Índices de MATRIMONIO Y DIVORCIO en México Según el INEGI
Matrimonios
El diccionario define al matrimonio como una institución social,
reconocida como legítima por la sociedad, que consiste en la unión
de dos personas para establecer una comunidad de vida.
Casarse es una decisión muy importante para las
personas.
En México
Al 2011 se registraron 570 mil 954 matrimonios, en 2010 fueron 568
mil 632 y en 2009 la cifra se ubicó en 558 mil 913.
A partir de 2009, en el Distrito Federal se legalizaron los matrimonios entre
parejas del mismo sexo, por lo que durante 2010, se registraron 380 matrimonios
en los cuales los contrayentes son hombres y 309 en los que son mujeres; en
2011 los enlaces fueron de 457 y 345 respectivamente.
Divorcios
De manera opuesta a la definición de matrimonio, la palabra divorcio
significa disolver, separar, apartar a las personas que vivían en una
estrecha relación.
En los últimos años, el número de
divorcios en México se incrementó considerablemente.
En México
Al 2011 se registraron 91 mil 285 divorcios,
en 2010 fueron 86 mil 042 y en 2009 la cifra se
ubicó en 84 mil 302.
En México ha ido en aumento el número de
divorcios por cada 100 matrimonios. Observa la grafica:
Relación divorcios-matrimonios
(1980-2011)
En 1980 por cada 100 matrimonios había 4 divorcios; en 1990 y 2000 esta
cifra se elevó a poco mas de 7 divorcios, para 2005 el
número dedivorcios por cada 100 matrimonios fue de casi 12 y al 2011 fue
de 16 divorcios.
Según el INEGI estas son las 10 principales causas de
divorcio
por que llega el divorcio
Elección
Elegí mal, me enamore por el aspecto físico y superficial.
Esto se marchito muy pronto. No trate de entender a mi
pareja y a intentar adaptarnos a lo que iba a ser
nuestra nueva vida. Falta de preparación para estudiar
y entender el compromiso que va a adquirir y
sus responsabilidades. Me equivoque al pensar que cualquier cosa es mejor que
la soledad.
Me di cuenta tarde que es mejor la soledad, pero libre,
antes que estar con alguien que te controle abusivamente.
Dinero
Puse esto por delante y fracasó. Yo tenía mi cuenta para
mis gastos y caprichos, el tenía la suya para lo que quisiera hacer. No
teníamos dinero en común, nada mas que para pagar los gastos
comunes, no para hacer un hogar pensando en el futuro.
Cada uno gastabamos sin preocuparnos en lo que teníamos en
común, por lo que llevamos al maximo nuestras tarjetas de
crédito y no pudimos hacer frente a la vida desorganizaba que llevabamos.
La voluntad estaba dominada por el dinero, no pudo controlar
el vaivén de los sentimientos.
Sacrificio.
Creíamos que el matrimonio solamente era de color de rosa y no queríamos ver las espinas que tienen las
rosas. Cuando nos llegaban las adversidades, no las
aceptabamos como
propias. Siempre teníamos alguna disculpa parajustificarlas y en el
mejor de los casos, un propósito de
arreglarlas mas adelante. No hacíamos ningún sacrificio el
uno para el otro, cediendo en nuestras diferencias. No hicimos nada para
que nuestro matrimonio fuese duradero, apasionado y feliz a lo largo de los años. No éramos honestos con
nosotros mismos, ni con nuestro cónyuge. Nunca
teníamos un plan de vida realista,
para vivir en armonía.
Violencia.
Por que mi pareja tiene ataques de ira que le
llevan a perder el control, aunque sea momentaneamente y no
quiere ponerse en tratamiento para curarlo. Después de esos
momentos de ira motivados por los celos infundados, el pensar solo en el
YO y no en el TU, el alcohol o las drogas, no se acuerda o no se quiere
acordar, de su mal caracter no dominado. La violencia ha
penetrado en nuestro matrimonio y ha salpicado a nuestros hijos. Se estan acostumbrado a ver escenas violentas dentro de la
familia, que nos estan dejando cicatrices imborrables y marcando para
siempre nuestras futuras relaciones. No puedo acostumbrarme a tener que
pasar toda la vida sufriendo violencia, nuestros hijos tampoco, y se
merecen llevar una vida normal, para que no queden marcados para
siempre. Sufrir sin ninguna causa no es amor.
Virtudes y valores.
Por que no he sabido reforzar las virtudes y los
valores que tiene mi pareja, aunque estén muy ocultas y solo hemos hecho
que pelearnos, lo que ha originado que sus defectos se agranden.Nunca he
intentado que tome medidas a corto y largo plazo, para potencias sus
valores y corregir sus defectos.
Infidelidad.
Nos prometimos fidelidad y no la cumplimos. Cada uno tiene
relaciones fuera del matrimonio. Alguien nos dijo
equivocadamente, que el matrimonio no tenia que ser una cadena para siempre,
que podría ser una cadena que nos atara a los dos, pero con eslabones
voluntarios. Esta mala interrelación es la que no nos
permite continuar, ya que nuestras relaciones extra matrimoniales, cada
día exigen mas dedicación y la dedicación tiene que
ser hacia la familia. Ya es tarde para cambiar.
Personas fieles a su pareja, aunque haya habido amores
furtivos, prohibidos, clandestinos. Personas enganchadas a
relaciones imposibles, intermitentes o destructivas que lloran por un amor perdido o sin futuro.
Entrega y adaptación.
Habíamos prometido, que cada uno de nosotros iba
a cambiar algunas actitudes nocivas, que habíamos descubierto y la
verdad ha sido que no hemos cambiado ninguna, porque no hemos hecho
ningún esfuerzo por acoplarnos. Creíamos que el matrimonio
nos iba a arreglar nuestros caracteres, pero nos hemos vuelto cada vez
mas egoístas, sin pensar que para logran un matrimonio con
futuro, hay que pensar en la pareja, mas que en uno mismo, hasta que ha llegado
el momento de que no nos aguantamos. El matrimonio es para darse a la otra
persona, sin esperar nada a cambio y ésto no lo hemos hecho.
Egoísmo. En el fondo, nunca creímos
que íbamos a ser una sola persona, ni nunca
pusimos los medios para llegar a serlo. Nuestro egoísmo e individualismo,
no nos permitió entregarnos completamente. Seguíamos estando separados mentalmente. Estabamos unidos en algunas cosas físicas, pero no en
las mentales y espirituales. Cada uno vivíamos
nuestra vida, a nuestro aire. Los problemas que nos llegaban, no
sabíamos enfrentarlos como pareja unida. Aquello era un ¡salvese el que pueda!
Cambios.
La famosa frase “Cuando me case le haré cambiar”
nunca ha funcionado y menos en nuestro matrimonio. Seguimos
teniendo los mismos defectos que cuando éramos solteros. No
hemos tenido ningún aliciente para cambiar, ni
ningún programa para irlo haciendo. Hemos llegado a una situación
donde nos damos cuenta, que no hemos hecho nada por cambiar y que tampoco vamos
a cambiar nuestras actitudes mínimas, para la convivencia de un matrimonio.
Culpabilidad.
Hay personas que se echan la culpa de todo lo que ha pasado en el
matrimonio. Se frustran y enferman, si la pareja nos les atiende como
creen que se merecen. No saben apartarse de quien les quiere mal y les hace
sufrir continuamente, incluyendo a los hijos. Temen perderlo y se aferran
a su compañía, incluso pagando un
alto precio de sumisión, con tal de no provocar conflictos. Nunca se cansan de esperar y esperar, aunque no vean ningún
cambio en las traiciones, engaños y malos tratos.