Aunque parezca contradictorio todos quisiéramos ser amados y valorados y
al mismo tiempo imponer nuestra visión de la realidad; pero como todos
deseamos lo mismo y de la misma forma, es improbable obtenerlo; el que consigue
lo que quiere sin imponerse es poderoso decía el filósofo
judío Martin Buber en sus palabras: 'quién se impone tiene
un poder débil, aparente; quién no se impone tiene un poder
grandioso, secreto.'
Estoy de acuerdo con Carl Rogers cuando dice que el camino para la
autodestrucción es creer que 'la fuerza produce el derecho';
es decir, que la posición autoritaria que se justifica por la causa de que
soy mas fuerte que tu o porque soy adulta y tu un niño; soy la
que mas sé o la que mas recursos tengo; es inadmisible.
En la familia esto conlleva tratarnos con dignidad y respeto; siendo
responsables con los compromisos contraidos. Comprometiéndonos todos a
crecer y cambiar; admitiendo que vamos a aprender todos de todos: los hijos de
los padres; los padres de los hijos; los hijos de los hijos; los padres de
otros padres; los maestros de los padres; los padres de los maestros y
así hasta el final.
Cabria preguntarse ¿cuantos de nosotros admitimos que aprendemosde
nuestro propios hijos y se los hacemos saber? Porque como dijo el médico y psicólogo indio Deepack Chopra
'Nuestros hijos son nuestros mas grandes maestros'.
Así en la comunicación con los miembros de tu familia;
podras hacerte responsable de tus sentimientos; hacer conciencia de tus
pensamientos; no necesitaras responsabilizar a
otro por tus reacciones; asumiendo el control de ti con responsabilidad. Creo
que en este punto es esencial saber que hoy
día, no solo los terapeutas sino nuestros colegas psiquiatras facilitan
a sus clientes esa fuerza poderosa de la responsabilidad. Lo que se hace es que
se entrena a los pacientes psiquiatricos que sean
ellos mismos los que se den cuenta que cuando oyen voces, o se sienten
perseguidos deben tomarse su medicamento, ya que su experiencia es única
y personal y si la comparten con las demàs personas probablemente les
tendran miedo y lo rechazaran.
Ser responsable de sí mismo significa reconocer que
uno elige lo que hace y también ser quién se es. Esto es, aceptar las consecuencias de tus decisiones en forma
consciente y crítica.
Cuando las personas toman la responsabilidad de sus vidas,
acrecientan sus posibilidades y aprenden a hacer elecciones que los mejoran y
los nutren. Sino se hacen responsables de sí mismos se agotan,
culpan a otros, a la situación o al destino de
su triste situación y claro no hacen nada para cambiar porque son otros
los que deben hacerlo. Es común escuchar a las personas justificar lo
que hacen por razones como
por ejemplo “yo soy Abreu y como
todos los Abreu somos locos es por eso que actuó así”.
DEFINICIÓN
Para el psicólogo aleman Fritz
Perls la responsabilidad es la habilidad para responder, por ti mismo, por tus
acciones, sentimientos, pensamientos. La responsabilidad hacia otros
solo puede surgir cuando uno se da cuenta de la responsabilidad por sí
mismo. Es por eso necesario trabajar en terapia nuestra
propia diferenciación. Cuanto mas cuenta
me dé, de que yo mismo soy el creador de lo que hago, mas
veré mi responsabilidad por los efectos que tengo sobre otros.
Si bien es cierto que no podemos responder uno por el otro; como el padre que se enoja porque su hija hizo
el ridículo en la casa de su amigo Juan, como si fuera él, el que se
comportó de esa forma. Una vez que aceptamos que las personas afectan a
las otras, entonces la responsabilidad incluye también la
obligación o deber que tenemos para con los demas.
Las personas pueden contribuir y lo hacen a queotras se vuelvan
locas o se suiciden, y la gente influye también al gozo y al crecimiento
de otros. Es importante por tanto, animarnos a ver
nuestro impacto sobre los otros para bien y para mal. Es lo que explica
que la hija se haga alcohólica repitiendo la conducta de su padre
alcohólico, o por el contrario no toque una gota de alcohol como reacción contraria al
alcoholismo del
mismo. Sin embargo, a veces aunque la hija no ingiera alcohol se comporta con
la misma característica de agresividad y falta de compromiso propio de
las personas alcohólicas; produciéndose lo que se conoce como
alcoholismo seco.
¿QUÉ HACER?
Es necesario promover la idea de que es mejor que los padres
estén abiertos al cambio, en lugar de pensar que su papel solo consiste
en ser responsables de la educación de sus hijos.
Cuando los padres asignan pequeñas responsabilidades a sus hijos e hijas
en las tareas propias del hogar en forma equitativa y
justa; desarrollan la capacidad para trabajar y aprender a disfrutar el ser
útil. Con el tiempo los hijos van mostrando 'responsabilidad
filial' pudiendo ayudar a los padres en las
diferentes y a veces numerosas tareas que los ocupan.
Por: Lourdes
Henríquez Díaz MA.
Psicóloga Educativa
Terapeuta Familiar