EL IMPERIO DE LA LEY EN MÉXICO
En nuestro país el Estado de Derecho es débil, la cultura de la
legalidad es incipiente y el acceso a la justicia desigual. En teoría,
tanto el Estado como la sociedad estan sujetos al “Imperio de la
Ley”, sin embargo existen en la practica “recursos”
para evadirla.
La Constitución Política de Los Estados Unidos Mexicanos
señala que la justicia debe ser pronta, completa, imparcial y gratuita
para todos y los tribunales estaran expeditos para impartirla (Art. 17
constitucional). Los órganos del poder público tienen la
obligación de regirse según el principio de legalidad, es decir,
sólo pueden hacer aquello que la ley les faculta expresamente, en
cambio, los ciudadanos pueden hacer todo aquello que no les esté
expresamente prohibido por la ley.
El deficiente acceso a la justicia y el escaso respeto a la
ley tienen razones de orden económico, cultural, procesal y
organizativo. A quienes cuentan con abundantes recursos
económicos y relaciones sociales suelen sortear el cumplimiento de la
ley. En la conciencia colectiva se tiene la idea de que es
valido el sustraerse a la aplicación de la ley cuando se le
considera injusta. En un estudio de opinión, a la interrogante
“Cuando usted piensa que tiene la razón,
¿esta o no dispuesto a ir en contra de lo establecido por la ley?”, el 45% delos encuestados contestó que
sí, mientras el 40% contestó que no. (IIJ,
2004).
Es una realidad que la impartición de justicia en México adolece
de sobre carga de trabajo y poco personal en los juzgados, lo que genera el
rezago judicial (con excepción de la materia electoral), y como
consecuencia los juicios tardan mucho en ser resueltos, si a esto le agregamos
que en las diversas instancias de los juicios las partes recurren a los
Tribunales de alzada y al juicio de garantías de forma
sistematica con el fin de entorpecer el asunto, volviendo los procesos
judiciales tortuosos y tardados.
Si bien es cierto que la justicia es gratuita también
lo es el hecho de que implica costos que no todos pueden sufragar, por ejemplo,
los de peritajes y presentación de pruebas, entre otros, lo que implica
una limitante para el acceso igualitario a la justicia. Otro aspecto que
influye de manera importante en el acceso a la justicia tiene que ver con la
ubicación de los juzgados que generalmente esta en las capitales
y ciudades principales, esto dificulta que las personas que viven en
comunidades apartadas y de escasos recursos puedan acudir a los mismos; el tema
de las fianzas es otro problema al que se enfrentan.
En lo que se refiere a los servidores públicos tanto federales,
estatales y municipales, se encuentran sometidos al imperio de la ley ya
quecuando reciben su nombramiento protestan: “guardar y hacer guardar la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las Leyes
que de ella emanen…” (Art. 128
constitucional) de no hacerlo así implica que incurren en
responsabilidades que pueden ser administrativas, civiles, penales y
políticas según se desprende de los artículos 108 a 114
constitucionales y de la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas de
los Servidores Públicos y sus homólogas estatales. No obstante lo
anterior un buen numero de ellos no pueden ser
procesados por la justicia sin autorización previa de la Camara
de Diputados lo que dificulta que efectivamente impere la ley.
La Auditoría Superior de la Federación (que se integra por la
Camara de Diputados), la Secretaría de la Función
Pública (que depende del
Poder Ejecutivo Federal) y los órganos de control interno de las
entidades públicas, así como
sus homólogas estatales, tiene la tarea de supervisar la actuación
de los servidores públicos.
En cuanto al presidente de la República, los legisladores federales y
locales, gobernadores, el jefe de gobierno del Distrito Federal, ministros de
la Suprema Corte de Justicia de la Nación y otros altos magistrados,
secretarios de estado, procuradores de justicia, y consejeros del IFE, gozan
del llamado “fuero constitucional” esto significa que para poder
ser sometidos ajuicio primero la Camara de Diputados debe
“desaforar” al inculpado. El “fuero” tiene como
finalidades: 1) evitar acusaciones temerarias o sin fundamento contra
funcionarios públicos mencionados durante el periodo de su encargo
público; 2) evitar que sean procesados por opiniones propias de su
encargo; 3) protegerlos contra orden de detención arbitraria. El tema del
fuero ha generado, y con razón, la percepción entre los
ciudadanos de que es sinónimo de impunidad. En una
encuesta de Mitofsky, tres de cada cuatro mexicanos se pronunciaron en contra
de ésta figura.
Aunque contamos con una Constitución y un nutrido número de leyes
y reglamentos con sus respectivos mecanismos e instituciones cuya finalidad es
hacerlas cumplir, su efectividad y eficiencia es precaria lo que hace
reflexionar si en la practica efectivamente todos los ciudadanos incluyendo
a los servidores públicos estan efectivamente sometidos al
Imperio de la Ley.
Se requiere entonces que como nación construyamos decididamente una
sólida cultura de la legalidad, es desde las escuelas donde el civismo
debe volver a ser eje rector de la educación y desde las Instituciones
como el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación donde se
difunden los derechos político-electorales y se capacita no sólo
a los funcionarios públicos sino también a los ciudadanos en la
cultura de la legalidad.