos con
un hidalgo que se decía Francisco Hernandez de Córdoba
para que fuese nuestro capitan, porque era suficiente para ello, para ir
a nuestra aventura a descubrir tierras nuevas para en ellas emplear nuestras
personas”. La empresa de Pedro de Valdivia que salió del Cuzco
sólo con ocho personas, se incrementó, en Tarapaca y
Atacama, con los soldados flotantes que dejaron las fracasadas empresas de
Diego de Candia y Pero Anzures.
Los soldados se incorporan a la empresa “a su costa y
misión” o con armas suministradas por el jefe, las que ellos
pagaran con la parte que les corresponda en el botín; viven a su
costa mientras la empresa realiza sus operaciones, atraídos
exclusivamente por los beneficios finales y corren el mismo riesgo que su jefe.
Juan Izquierdo,testigo de una probanza,
refiriéndose a la conquista de Nicaragua dice: “En aquel
tiempo a nadie no se daba ayuda de costas ni salario, sino que cada uno
servía a su costa y misión”.
Cortés, al emprender su viaje a la costa de
México escribió a todos sus amigos invitandoles a que
participaran en su empresa y según Bernal Díaz, “unos
vendían sus haciendas para buscar armas y caballos; otros hacían
cazabe y se apercibían de lo que habían menester, lo mejor que
podían”. Ademas de estas alusiones generales,
tenemos el caso de Gonzalo Mejía, soldado de la conquista del
Perú quien, para realizar una expedición a Quito, contrajo con
Pascual de Andagoya una deuda por cuatrocientos treinta y dos pesos oro para
equiparse. Sabemos que algunos miembros de la empresa que venía a
conquistar el Río de la Plata, pagaron a Diego García su
transporte, porque los traía en una carabela de su propiedad.
La relación económica y organica entre la empresa y sus
miembros es una doble participación: estos incorporan sus armas y otros
bienes y participan del riesgo. La
participación presenta una abundante variedad: el simple peón que
se incorpora con sus armas, lanza, ballesta o arcabuz; el que lleva armas y
caballos; el que se incorpora con soldados armados a su costa, como Francisco
de Aguirre en la empresa de Valdivia a la Nueva Toledo; el que incorpora partes
vitales a la empresa, como Diego de Ordaz que puso todos los víveres
einstrumentos en un barco de la empresa de Cortés, del mismo modo que
Joan Cedeño, Diego García que vino con una carabela de su
propiedad en la empresa de don Pedro de Mendoza al Río de la Plata.
La constitución de la empresa de Juan de Grijalba muestra un caso típico de participación y aún,
se podría decir, un caso típico de empresa de Indias. Juan de
Grijalba era sólo representante de Diego de Velasquez, quien era
dueño de los cinco navíos con que contaba la empresa; en el abastecimiento
de ellos, víveres e instrumentos, participaron como socios, Alonso
Davila, Francisco de Montejo y Pedro de Alvarado.
La relación que hace Bernal Díaz de los caballos que fueron en la
empresa de Cortés y de sus propietarios, nos da una muestra de la
constitución de una empresa en las Indias.
Capitan Cortés, un caballo zaino que
luego se le murió en San Juan de Ulúa.
Pedro de Alvarado y Hernan López de
Avila, una yegua alazana, muy buena, de juego y de carrera.
Alonso Hernandez Puerto Carrero, una yegua rucia, de buena carrera que
le compró Hernan Cortés por las lazadas de oro.
Joan Velasquez de León, otra yegua rucia muy poderosa que
llamabamos la rabona, muy revuelta y de buena carrera.
Cristóbal de Olí, un caballo
castaño oscuro, harto bueno.
Francisco de Montejo y Alonso Davila, un
caballo alazan tostado, no fue para cosa de guerra.
Francisco de Morla, un caballo castaño oscuro,
muy corredor y revuelto.
Joan deEscalante, un caballo castaño
claro tresalbo; no fue bueno.
Diego de Ordaz, una yegua rucia machorra, pasadera aunque
corría poco.
Gonzalo Domínguez, un caballo castaño
oscuro muy bueno y gran corredor.
Pedro Gonzalez de Trujillo un buen caballo
castaño, perfecto castaño que corría muy bien.
Moron, un caballo obero, labrado de las manos y era bien revuelto.
Baena, un caballo obero, algo sobre morcillo.
Lares, un caballo muy bueno de color castaño
algo claro, e buen corredor.
Ortiz y un Bartolomé García, un buen
caballo oscuro.
Joan Cedeño, una yegua castaña
La jerarquía militar en la empresa es correspondiente con el grado de
participación económica. Los socios de
Velasquez, en la empresa de Juan de Grijalba, obtuvieron, por su
participación en el abastecimiento de los navíos, títulos
de capitan de la gente que fue en sus respectivos buques. En la
empresa de Pedro de Urzúa al Dorado, algunos soldados se obligaron a
socorrerlo con cuatro mil pesos en cambio del título
de capitan en la empresa. Diego García que vino en la empresa de
Pedro de Mendoza en calidad de piloto mayor debía este
título no sólo al conocimiento que tenía de las rutas y de
las costas, sino también a la carabela de su propiedad.
Uno de los aspectos espirituales mas importantes en las empresas de las Indias
es la relación entre el jefe y el soldado. En estas empresas que tienen como
fundamento medular de su estructurala esperanza colectiva en el futuro
beneficio, el origen estatal de la jefatura entra por muy poco en su verdadera
consagración; es decir, en el doble acto decisivo de toda autoridad, de
imposición y acatamiento. Los fundamentos verdaderos de la autoridad son
de naturaleza interior, basadas, tal vez, en la simpatía y son sus
cualidades inherentes, valor y generosidad, elocuencia, fuerza persuasiva y
decisión, La creación de autoridad suele, a menudo, ser tarea
difícil, aunque sus consecuencias son siempre trascendentes. Diego de
Velasquez, titubeó largamente antes de elegir el jefe de su
tercera empresa al Golfo de México; Grijalba no le satisfacía por
su indecisión e incapacidad; Vasco Porcallo por excesiva tiranía,
hasta que Hernan Cortés le fue impuesto por sus amigos.
Bernal Díaz dice, lacónicamente, que para la
empresa de rescate que pretendían efectuar por las costas de
México, eligieron por capitan a Francisco Hernandez de
Córdoba, “porque era suficiente para ello.
Las numerosas conspiraciones de la época, y el hecho de que los
prohombres de la Conquista, aquellos que mas autoridad tuvieron sobre
sus soldados, la constituyeron por encima de las autoridades legales de las
Indias, como Velasquez y Cortés, o hayan sido rebeldes
permanentes como Martínez de Irala y Lope de Aguirre, son prueba
irrecusable de la naturaleza afectiva de la autoridad en las empresas de las
Indias.
Los beneficios de la empresa sereparten en correspondencia con el grado de
participación de cada uno; así en el Perú “cupo a
los de a caballo ocho mil y ochocientos y ochenta pesos oro y trescientos
marcos de plata, y a los peones cuatro mil y cuatrocientos cuarenta pesos de
oro y algunos mas y a otros menos, según pareció al
Gobernador que cada uno merecía, según la calidad de las personas
y los trabajos que habían pasado”, y en el Nuevo Reino de Granada,
en la empresa de Jiménez de Quezada, a “cada peón quinientos
y veinte pesos y al jinete, o hombre de a caballo, doblado que llamaron dos
partes; Y a los capitanes doblados que los jinetes”.
La empresa de Indias,
a cualquier tipo que pertenezca, es una sociedad tacitamente contractual
entre un gran número de miembros a quienes se
reparte beneficios proporcionalmente a su grado de participación.
La descripción de las empresas de Indias que hasta aquí hemos
hecho, nos permiten asegurar que la actividad española realizó
sus objetivos en empresas privadas en las que sólo la presencia de un veedor, destinado a controlar los rescates y a percibir
el real quinto indica la sujeción al Estado. Bernal Díaz dice que
después de organizada la empresa y a punto de partir, buscaron un sacerdote y un veedor para que si Dios los llevara a
tierras ricas, recogiera el real quinto.
El financiamiento de la empresa de Indias esta entregado exclusivamente
al jefe de ella; así, Pedro de Valdivia dice que “para haceresta
jornada, el Marqués Pizarro no me favoreció ni con un tan solo
peso de la caja de Su Majestad y como a mi costa y hice la gente e gastos que
convino para la jornada, e adeudé por lo poco que hallé prestado,
de mas de lo cual presente yo tenía, en mas de setenta mil
castellanos”. Esto no significa que el jefe de empresa la financie completamente;
considerado como sujeto económico, es sólo un participante y
aglutinador de elementos cualitativamente capaces que, debido a la naturaleza
política de la jefatura, se disponen a su alrededor. Su grado de
participación esta sujeto a una gran variedad, pero en general,
recaen sobre él los aportes relativos a los elementos vitales de la
empresa: víveres, artillería, municiones, etc. Aparte de las
observaciones dispersas en las numerosas crónicas, no hemos encontrado
sobre este particular otro documento que un poder otorgado por Diego de Rojas a
Francisco de Cardenas para que le compre caballos, yeguas, negros,
armas, herrajes y “otros cualquier cosas que sean necesarias para guerra
para que yo pueda efectuar esta jornada que al presente hago en nombre de su
majestad adelante de las provincias de Chile hasta en cantidad de seys mil
pesos de buen oro de perfecta ley de valor cada uno de cuatrocientos y
cincuenta maravedíes. . .”.
El financiamiento de esta parte fundamental se hace mediante dos
procedimientos: por el régimen de participación que hemos
estudiado antes y quellamaremos régimen de participación personal
directa, o por el régimen de participación personal indirecta.
En la empresa de Diego de Rojas para conquistar el Tucuman, el
régimen de participación personal directa presenta una variedad
en el sentido de que los participantes hacen aportes en dinero sin dar lugar
por esto a una forma diferente en la constitución de las empresas. Esta se constituyó por la participación de Diego de
Rojas, quien poseía las provisiones para conquistar.
Nicolas de Heredia y Felipe Gutiérrez; cada uno aportó
treinta mil pesos, con lo cual adquirían el derecho a sucederse en la
jefatura instituida por Vaca de Castro en la persona de Diego de Rojas, uno
después de otro, en caso de muerte, en el orden indicado.
La participación personal indirecta en las empresas se hace por la
compañía. Este procedimiento permite ampliar la base de
financiamiento de las empresas con la participación de Gobernadores,
Oficiales Reales y comerciantes. Los miembros de la compañía que
participan indirectamente en la empresa aportan su dinero a la pérdida o
a la ganancia, en la misma forma que en la “comenda” con el objeto
de participar en el producto económico de ella y el empresario la
autorización, su persona, el riesgo, tiempo y trabajo que demande la
realización de su objetivo. En1a compañía, los aportes del empresario y del socio, se
avalúan igualmente y perciben beneficios equivalentes. Como las empresas deIndias tienen una formación colectiva, los
beneficios que se estipulan en la compañía hecha entre el jefe de
empresa y cualquier otro individuo sólo se refieren a los beneficios que
pertenezcan al jefe una vez hecha la repartición. La
compañía no produce alteraciones en la jefatura de la empresa, ni los socios participan de los riesgos y trabajos de ella,
sin embargo, los vincula a su riesgo.
El contrato de compañía, aparte de sus variantes
circunstanciales, presenta la siguiente forma:
Sepan cuantos esta carta de compañía vieren, como yo Fernando de
Luque, clérigo presbítero, vicario de la Santa Iglesia de
Panama, de la una parte y de la otra el capitan Francisco
Pizarro, y Diego de Almagro vecinos que somos de esta ciudad de Panama,
decimos: que somos concertados y convenidos de hacer y formar compañía,
la cual sea firme y valedera para siempre jamas en esta manera: Que por
cuanto nos los dichos capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro,
tenemos licencia del Señor gobernador Pedro Arias de Avila para
descubrir y conquistar las tierras y provincias de los reinos llamados del
Perú y porque para hacer la dicha conquista y jornada y navíos
y gentes y bastimentos y otras cosas que son necesarias, no lo podemos hacer
por no tener dinero y posibilidad tanta cuanta es menester; y vos el Dicho don
Fernando de Luque nos lo dais porque esta compañía la hagamos por
iguales partes, somos contentos y convencidos de que todostres hermanablemente,
sin que hayan de haber ventaja ninguna mas el uno que el otro, ni el
otro que el otro, de todo lo que se descubriere, ganare y conquistare, y
poblare en los dichos reinos del Perú.
Y por cuanto vos el dicho D. Fernando de Luque nos disteis y ponéis de
puesto por vuestra parte en esta dicha compañía para gastos de la
armada y gente que se hace para la dicha jornada y conquista del dicho reino del
Perú, veinte mil pesos en, barras de oro y nos los dichos,
capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro ponemos de nuestra parte en
esta dicha compañía la merced que tenemos del dicho señor
gobernador y que la dicha conquista y reino que descubriéremos de la
tierra del dicho Perú, que en nombre de Su Majestad nos ha hecho y las
demas mercedes que nos hiciere y acrecentare Su Majestad y los de su
consejo de las Indias de aquí en adelante para que de todo gocéis
y hayais vuestra tercera parte y mas ponemos en esta dicha
compañía nuestras personas y el haber de hacer la dicha conquista
y descubrimiento, con asistir con ellas en la guerra todo el tiempo que se
tardare en conquistar y ganar y poblar el dicho reino del Perú, sin que
por ello hayamos de llevar ninguna ventaja de lo que vos el dicho Fernando de
Luque llevaredes, sin defraudaros en cosa alguna de ellos, la tercera
parte, porque desde ahora en lo que Dios Nuestro Señor nos diere decimos
y confesamos que es vuestro y de vuestros herederos ysucesores, de quien en
esta compañía sucediere y lo hubiere de haber, y en vuestro
nombre se lo daremos y le daremos cuenta de todo ello a vos y a vuestros
sucesores y así de cualquier dictado y estado de
señorío perpetuo, o por tiempo señalado que Su Majestad
nos hiciera merced en el dicho reino del Perú. . ., sea nuestro el
tercio de toda la renta y estados y vasallos que a cada uno de nos se nos diere
e hiciere merced en cualquier manera o forma que sea… por vía de
estado o renta, repartimiento de indios, situaciones, vasallos seais
señor y gocéis… y yo el Dicho D. Fernando de Luque hago la
dicha compañía en la forma y manera que de suso esta
declarada, y doy los veinte mil pesos de buen oro para el dicho descubrimiento
y conquista del dicho reino del Perú a pérdida o ganancia; como
Dios Nuestro Señor sea servido y de lo sucedido en dicho descubrimiento
de la dicha gobernación y tierra. He yo de gozar y de haber
la tercera parte y la otra tercera parte para el capitan Francisco
Pizarro y la otra tercera parte para D. Diego de Almagro.
Los Gobernadores y Oficiales Reales que participan en las empresas mediante la
compañía, lo hacen en calidad de negocio privado, destinado a acrecentar su riqueza. Las empresas de Juan de Grijalba y
Hernan Cortés tuvieron su promotor y participante en Diego de
Velasquez, la de Francisco Pizarro y Almagro y la de Francisco
Hernandez tuvieron como participante al gobernador
PedrariasDavila. Ademas de los funcionarios
reales, los comerciantes son también personas importantes en el
financiamiento de las empresas. Los primeros porque
reciben su renta en oro, y los segundos por la naturaleza mercantil de sus
negocios y por su disciplina económica, poseen riqueza en metales
preciosos que es la mas libre en la economía de las Indias.
La forma en que contribuyen los comerciantes a la organización de las
empresas de Indias,
es, generalmente, el préstamo. Este consiste en la cesión de
dinero o mercaderías sin interés, a cierto plazo, al cabo del
cual éste debe ser restituido a su dueño; si esto no se cumple,
recae sobre la deuda un castigo que consiste en elevar la suma prestada en
cierta proporción. Esta alza no podemos considerarla idéntica a
la noción del
interés del capital, pues no se
encuentra relacionada con la productividad del dinero, sino con el riesgo; por lo
tanto, podemos decir que el préstamo de los comerciantes a los
empresarios se hace sin intereses. Este hecho se encuentra vinculado a la
noción del
dinero y a la creación de valores económicos. Esta última
se considera como
una obra esencialmente humana en la que el empleo de dinero para comprar
instrumentos no altera su significación antropomórfica. El uso del dinero no se ha
elevado aún, en la mentalidad económica del
español que ha venido a las Indias a la categoría de inversión
de capital, o sea, de una suma de riquezas que seinvierte con el objeto de
crear nuevas riquezas.
El préstamo de dinero sin interés es correspondiente con la
interpretación antropomórfica de la creación de valores
económicos, con la organización colectiva de las empresas en las
que todos participan con sus instrumentos, riesgos y beneficios.
En los préstamos sin interés encontramos dos variaciones: el
préstamo con garantía de indios y el préstamo a la ventura;
este último no posee otra garantía que el plazo estipulado y la
acción penal. En cambio, por la garantía de indios, el
prestamista pasa a usufructuar del
tributo o prestaciones personales de los indígenas encomendados en
nombre del
deudor hasta cancelar la deuda. De esta forma de préstamo conocemos los
siguientes casos: el de Jerónimo y Jaime Tría y Pedro de Jerez a Hernan
Corté, el de Alonso Galiano a Pedro de Valdivia por intermedio de Alonso
de Monroy. En el proceso que se siguió a este
gobernador, se ve que el número de personas que gozaban de encomiendas,
en pago de deudas, sobrepasa el caso indicado.
Los préstamos a la ventura fueron muy abundantes. El número de personas que prestaron dinero a Hernan
Cortés asciende, según lo que consignan Bernal Díaz, Lope
de Gómara y la probanza de Ochoa de Lejalde, a diez. Pedro de Alvarado contrajo grandes deudas para realizar su empresa
al Perú. Rodrigo de Bastidas murió en la Carcel de
Cuba por no haber podido satisfacer a sus acreedores.