El
Caricare Sabanero
Milvago chimachima, es el sonoro y simpático nombre científico de este pequeño gavilán de las sabanas de Venezuela. Inspirador de nuestro
folclore en la copla que canta: Chirigüare / Chirigüare / Zamurito te va comé /
te va comé / te va comé / te va comé / y… tya te comió! Este gavilancito está
en nuestro folclore porque está en todas partes de Venezuela en contacto con nuestro
medio rural y nuestro pueblo.
Habita los lugares abiertos como
las sabanas, los bordes de bosques, los de las carreteras y los potreros, desde
el nivel del
mar hasta los novecientos metros de altura. Es un ave
diurna, relativamente pequeña, y su plumaje se muestra en una estética
combinación de marrón oscuro sobre las alas y beige o amarillo en el cuerpo y la cabeza. Ostenta
una raya oscura detrás del ojo y delicadas rayas oscuras
y beige sobre las plumas de la cola.
El Chirigüare se asocia mucho al ganado y los potreros.
Con frecuencia se le ve montado sobre el lomo de las vacas, picoteando las
garrapatas que se le pegan en la piel al ganado. Cuando las vacas sestean, a la
sombra de un frondoso samán, los Chirigüares caminan holgadamente por el
costado, el cuello y hasta la cabeza del animal para comerse las garrapatas que
parasitan la piel de las reses.
El Chirigüare casi siempre anda en pareja y, según describe el zoólogoEduardo
Röhl, se revuelca con frecuencia en la tierra polvorienta de los caminos del
llano. Otro hábito es el de caminar detrás del arado para
cazar los animalitos que se alborotan al paso de la maquinaria. Se alimenta de
animales muertos en las carreteras, lo que lo caracteriza como un animal
oportunista en sus hábitos alimenticios. Con frecuencia hemos observado sus
vivaces hábitos, por eso creemos que sólo cuando se muera, Zamurito tSe lo va comé!