El Congreso de Panama (designado a menudo como
Congreso Anfictiónico de Panama en recuerdo de la Liga
Anfictiónica de Grecia antigua) fue un congreso que tuvo lugar en la
ciudad de Panama, convocado por el Libertador venezolano Simon Bolivar,
con el objeto de buscar la unión o confederación de
Hispanoamérica, lo que antes fueron los virreinatos españoles en
América.
El Congreso Anfictiónico de Panama
fue, a la vez, la culminación del maximo sueño de
Bolívar y el comienzo de su fracaso. Esta magna asamblea debía fundamentar
una gran nación que, por extensión, población y riquezas
naturales jugaría un papel de primer orden el
mundo, puso al descubierto todas nuestras debilidades. Frente a la gran
capacidad visionaria del Libertador, sin duda el hispanoamericano
mas preclaro de su tiempo, se opuso la cortedad de miras de oligarquías
regionales de latifundistas y comerciantes supeditados a los capitalistas extranjeros.
Mal que, ciento ochenta años después,
todavía nos aqueja. Apenas consolidada la Gran Colombia, y como
su presidente, Bolívar realiza una primera convocatoria en 1822, sin
mucho éxito, a los gobiernos de México, Perú, Chile y Buenos Aires, para reunir una
asamblea “que nos sirviese de consejo en los grandes conflictos, de punto decontacto
en los peligros comunes, de fiel intérprete
en los tratados públicos cuando ocurran dificultades y de conciliador,
en fin, de nuestras
diferencias”
A inicios de 1826, en unas notas tituladas Un pensamiento sobre el Congreso de Panama,
Bolívar visualizaba: “Este Congreso parece destinado a formar la
liga mas vasta, o mas
extraordinaria o mas fuerte que ha aparecido hasta el día sobre
la tierra. La Santa Alianza
sera inferior en poder a esta confederación”.
Y lista diez objetivos concretos que aspiraba
salieran del cónclave, entre ellos: que las naciones independientes
estarían ligadas por una “ley común que fijase sus relaciones
externas”; lo cual forzaría a España a reconocerlas y hacer
la paz; la conservación del
orden interno, dentro de cada estado y entre sí, de modo que “ninguno sería mas
débil”, manteniendo un “equilibrio perfecto”; que la
fuerza de todos concurran en
auxilio de un ataque externo o de “facciones anarquicas”;
se alcanzaría la
“reforma social” bajo un “régimen de libertad y
paz”; no habría diferencias
“de origen y de colores”; aunque agregaba, que “tampoco
temería la Tiempo después debido a esa leyenda,
al puente y a la calle que después se formó se le llamó La Calle del Puente del Clérigo,
y después se renombró
a 7a. y 8a. de Allende.
La piedra encantada
En Tlalpan al sur de la
Ciudad de México, en la población de llamada Fuentes Brotantes se encuentra un arroyo que lo atraviesa. Es un lugar en donde
los pobladores nativos son fervorosos creyentes católicos. A mitad del poblado,
junto al arroyo se encuentra
una piedra de dimensiones enormes, que más que
piedra realmente es una roca,
pero los pobladores le han llamado siempre la piedra. Cada dos años, en las siguientes
fechas el 24 y 31 de diciembre
la piedra desaparecey en su lugar aparece
una tienda miscelánea y la gente que va de visita
entra a comprar algo, al momento que entra la tienda
se cierra y nuevamente aparece la piedra encantada. Se dice, se rumora que en el interior de dicha roca se encuentran
cavernas que conducen a distintos destinos y han sido pocos los
que han logrado
salir de allí, eligiendo la caverna correcta. También se cuenta que allí
es el refugio de la llorona que sale por las noches
a caminar por la orilla del
arroyo y llega hasta el y los
anfitriones colombianos, el canciller
Pedro Gual y Pedro Briceño Méndez