La Biología Experimental
La biología experimental es la encargada de las actividades en que se
realizan experimentos con seres vivos. El Collins English Dictionary,
define un experimento como
una prueba o investigación planeada para obtener evidencia a favor o en
contra de una hipótesis. Los editores de la presente obra ya han acotado
un tanto el terreno de la biología experimental al tratar por separado a
la biología molecular. Este criterio incluye también
a varias areas de estudio en que se apoya la medicina moderna, y que
seran tratadas en otro volumen de esta obra.
Aquí se revisara el desarrollo de la biología experimental
en México y se determinaran las políticas y las acciones
que la han llevado a su estado actual. Nos limitaremos a lo que se define
como ciencias
fisiológicas que incluyen a la fisiología celular e integrativa,
a la biofísica y a la farmacología experimental.
Una revisión exhaustiva de la gran cantidad de trabajos publicados en
estas disciplinas seguramente requeriría de todo un libro, y de la
participación de un grupo de especialistas en las numerosas ramas en que
se han diversificado las ciencias fisiológicas. Una empresa así
se intentó en el libro Las ciencias naturales en México en el que
se dedican varios capítulos al desarrollo y al estado de diversas ramas
de la biología experimental: la bioquímica y la biología
molecular, por Raúl Ondarza; las ciencias fisiológicas y
morfológicas por Hugo Aréchiga y Horacio Merchant; algunas
ramas de la biología experimental aplicadas al campo, por Alfonso
Larqué y Rubén San Miguel y la explotación de losrecursos
marinos, por Antonio Peña. Muy recientemente, en el 2007,
Gonzalez-Mariscal y colaboradores han realizado un analisis
exhaustivo del desarrollo de las ciencias fisiológicas: la
fisiología, la farmacología y la biofísica, utilizando los
trabajos presentados en los 50 congresos de ciencias fisiológicas
realizados hasta la fecha
En el presente trabajo habremos de circunscribirnos a aquellas areas en
las que en México se haya producido investigación relevante, no
sólo por el número de los trabajos publicados, sino
también por su impacto nacional e internacional. Particularmente nos
interesa detectar y analizar los factores que han determinado el desarrollo de
la biología experimental a lo largo de los años.
El desarrollo
Es importante revisar el desarrollo que ha tenido en México la
investigación científica ligada a los seres vivos. Con este
propósito dividiremos el desarrollo de la biología experimental
en México en cuatro periodos de duración muy desigual: 1)
un largo periodo inicial que incluye la época precortesiana, la colonial
y el México independiente hasta el porfiriato; 2) un periodo que
va del porfiriato hasta la autonomía de la Universidad Nacional de
México, 1880-1929; 3) uno que va de 1929 a 1970 en que se funda el
Conacyt y ; 4) la era de la planeación científica,
que va de la fundación del Conacyt a la fecha. Estos periodos se
diferencian no sólo por sus productos, que son los trabajos
científicos, sino por las diversas concepciones que se tienen de la
ciencia y por consiguiente de las políticas que se expresan en ellas.
La etapa precientífica
Nuestrosantepasados prehispanicos realizaron observaciones
empíricas cuidadosas y ocasionalmente experimentos que podríamos
considerar como
ciencia. Sin esta actividad inquisitiva no se podría explicar que
Francisco Hernandez, médico de camara de Felipe II,
recopilara información sobre las propiedades medicinales de 1 200
plantas en una monumental Historia de las plantas de la Nueva
España. La primera monografía científica producida
en América fue el Libellus de Medicinalibus Indorum Herbis, escrita por
el xochimilca Martín de la Cruz en 1551 y traducida al latín por
Juan Badiano, otro profesor del Colegio de Tlatelolco. Esta obra es
conocida como
el Códice Cruz-Badiano. Estos productos demuestran la existencia
de una incipiente farmacología ya que sus datos se basaban en la
observación cuidadosa de los efectos de las plantas en los seres
humanos, y quizas también en los animales. Es interesante
señalar que muchos de los efectos de la administración de plantas
señaladas por los aztecas han sido confirmados por la
investigación moderna.
El estudio de las plantas medicinales continuó en la colonia con el
trabajo de sabios como
José Ignacio Bartolache y Antonio Alzate. Este último, a
finales del
siglo xviii sostenía que el sistema de clasificación de las plantas
utilizadas por los aztecas, que consideraba no sólo la forma sino la
localización y el uso de las plantas, de ornato, medicinal, alimenticio,
era superior al sistema taxonómico de Linnaeus. Independientemente
de algunas exageraciones debidas al afan reivindicatorio de nuestras
culturas precolombinas, el estudio de los efectos de lasplantas sobre el hombre
y posteriormente sobre los animales, constituye lo que sería nuestra
primera y mas persistente línea de investigación, ya que
se prolonga a lo largo de la Colonia y se mantiene vigente en la actualidad. El
interés por el uso potencial de plantas u organismos vivos en el
tratamiento de enfermedades se justifica ampliamente considerando que
todavía en la actualidad un tercio de las medicinas en uso tienen un
origen natural.
La biología mexicana en la Colonia y el México independiente, en
el siglo xix, es poco influida por el desarrollo científico que ocurre
en el viejo continente. Si bien existen médicos con excelente
información sobre la bibliografía extranjera como
Manuel Eulogio Carpio, quien fuera profesor de fisiología del Establecimiento de
Ciencias Médicas, su erudición no cristalizó en
ningún trabajo de investigación. De hecho no hubo
laboratorios de investigación relacionados con la biología en la
Colonia ni en el México independiente sino hasta el porfiriato. La
orientación pragmatica de la biología mexicana no
excluyó que nuestros ilustrados de la segunda mitad del siglo xix abrazaran con gran entusiasmo
el positivismo de Augusto Comte y el fisiologismo de Claudio Bernard. De
hecho, Gabino Barreda quien fuera médico, implantó en el plan de
estudios de la Escuela Nacional Preparatoria en 1867 el positivismo de
Comte. Las palabras ciencia y experimento se habían incorporado ya
al discurso de nuestros políticos y administradores desde la
época de Juarez. De hecho existieron grupos que fundaron
agrupaciones científicas importantes como la Sociedad Mexicana deHistoria Natural
en 1868. Sin embargo, mientras que en Europa y en Estados Unidos se iniciaba la
profesionalización de la investigación en biología con la
creación de plazas de investigador e instituciones para llevarla a cabo,
nada similar ocurre en México hasta el porfiriato.
El porfiriato y el periodo revolucionario
De acuerdo con Ana Cecilia Rodríguez de Romo, durante los últimos
años del
gobierno de Porfirio Díaz, la ciencia mexicana tuvo un auge sin
precedentes ya que se crearon varias instituciones científicas y
educativas, revistas y sociedades. En 1884 se creó la Sociedad
Científica Antonio Alzate cuyo objetivo principal era cultivar las
matematicas y las ciencias naturales dentro del
espíritu del
positivismo en que se habían formado sus miembros. Un logro importante
fue la publicación de sus Memorias en las que aparecieron algunos de los
primeros trabajos sobre la plasmogenia de Alfonso Herrera; y los efectos de la
altura del
altiplano mexicano sobre el ser humano, de Vergara Lope. En esta sociedad
se creó la mejor biblioteca científica de la época. Sin
embargo, muy pocos trabajos de biología experimental se realizaron en
este periodo. Una posible explicación a lo escaso de la
contribución de México a la biología experimental o
teórica es que los biólogos mexicanos, frecuentemente amateurs,
no estaban interesados en responder a las grandes incógnitas de la vida
y la naturaleza, sino que tenían el interés mas
practico de apoyar la identidad nacional y sustentar el desarrollo
nacional con sus trabajos descriptivos y estadísticos. En los últimos
años del
porfiriato, esta ideaconcuerda con el estímulo al estudio de temas
biológicos y médicos relacionados con problemas sociales o
económicos de la comunidad. Por otra parte esto demuestra que en
la política asociada al porfiriato ya existe la idea de que la
investigación científica puede contribuir al bienestar de la
población. En 1888 se funda el Instituto Médico Nacional,
primordialmente para investigar las posibles acciones terapéuticas de
plantas mexicanas, programa que dirige el médico Eduardo Liceaga.
En este mismo instituto se inicia el trabajo experimental en temas
basicos. En 1891 la sección de fisiología de este
instituto se propuso estudiar el efecto farmacológico del colorín
y el yoloxóchitl, pero ademas se plantea investigar la causa de
la muerte por sección del nervio vago y los efectos de la
electrización de los nervios frénico y vago en animales
cloroformados.
Durante la Revolución los grandes conflictos sociales casi paralizan las
instituciones científicas. Sin embargo en 1915 se creó la
Dirección de Estudios Biológicos dirigida por Alfonso L. Herrera
dentro de la Secretaría de Agricultura y Fomento. Alfonso L.
Herrera fue uno de los primeros biólogos en México que
incursionó en la biología teórica, proponiendo una hipótesis
sobre el origen de la vida que llamó plasmogenia. Si bien esta
teoría no tuvo un impacto importante, sí logra estimular a
jóvenes biólogos mexicanos a discutir aquellos aspectos de la
biología relacionados con temas generales como la evolución y el origen de la
vida. Tres de estos jóvenes: Ocaranza, Ochoterena, y Eliseo
Ramírez tendran una gran importancia en elfuturo desarrollo de la
biología experimental y la biomedicina en México. Ocaranza,
médico de profesión, sera el promotor de la fisiología;
Eliseo Ramírez, médico que investiga en varias areas,
describió por primera vez los cambios que experimenta la
citología vaginal en la mujer durante el ciclo menstrual; y por otra
parte estudia los efectos farmacológicos del zoapatle sobre la
contractilidad uterina en animales. El biólogo Ochotorena inicialmente
dedicado a la botanica, es pionero en los estudios sobre la
histología y la embriología del sistema nervioso.
Con Justo Sierra, en 1910 se reorganizó la Universidad Nacional pero
realiza muy poco trabajo en biología experimental hasta después
de la década de 1940. Si bien en 1929 se crea el Instituto de
Biología, derivado de la Dirección de Estudios Biológicos,
sus 14 investigadores son biólogos dedicados a la taxonomía
dentro de la botanica o la zoología, y se realiza poco o nulo
trabajo experimental. Por otra parte en la década de 1930, la
universidad pasa por una de sus etapas mas difíciles.
En 1933 el gobierno de Abelardo Rodríguez suspende el subsidio
federal. La pugna con el siguiente presidente, Lazaro
Cardenas, se centra alrededor de la orientación ideológica
de la educación superior: o libertad de catedra o socialismo
científico, y no favorece la expansión de la Universidad hacia
nuevas areas del conocimiento. De hecho en 1935 sólo
existen cuatro institutos en la unam: Biología, Geología,
Investigaciones Sociales y el Observatorio Astronómico. Aunque el
rector Gómez Morín propone la creación del Instituto de Biología
Médica en1934, el laboratorio de Estudios Médicos y
Biológicos se inaugura hasta 1941.
Dos acciones relevantes para la ciencia mexicana se realizan a finales de la
década de 1930 durante el gobierno de Lazaro Cardenas: en
1937 se crea el Instituto Politécnico Nacional (ipn), que incluye una
Escuela Nacional de Ciencias Biológicas. A su vez, se deriva en
parte de la Escuela de Bacteriología de la Universidad Gabino Barreda,
que es la Universidad Obrera, y se estable el Instituto Nacional de Salud y
Enfermedades Tropicales (inset), en 1939. En estas instituciones se
constituiran grupos de investigadores en fisiología, farmacología,
inmunología y bioquímica, que daran resultados importantes
en la siguiente década. En el caso del inset, por primera vez en una
institución científica en México se establecen plazas para
profesionistas con dedicación a la investigación con salarios
decorosos, 900 pesos mensuales, salario excelente para la fecha.
Incluyendo a la biomedicina, la producción científica nacional es
muy escasa durante el periodo que va de 1910 a 1940, lo que justificaría
su denominación por Kumate como
la “travesía por el desierto”. Sin embargo, a partir de la
década de 1920 se inician acciones que tendran gran impacto en
años posteriores. Por ejemplo, en la Escuela de Altos Estudios que se
transformó en la Facultad de Filosofía y Letras, en 1925 se
impartieron excelentes catedras de biología, física,
matematicas y química. Otra de estas acciones, con el apoyo de
fundaciones privadas como la Rockefeller y la Guggenheim, fue el envío
de profesores a instituciones del extranjero, sobre todo aEstados Unidos, en
las décadas de 1920 y 1930. Por ejemplo, la mayoría de los
que serían directores de laboratorios en el Instituto de Salubridad y
Enfermedades Tropicales fueron becados por la Fundación Guggenheim para
realizar estudios en universidades americanas.
La creación de instituciones
El advenimiento de Manuel Avila Camacho como presidente de la república en
1940, representó un cambio importante en las relaciones siempre tensas
que habían tenido con el gobierno federal la Universidad Nacional
Autónoma de México y otros grupos académicos. Esto
aunado al inicio de una larga etapa de prosperidad en la economía del
país, favorece el desarrollo de las actividades de investigación,
no sólo en las instituciones de educación superior, sino
también en instituciones médicas que se incorporan a la
investigación como una de sus actividades prioritarias. En este
periodo se dona a la universidad los terrenos en que se construira la
ciudad universitaria en el periodo siguiente, el de Miguel Aleman, y en
la que se instalaran institutos de investigación dotados de
instrumental y recursos adecuados para realizar trabajo de investigación
de calidad. El primero de los institutos de la unam orientado a la
investigación biomédica es el Laboratorio de Estudios Médicos
y Biológicos fundado en 1941, que se convertira en instituto en
1943. Las acciones realizadas en la década de 1940 en apoyo de la
investigación biomédica dan resultados muy importantes, que
seran tratados con detalle en otros capítulos de esta obra, es
“la época de oro de la medicina mexicana”. En esta
década se fundan el InstitutoNacional de Cardiología, el Hospital
Infantil y el Hospital de Nutrición, luego Instituto de
Nutrición, con plazas de investigador de tiempo completo. Algunos
de ellos gozaron de libertad para dedicarse a la investigación
basica.
Si bien el gran desarrollo de la investigación biológica y
médica que se da en las décadas de 1940 y 1950 esta
promovido por un apoyo gubernamental serio, también es cierto que esta
etapa coincide con la aparición de algunas personalidades sobresalientes
que podríamos considerar como
los fundadores de la biología experimental en México. Y
también coincide con la aparición de cuatro instituciones que
adquieren la madurez suficiente como para constituir el sustrato donde
actuarían estos pioneros: la Facultad de Medicina de la unam, el
Instituto Nacional de Cardiología de la ssa, el Instituto de Estudios
Médicos y Biológicos unam, y la Escuela Nacional de Ciencias
Biológicas del ipn.
Los fundadores y los grupos primordiales
El doctor José Joaquín Izquierdo fue uno de los primeros
beneficiados en México por el apoyo de la Fundación Rockefeller,
que lo becó en 1927 para trabajar en los laboratorios de
fisiología de Harvard, Cambridge, Colonia y Plymouth. Durante este
periodo no sólo tuvo una productividad científica importante sino
que asimiló la organización y el funcionamiento de departamentos
de fisiología modernos. Como director del Departamento de
Fisiología en Medicina de la unam, en 1934 organizó cursos y
practicas experimentales de excelente nivel. Bajo la
dirección del
doctor Izquierdo, se creó un Departamento de Fisiología que
contó con unaexcelente hemeroteca, no sólo en fisiología
sino en las otras ramas de la biología experimental. Es indiscutible que
el departamento de fisiología de la Escuela de Medicina de la unam
promovido por Ocaranza y dirigido por Izquierdo, se convierte en la incubadora
de varios investigadores que desarrollaran la fisiología y la
farmacología en México. En la década de 1940, cuando
todavía el Departamento de Fisiología se ubica en la vieja
Escuela de Medicina en Santo Domingo, se le incorporan médicos y
estudiantes como Carlos Alcocer, Francisco Alonso de la Florida y Raúl
Hernandez-Peón. Por otra parte el Instituto de Estudios
Médicos y Biológicos se encuentra por esas fechas instalado en el
mismo edificio de la Escuela de Medicina y algunos de sus miembros como
Efrén C. del Pozo y Carlos Guzman-Flores son profesores del
Departamento de Fisiología, lo que favorece la colaboración entre
estos dos grupos. Bajo la dirección de del Pozo inician sus
carreras como investigadores Raúl Hernandez-Peón, Carlos
Guzman-Flores y Ruy Pérez Tamayo que publican un trabajo sobre la
regulación de la circulación renal por los nervios
simpaticos.
A mediados de la década de 1950, Raúl
Hernandez-Peón inició una serie de estudios sobre la
electrofisiología de la actividad nerviosa superior. Sus estudios
sobre el papel de la formación reticular del tallo cerebral en la regulación
de la transmisión nerviosa aferente, tuvieron repercusión
internacional. Hernandez-Peón y sus colaboradores en la Facultad
de Medicina, entre los que destacan Alcocer y Brust-Carmona, también
estudiaron los cambios electrofisiológicos asociados aprocesos cerebrales
complejos como son la habituación y el aprendizaje por
condicionamiento. Carlos Alcocer inició estudios de
fisiología olfatoria y gustativa y formó un grupo importante de
jóvenes investigadores entre los que se contaba a Hugo Aréchiga,
Rosalinda Guevara y Beatriz Fuentes Pardo, que se incorporaron al Departamento
de Fisiología cuando ya estaba ubicado en la ciudad universitaria.
Hugo Aréchiga, alumno de Alcocer, durante su estancia en la unam fue
pionero en dos areas importantes: la neuroendocrinología de
invertebrados, que es estudio de neurohormonas en el acocil, y el estudio de
ritmos biológicos tanto en invertebrados como en mamíferos.
Por estas fechas, en la Escuela de Medicina se crea el Departamento de
Farmacología dirigido por el michoacano Efraín Pardo Codina,
quien integró un importante grupo pionero en varias areas de la
farmacología. En este grupo destacaron: Roberto Vargas, David
Cato, Gaudencio Alcantara, Julian Villareal, Horacio Vidrio y
Rodolfo Rodríguez Carranza. Al tener problemas con la
dirección de la Escuela de Medicina, Pardo funda con la mayoría
de sus colaboradores uno de los pocos institutos ligados a la industria, el
Instituto Miles de Farmacología y Terapéutica Experimental que se
mantiene activo de 1961 a 1980.
Con la organización departamental se establece también en la
Facultad de Medicina el primer Departamento de Bioquímica encabezado por
José Joaquín Laguna, con la participación de Jesús
Guzman, Raúl Ondarza, Félix Córdoba, Armando Gómez
Puyou, Carlos del Río y Sergio Estrada Orihuela, entre otros.
Arturo Rosenblueth, quienobtuvo su grado de doctor en medicina por la
Universidad de París, al regresar a México es nombrado ayudante y
al año siguiente profesor de fisiología. En 1930 obtuvo una
beca Guggenheim para incorporarse al laboratorio de fisiología en Harvard
que dirigía W.B. Cannon, uno de los fisiólogos mas
destacado de la primera mitad del
siglo xx. En esta institución permaneció hasta el
año de 1943 cuando regresa a México. Durante este periodo
Rosenblueth realiza trabajo acerca de los mecanismos involucrados en la
transmisión de impulsos nerviosos en los ganglios simpaticos y en
efectores como
músculo esquelético y liso. Sus discusiones teóricas
en un círculo al que pertenecían el físico Manuel Sandoval
Vallarta y el matematico Norbert Wiener, se plasman en una
publicación Behavior, purpose and teleology que en su libro Cybernetics
el mismo Wiener reconoce como
un antecedente de esta nueva orientación científica.
Rosenblueth se integró al Instituto de Cardiología en 1944
atendiendo una invitación de Ignacio Chavez, su director y
fundador. Una de las primeras líneas en establecer en la
biología experimental en México se derivó del trabajo de
Rosenblueth y sus colaboradores iniciales, Juan García Ramos,
Jesús Alanís y Rafael Rubio, acerca de los procesos
eléctricos asociados a la función cardiaca, tanto normal como
patológica. Algunos de los estudios realizados en
cardiología como el de Alanís,
López y Gonzalez Serratos sobre la actividad eléctrica del haz de His han sido mundialmente reconocidos como relevantes en el
area. Paralelamente a estos estudios sobre la actividad
eléctrica de elementosnerviosos y cardiacos, se genera una línea
en la farmacología en la que se estudia el efecto de varias drogas como los glucósidos cardiacos sobre la actividad del
corazón. Esta línea lidereada por Rafael Méndez
incorpora a Jorge Aceves, David Erlij, Carlos Méndez y se mantiene con
Emilio Kabela a lo largo de todo este periodo. Las líneas de
investigación en cardiología se complementan con los estudios
internacionalmente reconocidos de electrocardiografía realizados en el
humano, pero también en animales de experimentación por Demetrio
Sodi-Pallares y Enrique Cabrera.
Efrén C. del Pozo, médico potosino, se incorporó en 1940
al laboratorio de fisiología de Harvard para colaborar por tres
años con Rosenblueth y otros investigadores, principalmente en la
fisiología del sistema nervioso autónomo. Del Pozo
regresó a México en la década de 1940. Luego de un
periodo en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del ipn y el
Instituto de Enfermedades Tropicales de la ssa, se incorpora al Instituto de
Estudios Médicos y Biológicos de la unam. A pesar de tener
una formación común, pues estuvo en el laboratorio de Cannon en
Harvard, el trabajo que Del Pozo inicialmente realiza representa una
orientación diferente de la de Rosenblueth. Del Pozo, siguiendo la
línea iniciada por Eliseo Ramírez años atras, se
orienta al estudio de la farmacología de plantas de uso tradicional como
el zoapatle y a la toxicología del veneno de alacran. Por
otra parte, como se mencionó anteriormente, forma un grupo con
Raúl Hernandez-Peón, Carlos Guzman-Flores y Ruy
Pérez-Tamayo que inicia estudios sobre la regulacióndel sistema nervioso
autónomo en la función renal. Al incorporarse Del Pozo a la
Secretaría General de la unam por dos periodos, de 1953 a 1961, Carlos
Guzman-Flores se constituyó en líder del laboratorio de
fisiología en el iemb. A este grupo se unieron a mediados de la
década de 1950: Augusto Fernandez Guardiola, Manuel Alcaraz,
Thalia Harmony y Carlos Beyer. Inicialmente los trabajos del grupo se orientaron al analisis de reflejos
espinales, o del tallo cerebral, como el reflejo de salto
en el gato. Posteriormente en colaboración con
Hernandez-Peón, Guzman-Flores, Alcaraz y Fernandez-Guardiola
estudian la regulación de la transmisión aferente en las
vías visual y auditiva. Así mismo Augusto
Fernandez Guardiola y Carlos Guzman Flores
inician estudios sobre la epilepsia experimental y el sueño en roedores
y humanos, este último tema conducido también por Enrique
Roldan. Una derivación de los estudios sobre el sistema nervioso
central que se realizaban en el iemb fue la exploración del efecto de la estimulación eléctrica de
estructuras del
sistema límbico sobre órganos, inervados por el sistema nervioso
autónomo. Estos estudios se iniciaron a finales de la
década de 1950 en el laboratorio de Guillermo Anguiano por Carlos Beyer
y Flavio Mena y revelaron que la estimulación del cíngulo, una
parte de la corteza cerebral, activa la secreción de la oxitocina, una
hormona hipofisiaria relacionada con el parto y la lactancia. Estos resultados
fueron de interés porque constituyeron la primera evidencia de un
control cortical sobre la secreción de la hipófisis.
Otra institución fundamentalpara la biología experimental en
México fue la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto
Politécnico Nacional, fundada en 1937, que derivó de la Escuela
de Bacteriología, Parasitología y Fermentaciones. En la
Escuela Nacional de Ciencias Biológicas trabajaron por un tiempo
Efrén C. del Pozo y José Joaquín Izquierdo quienes
participaron en la organización de un Departamento de
Fisiología. Sin embargo fue Ramón Alvarez Buylla
quien estableció líneas consistentes de investigación a
partir de 1947, cuando ingresa a esta institución en la que se
mantendría por mas de 13 años. Español de
nacimiento, fue enviado a la URSS a raíz de la guerra civil
española, y obtuvo su doctorado en fisiología bajo la
dirección del
famoso fisiólogo soviético Anokhin. Inicia sus actividades
científicas estudiando el efecto del
nervio depresor sobre la presión arterial y la respiración, y ya
en México estudia la fisiología de quimoreceptores del nervio del
seno carotídeo. Así mismo con José Ramírez de
Arellano registra el potencial generador en el corpúsculo de Pacini, un
mecanoreceptor. Posteriormente se interesa por la regulación
nerviosa de la glucemia mostrando la posibilidad de condicionar la hipoglucemia
producida por la insulina. Este hallazgo lo lleva a desarrollar una
línea en que posteriormente trabajara Mauricio Russek, quien
demuestra la existencia de glucorreceptores hepaticos que participan en
la regulación de la glucemia y la ingestión alimentaria. Uno de
sus alumnos, Pablo Rudomín, trabajó en estos temas con Alvarez
Buylla, aunque posteriormente establece líneas propias en
otrasinstituciones.
La creación de instituciones
En los años 60 se inicia una serie de cambios en la concepción de
la investigación científica, que en parte son resultado de
la necesidad de incrementar el número de científicos en
México. El evento cardinal en esta tendencia fue la
creación del Cinvestav en 1961. Gracias a las gestiones de
profesionistas distinguidos como; Eugenio Méndez Docurro, Alberto
Sandoval Vallarta y Manuel Cerrillo se logra convencer al gobierno federal
durante la presidencia de López Mateos de la necesidad de establecer una
institución dedicada exclusivamente a la investigación
científica y a los estudios de posgrado. El nombramiento de Arturo
Rosenblueth como
primer director por sus méritos científicos y no
políticos, muestra la seriedad con que se condujo ese proceso. El
requerimiento de tener un posgrado para incorporarse formalmente a la
investigación, y desde luego a la institución, se inició
en el Cinvestav desde su fundación.
A mediados de la década de 1960 se crea el Departamento de
Investigación Científica del imss por la gestión de Jorge
Martínez Manatou, su primer director. Recibe un apoyo irrestricto
de las autoridades del imss y originalmente se
concibe como un
proyecto interdisciplinario con morfólogos, patólogos,
bioquímicos, fisiólogos psicólogos para entender los
fenómenos reproductivos en los humanos. Como en el caso del
Cinvestav, se integra con investigadores mexicanos provenientes del extranjero:
Oscar Domínguez, Alfredo Gallegos, Augusto Bondani y Alfredo Feria,
así como con investigadores provenientes de diversas instituciones
incluyendo ala unam. El imss había constituido grupos de
investigación clínica que se integran a este proyecto. Si
bien la orientación principal era hacia la biología de la
reproducción, se daba una gran libertad de selección en los temas
de estudio dentro de esta amplia area del conocimiento. En este periodo el
crecimiento demografico de la población se percibe como uno de los problemas prioritarios a resolver, tanto
nacional como internacionalmente, lo que permite
obtener apoyos internacionales muy sustanciales de fundaciones extranjeras como la Ford, la
Population Council, who, y otras mas, lo que genera condiciones de
trabajo muy estimulantes. En muy pocos años el Departamento de
Investigación del imss se convierte en la institución de
investigación en México con mayor productividad científica
en el area biomédica, con Martínez Palomo y
Aréchiga, lo que demuestra la posibilidad de desarrollar instituciones
de investigación científica en un tiempo muy breve cuando se
conjuga una política bien definida y liderazgo adecuado con un apoyo
financiero decidido
El clima científico
En el periodo anterior a la década de 1960 la mayoría de los
investigadores que iniciaron la biología experimental en México
eran médicos que carecían de posgrado. Efrén C. del
Pozo, Raúl Hernandez Peón, Carlos Guzman Flores y
Ruy Pérez-Tamayo por nombrar sólo algunos cuantos no
tenían estudios de posgrado. En cierta medida esto se debió
a la carencia de maestrías y doctorados accesibles en México a
los profesionales interesados en hacer una carrera en biología
experimental. Si bien la Facultad de Ciencias teníaposgrados en
ciencias, maestría y doctorado en biología, el currículum
estaba fuertemente orientado hacia la biología descriptiva, lo que
ahuyentaba a estos candidatos en su mayoría médicos de
profesión. Consciente de este problema, durante la rectoría
de Barros Sierra, en 1969 se crean los doctorados en fisiología y
farmacología en la unam.
Entre 1945 y 1960, de 53 investigadores, sólo 8 no son médicos:
Guillermo Massieu, Guillermo Anguiano, Raúl Ondarza, Mauricio Russek,
Pablo Rudomín, Carlos Beyer, Herminia Pasantes y Guillermina
Yankelevitch. A partir de la década de 1960 el número de
biólogos, psicólogos y químicos que se incorporan a la
investigación en biología experimental se incrementa
notablemente, y en la actualidad predominan sobre los médicos.
Esto se debe en gran parte al cambio de curricula en las escuelas de
biología y psicología; así como
una tendencia en las instituciones de salud, como en el imss, de privilegiar la
investigación ligada directamente a los problemas médicos.
Un cambio importante en la orientación de los investigadores en este
periodo es la creciente preocupación por el impacto de sus publicaciones
en la comunidad internacional. Durante las décadas de 1940 y 1950
una proporción importante de los trabajos realizados por los
investigadores mexicanos se publica en revistas nacionales o latinoamericanas,
en los Archivos del Instituto Nacional de Cardiología, en el
Boletín del Instituto de Estudios Médicos y Biológicos, en
el Acta Fisiología Latinoamericana, con un menor impacto citacional que
la mayoría de las revistas anglosajonas. La aparición del
CitationIndex, en 1961, empieza a tener un efecto sobre las expectativas y el
trabajo de los investigadores mexicanos que tienden a privilegiar la
publicación en revistas del
extranjero.
Un hecho quiza mas relevante para el desarrollo de la
biología experimental es que por esta época se empieza a plantear
la necesidad de reorientar la biología hacia areas mas
analíticas y de “frontera”. Esta tendencia favorece el
surgimiento de grupos como
el de la biofísica y la bioquímica de membranas que van a
constituir una línea cuantitativa y cualitativamente importante en el
futuro. El grupo pionero en esta línea se originó en el Departamento de Bioquímica, del
Cinvestav, en 1963, con jóvenes investigadores entrenados en el
extranjero como:
Carlos Gitler, Jorge Cerbón y Sergio Estrada Orihuela. Esta
orientación analítica fue vigorosamente apoyada por Guillermo
Soberón en la unam, que se trasladó con un grupo importante de
médicos entre ellos Jaime Martuscelli, Jaime Mora, Mario
Castañeda, Luis Cañedo, y Rebeca Tarrab, del Instituto
Nacional de Nutrición al Instituto de Estudios Médicos y
Biológicos, del cual fue nombrado director en 1965. Jacqueline
Fortes y Larissa Lomnitz refiriéndose a este cambio de
orientación en el establecimiento de areas prioritarias comentan:
Aunque todos eran médicos de formación, estos investigadores
poseían una orientación científica basica y
representaban una escuela científica mas reciente basada en los
importantes desarrollos en bioquímica y biología molecular
logrados después de la segunda guerra mundial. Estas nuevas
inquietudes representaban una orientaciónfundamentalmente diferente de
la escuela europea tradicional de donde provenían los investigadores
fundadores del instituto, ya que mostraban la
influencia del
énfasis reciente de los países anglosajones en el estudio de los
procesos físicos y químicos fundamentales en el interior de la
célula viva.
Particularmente en la unam, esta convicción transformada en
política privilegió una orientación analítica en la
biología experimental; tuvo el efecto positivo de desarrollar grupos
importantes en la biología celular y molecular aunque un tanto en
detrimento de los enfoques integrativos y de las ciencias morfológicas.
A pesar de esta tendencia, durante la década de 1960 la mayoría
de los investigadores pertenecientes a lo que definimos como grupos primordiales, se constituyen en
líderes de grupos que multiplican los recursos humanos dedicados a las
ciencias fisiológicas. Por supuesto las líneas originales se
fueron diversificando: por un lado con la incorporación de nuevas
tecnologías a sus temas de estudio; y por otro, por los aportes de los
jóvenes investigadores que se han reincorporado a los grupos después
de estancias en el extranjero. En algunos casos se generaron areas
de estudio totalmente nuevas. Por ejemplo, José Negrete
Martínez inicia el analisis matematico de los
fenómenos biológicos y el diseño de modelos en
colaboración con Guillermina Yankelevitch.
Resultados en el periodo pre-Conacyt
Los resultados que se obtuvieron en la producción científica
mexicana casi nula en los 30, fueron sorprendentes para el periodo
1940-1969. En 1970 poco antes de la fundación del Conacyt,
JorgeRobles Glenn realizó un estudio sobre la investigación
mexicana analizando los índices extranjeros de información
disponibles a la fecha.
Utilizando documentos como el de Científicos de México elaborado
por la unesco en 1965, y autores mexicanos que aparecen en Current Contents de
1968 a 1969, en el International Directory of Research and Development
Scientists, así como en la publicación de María Luisa
Rodríguez Sala, Las instituciones de investigación
científica en México, de 1970, se determinó una
cifra de 1 862 investigadores en las ciencias “puras”, i.e.
biología, biomedicina, química, física,
matematicas, astronomía, etc. De 1 793 de estos
investigadores se encontró que el 25.9%, es decir 464, estaban incluidos
en el Citation Index de 1970.
Esta relación de 1 a 4 entre autores citados y no citados no era
diferente a la que se reportaba en la mayoría de los otros
países. La mayoría de los investigadores citados, 311, el
67%, correspondía a ciencias médicas y naturales, una
proporción significativamente mayor que en la distribución
mundial que sería del 43%. Excluyendo las instituciones ligadas a
la investigación agropecuaria, se detectaron 33 instituciones
productoras de trabajos en el area de la biología experimental y
la biomedicina. Entre ellas se encontraban varios institutos de la unam, el
Cinvestav, la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas de ipn, varias
escuelas de medicina incluyendo algunas de la provincia como San Luis
Potosí, Guanajuato, Guadalajara y Veracruz, los institutos y hospitales
generales de salud de la ssa e instituciones privadas como el InstitutoSyntex y
el Instituto Miles de Farmacología Experimental.
Si se considera que en la década de 1930, casi no existían
laboratorios equipados para realizar una investigación experimental, es
necesario concluir que en esos 30 años se da un crecimiento
espectacular.
¿Que calidad tuvo la investigación durante el periodo
pre-Conacyt? Si se considera el número de citas por autor como un indicador de la relevancia del trabajo, el analisis realizado
por Robles Glenn arroja un resultado favorable para los investigadores que
trabajan en México. El promedio anual de citas para los
investigadores mexicanos fue de 8.90% superior en 36% al promedio mundial de
6.52 por ciento. Los trabajos en biología experimental tuvieron un
promedio de 9.2 por ciento.
Un analisis de los datos presentados por Robles Glenn muestra que ya en
la década de 1970 existen grupos y líneas en la biología
experimental con un reconocimiento internacional significativo. Si
tomamos como criterio para definir visibilidad
internacional un impacto citacional doble del promedio internacional,
reconoceríamos las siguientes líneas y grupos: fisiología
cardiovascular, con Sodi-Pallares, Jesús Alanís y Arturo
Rosenblueth. Sistema nervioso central, con Raúl Hernandez-Peón,
Carlos Guzman-Flores y R. Alvarez Buylla.
Neuroendocrinología, con Fernando Antón-Tay y Carlos Beber.
Biofísica, estructura y función de las membranas celulares, con
C. Gitler, Jorge Aceves y Jorge Cerbón.
Microbiología y parasitología, con F. Bojalil, F. Biagi y J. Ruiz
Herrera. Patología experimental, con R. Pérez-Tamayo y A.
Martínez Palomo. Biología de laReproducción, con J.
Martínez Manatou, y Carlos Gual y bioquímica, con J.
Mora, M. Rojkind y S. Frenk.
En 1970, el analisis de los datos que realiza Robles Glenn por
otra parte, no apoya la idea de que la investigación realizada en la
biología experimental y la biomedicina antes de la década de 1970
carecía de relevancia por un enfoque integrativo ya caduco. De
hecho en estas areas los investigadores mas citados fueron
aquellos cuyo tema de estudio era el organismo entero: Joaquín Cravioto,
Demetrio Sodi-Pallares, Raúl Hernandez-Peón,
Arturo Rosenblueth, encabezan la lista de investigadores biomédicos
mas citados en
el año de 1970.
Como se demuestra
por el analisis bibliografico anteriormente mencionado, previo al
establecimiento del Conacyt, el periodo entre 1940 y 1970 es muy
fructífero no sólo para la biología experimental sino para
toda la ciencia mexicana. Algunos de los factores que contribuyeron a
este desarrollo son de facil identificación: 1) la
creación de instituciones relacionados con la investigación
científica; 2) la creación de plazas de
investigación de tiempo completo; 3) hasta 1968, es una etapa
políticamente tranquila tanto en el país como en la vida de las
instituciones en contraste con los periodos anteriores; 4) fundaciones e
instituciones internacionales apoyan y reconocen a los investigadores
mexicanos, incluyendo un programa de becas muy activo; 5) hay una relativa
ausencia de burocratismo en el manejo de la investigación
científica y 6) hay presencia de investigadores extranjeros relevantes
que se incorporan o colaboran por periodos prolongados coninstituciones
nacionales nacientes.
La etapa post-Conacyt
El contexto político académico de la década de 1970 trae
cambios fundamentales en la organización de la ciencia mexicana. A
principios de esta década se crea el Conacyt. Si bien en 1935 en
el gobierno de Lazaro Cardenas y siguiendo el modelo de la
Unión Soviética, se había creado el Conesic, el Consejo
Nacional de Educación Superior y de Investigación
Científica, esta institución no sobrevivió sino hasta
1938. Desde su nacimiento el Conesic fue objeto de críticas muy
severas de parte del
sistema universitario para quienes representaba una amenaza a la libre
investigación. Estas críticas como veremos, fueron también
inicialmente dirigidas al Conacyt por la comunidad científica por las
mismas razones. Sin embargo, el Conesic “…fue el primer
esfuerzo por contar con un órgano en la administración
pública que desempeñara el papel que el gobierno se había
asignado como
promotor oficial de la actividad científica nacional”.
Para realizar su función promotora de la ciencia el Conacyt genera tres
acciones principales que se han mantenido a lo largo de los años: 1) la
formación de recursos humanos a través de posgrados en el
país o en el extranjero, 2) el apoyo a las descentralizaciones
geografica y tematica de la ciencia, con el establecimiento de
centros de investigación en provincia relacionadas con temas
específicos y 3) El financiamiento de la investigación
científica a través de proyectos evaluados por comités de
pares.
Con la creación del Conacyt disminuye o desaparecen los procesos por los
cuales se apoyó a la investigacióncientífica, y se
apoya particularmente la creación de infraestructura con la
creación de nuevas instituciones. Este proceso dependió de
la relación cercana, inclusive amistosa, de algunos investigadores o
profesionistas distinguidos con destacados miembros del sistema político mexicano,
incluyendo al presidente. Sería difícil explicar la
creación del inc sin la relación
de Ignacio Chavéz con funcionarios importantes del gobierno federal. Asimismo, el
establecimiento del Departamento de Investigación Científica del
imss se debe indudablemente a la labor realizada por el doctor Jorge
Martínez Manatou gestor de esta acción con las altas autoridades
del gobierno federal
Con la creación del Conacyt el mecanismo de distribución de
presupuestos cambia radicalmente. La magnitud de los apoyos a los
proyectos de investigación esta diseñada por Conacyt para
subvencionar los gastos derivados de un proyecto, incluye drogas, equipo, pero
no para la creación de infraestructura incluyendo la creación de
plazas. Por otra parte, la asignación de recursos se da con
juicios de comités, de técnicos o científicos pares, con
base en criterios de “calidad”. Esto hace que las
universidades de provincia y algunas de la capital con infraestructura pobre,
hayan tenido dificultades para establecer programas competitivos sólidos
de investigación, y que gran parte del recurso de Conacyt vaya a
aquellas instituciones, la unam, el Cinvestav, la uam y el ipn, con claras
ventajas de salida en la competencia institucional. Esta política,
sin embargo, reflejaba las demandas de grupos influyentes de la
comunidadcientífica establecidos en las grandes instituciones y que se
expresan a través de organismos como la Academia de la
Investigación Científica.
A pesar de que el presupuesto para la ciencia se mantiene mas o menos
constante en términos de la proporción del producto interno bruto, el crecimiento
cuantitativo de investigadores en el area de la biología
experimental es importante. Esto ocurre a pesar de que existen pocas
instituciones con características adecuadas para permitir un desarrollo
productivo. El periodo posterior a la década de los 70 se
caracteriza por un crecimiento muy importante de la investigación en
biología experimental sobre todo en la unam, no solamente apoyada por
sus importantes recursos propios, sino por las políticas implantadas por
Conacyt. No sorprende pues, que las mismas instituciones que
contribuyeron mayoritariamente a la producción en la biología
experimental, sobre todo la unam y el Cinvestav sigan manteniendo su
liderazgo. Por otra parte los institutos de salud y el imss disminuyen
significativamente su producción en la biología experimental, al
estimular la investigación vinculada mas directamente con
problemas médicos.
Las nuevas instituciones
A pesar de que la formación de nuevas instituciones después de la
década de 1970 no tiene la misma importancia que de 1940 a 1969, se
crean algunas instituciones que, junto con la expansión de las ya
existentes, dan cabida al número creciente de nuevos investigadores que
se van generando en los programas de posgrado.
En algunos casos, sobre todo en la unam, los nuevos centros y posteriormente
institutos se creancon base en grupos previamente establecidos en la misma
institución, y representan el interés de las autoridades en
desarrollar ciertas areas. Por ejemplo el Instituto de
Investigaciones Biomédicas a partir de su Departamento de
Biología Molecular, genera en 1980 el Centro de Fijación del
Nitrógeno, y en 1982 el Centro de Investigación en
Ingeniería Genética y Biotecnología, que pasa a ser
Instituto de Biotecnología en 1991. Mas recientemente del
mismo Instituto de Investigaciones Biomédicas parte el núcleo
principal de lo que sería en 1993 el Centro de Neurobiología en
Querétaro, que diez años mas tarde se transformaría
en Instituto de Neurociencias. En 1979 se estableció el Centro de
Fisiología Celular a partir del Departamento de Biología
Experimental, que existía en el Instituto de Biología desde 1967.
Estas acciones representan el interés de adecuar a ciertos sectores de
la investigación a las corrientes contemporaneas internacionales,
que se polarizan al analizar los fenómenos al nivel celular y molecular.
Con finalidades muy diferentes se crea en 1974 la Universidad Autónoma
Metropolitana que si bien se orienta a la formación profesional,
organiza dentro de las Divisiones de Ciencias Biológicas y de la Salud
de las Unidades Iztapalapa y Xochimilco, laboratorios de investigación
relacionados con la biología experimental. En la década de
1970 la unam crea las eneps orientadas hacia la docencia profesional, y
desarrollan: la enep-Iztacala un proyecto de neurociencias; y la
enep-Zaragoza uno en biología de la reproducción.
La descentralización
En los 70s se inicia un procesode descentralización que corrige un poco
la enorme diferencia que existe entre el centro y la provincia. Estas
acciones incluyen la formación de unidades o institutos
periféricos por instituciones centrales, como es el caso de la
unam. Con excepción del Instituto de Fisiología
Celular, los centros o institutos creados por la unam se localizan en la
provincia, como son los casos de Cuernavaca y Juriquilla. Por otra parte
el Cinvestav con su Unidad Irapuato, desarrolla un importante proyecto en
biotecnología, y en la Unidad Mérida algunas areas
relacionadas con farmacología y toxicología. En la década
de 1970 el Instituto Mexicano del Seguro Social inicia un vigoroso proyecto de
descentralización de la investigación biomédica con la
creación de la Unidad de Investigación Biomédica de
Occidente en la que se incorporan importantes grupos en investigación
basica y clínica que cubren: José María
Cantú, la genética; Amado Gonzalez, la patología;
Alfredo Feria, las neurociencias; y Néstor Delgado y Luis Huacujala, la
biología de la reproducción. Esta acción es seguida
por el establecimiento de un centro en Monterrey dedicado: a la
farmacología con Molina; la genética con Garza; la
neurofisiología con Galindo; y otro menor en Puebla con grupos
orientados a la biología de la reproducción y a la
orfología.
De manera paralela a estas acciones, a partir de la década de 1980 se
establecen algunos centros de investigación importantes en algunas
universidades de provincia. Como se mencionó anteriormente, ya en
el periodo anterior, se realizaba investigación relevante, al menos
citada en el CitationIndex de 1970, en algunos departamentos de
fisiología o bioquímica de escuelas de medicina en la
provincia. Entre estas destacaban la Escuela de Medicina de San Luis Potosí,
la de Guanajuato y la de Nuevo León. Estas instituciones han
continuado desarrollandose. Por ejemplo en San Luis Potosí con la
incorporación de Rafael Rubio, uno de los investigadores primordiales,
quien regresó de un largo periodo de estancia en los Estados
Unidos. Es interesante señalar que la Benemérita
Universidad Autónoma de Puebla, actual líder en producción
científica entre las universidades de provincia, no se detecta en el
analisis de 1970. Esto demuestra la posibilidad de un desarrollo
científico importante en pocos años cuando se dan condiciones
favorables.
A principios de la década de 1980 se crea el Centro Universitario de
Investigación Biomédica de la Universidad de Colima a partir de
un grupo de jóvenes investigadores formados en el Departamento de
Fisiología, Biofísica y Neurociencias del Cinvestav, apoyadas por
Juan García Ramos, uno de los investigadores primordiales. El
Centro tiene un programa exitoso de maestría y doctorado en ciencias
fisiológicas y en ciencias médicas. Entre sus líneas
principales de estudio estan: la biofísica del transporte a
través de membranas con Miguel Huerta y Jesús Muñiz, la
fisiología del ejercicio, y la fisiopatología del dolor y la
analgesia.
En el año de 1981 la Benemérita Universidad Autónoma de
Puebla crea el Departamento de Investigación Biomédica en el
viejo Hospital Civil. El departamento es organizado por los doctores
Bjorn Hôlmgren y Ruth Urba,investigadores chilenos residentes en
Cuba. Estos investigadores consiguen atraer a un grupo de jóvenes
egresados de la propia Universidad de Puebla graduados en programas de la unam
y el Cinvestav, como Enrique Soto, Eduardo Salinas y José Ramón
Eguibar. El departamento genera su propio programa de maestría y
doctorado y se convierte en Instituto de Fisiología en 1994.
Inicialmente se estudian los diversos factores que regulan el bostezo en los
roedores, para lo cual generan una cepa “bostezadora”,
Posteriormente las actividades se han diversificado e incluye grupos en
neurodesarrollo, fisiología de la médula espinal, neuromodulación
y neuroendocrinología.
El Instituto de Neuroetología de la Universidad Veracruzana se
estableció en 1992 con base en un grupo que había obtenido su
maestría en biología de la reproducción en la Universidad
Autónoma de Tlaxcala. Bajo el liderazgo de Pablo Pacheco del
Instituto de Investigaciones Biomédicas de la unam, el grupo se
desarrolla rapidamente e inicia su doctorado en 1999 cuando se traslada
a un edificio propio. Si bien inicialmente Pablo Pacheco orienta la investigación
a la anatomía y a la electrofisiología de la región
pélvica, y Jorge Manzo a la neuroendocrinología del aparato
reproductivo masculino, sus intereses se han extendido a la
neurofarmacología y a las enfermedades degenerativas. Mario Caba,
otro estudiante originalmente de la maestría en biología de la
reproducción de Tlaxcala, fundó el Laboratorio de Biología
de la Reproducción en 1996, en donde, fundamentalmente con estudiantes
locales, ha consolidado un productivo grupo deinvestigación, lo que le
ha permitido iniciar en 2007 un doctorado en ciencias biomédicas.
El laboratorio ha trabajado en la determinación anatómica de
receptores a esteroides en el cerebro; y recientemente se ha dedicado al
estudio de ritmos circadianos.
A pesar de su posición destacada entre las universidades públicas
de provincia, la Universidad de Guadalajara tuvo una participación muy
discreta en la investigación en biología experimental hasta la
década de 1990. En 1994 bajo la rectoría de Raúl Padilla,
la u de g se comprometió seriamente a impulsar la investigación
científica apoyando la creación de infraestructura y la
contratación de personal calificado. Dentro de este proyecto se
creó una red de centros universitarios. Uno de los primeros fue el
Centro de Estudios e Investigaciones en Comportamiento, bajo el liderazgo de
Emilio Ribes. Posteriormente se invitó al doctor Víctor Manuel
Alcaraz para organizar el Instituto de Neurociencias de la u de g. El
grupo de investigadores que lo componen tienen en común su orientación
hacia los estudios integrativos del sistema nervioso central, y en su
composición participan egresados de escuelas de la propia u de g,
así como investigadores formados en la unam y el Cinvestav, como Jorge
Juarez, Marisela Hernandez, Emilio Guma, Sergio Meneses y
Julieta Ramos.
Las instituciones mixtas
A principio de la década de 1980 el doctor Jorge Flores, subsecretario
de Educación, propuso la creación de centros o laboratorios de
investigación en que conjuntamente participaron universidades de
provincia emergentes y las instituciones centrales con experiencia yrecursos
para la investigación. Dentro de este esquema se creó el
Centro de Investigación en Reproducción Animal (cira), en la
Universidad Autónoma de Tlaxcala, en colaboración inicialmente
con la Universidad Metropolitana hasta 1983, y de 1983 a la fecha con el
Cinvestav. El núcleo inicial constituido por Carlos Beyer, Yolanda
Sandoval y Porfirio Gómora entonces en la uam, creció algo
cuando en 1984 se integran Gabriela Gonzalez-Mariscal y Alonso
Fernandez-Guasti. Posteriormente se incorporaron desde la unam, Pablo
Pacheco y Rafael Villalobos. El cira estableció estudios de
maestría y doctorado en biología de la reproducción a
partir de 1987, grados que otorga la uat. En el cira se han desarrollado
dos líneas desde hace ya varios años: 1) la
neuroendocrinología de las conductas reproductivas, conducta sexual y
maternal, por Carlos Beyer, Gabriela Gonzalez-Mariscal, Angel
Melo y Porfirio Gómora y 2) el estudio del mecanismo de acción de
esteroides en el cerebro, por Oscar Gonzalez Flores.
Otro centro con características mixtas es la llamada Unidad
Periférica Xalapa- unam que se fundó en 1989 por un acuerdo entre
la uv y la unam. El centro dirigido desde su fundación por el
doctor Carlos Contreras del Instituto de Investigaciones Biomédicas esta
apoyado por cinco investigadores contratados por la uv.
En 1993 se crea el Centro de Investigaciones Fisiológicas.
Posteriormente, en el 2001 se crea el Centro Tlaxcala de Biología de la
Conducta. Se constituyó a partir de un grupo de profesores y
estudiantes del cira encabezados por Pablo Pacheco y Margarita Martínez,
ambos miembros delInstituto de Investigaciones Biomédicas de la
unam. En el 2001 la unam y la uat firmaron un convenio formal de
colaboración con el cual ésta tiene dos centros
bi-institucionales. Líneas importantes del centro han sido la
psicobiología del desarrollo, las conductas reproductoras y el estudio
de animales silvestres.
La investigación
Como se señaló anteriormente, a partir de la década de
1960 los logros en la biología celular y el prestigio que de esto se
deriva, promueve enfoques analíticos para el estudio de los procesos
biológicos. Por otra parte, se tiene una dependencia cada vez
mayor de la instrumentación frecuentemente costosa. Juan García
Ramos, que representaba una línea conservadora en la política de
ciencia comentaba: “El investigador tiende a subordinar los problemas a
los alcances y limitaciones de su equipo. Se encuentra con el hecho de
que tiene que emplearlo y entonces sólo trabaja en aquellas
hipótesis que pueden ser resueltas con sus aparatos. Puede
convertirse en un simple obrero de sus maquinas”.
Independientemente de la posible validez de este comentario, lo que sí
caracteriza mucha de la investigación realizada a partir de esa
época, es un cierto reduccionismo con el que se piensa que es posible
explicar un proceso superior a través de un conocimiento de sus
componentes. Para la mayoría de los investigadores jóvenes
el estudio de la función o del organismo entero pierde algo de valor e
interés. A pesar de ello, una proporción importante del
trabajo que se realiza se sigue derivando de las líneas originales.
Los siguientes resultados, muestran un analisisde los principales temas
de estudio durante el periodo 1988-2005. Fue realizado por Gabriela
Gonzalez-Mariscal y colaboradores en el año 2007.
A) Los trabajos relacionados con el sistema nervioso siguen prevaleciendo en la
biología experimental mexicana, particularmente aquellos aspectos que
pudieron calificarse como integrativos. Por ejemplo, se siguen estudiando
las bases neurales del aprendizaje y la memoria con técnicas de registro
neuronal y procesos de analisis cada vez mas sofisticados, como
lo hacen Hugo Merchant y Ranulfo Romo. El estudio de la integración sensitivo-motora
en la médula espinal y la regulación de la transmisión
aferente a la médula espinal, temas que arrancan desde la década
de 1960, se siguen analizando exitosamente con enfoques conceptuales y
metodológicos diferentes, como hacen Pablo Rudomín y Julio
Muñoz. Los mecanismos cerebrales asociados al sueño y a la
vigilia fueron estudiados por Augusto Fernandez-Guardiola y su grupo; en
sus aspectos electrofisiológicos y comparativos, por Fructuoso Ayala; y
en su control humoral, por René Drucker Colín, Javier
Velazquez y Carlos Valverde. El estudio de las bases neurales de
procesos como el dolor y su modulación por factores neurohormonales, son
tema de estudio de varios grupos, como el de Condés-Lara y Beyer.
La epilepsia, las enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson, que Corea
de Huntington ha estudiado, y son analizadas desde varios puntos de vista, como
el morfológico, y el neuroquímico. Se realizan estudios dirigidos
a encontrar una posible terapia génica para tratar estas enfermedades, como
lohacen José Segovia y Daniel Martínez Hong. Una
línea que continúa y se diversifica en los últimos
años es el estudio de los ritmos biológicos y la
participación de algunas estructuras cerebrales en su control, como el
núcleo supraquiasmatico y el pineal. Un trabajo relevante en esta
línea es el de Raúl Aguilar y René Drucker-Colín,
quienes logran reestablecer los ritmos biológicos de la
locomoción y de la alimentación, desaparecidos por la lesión
del núcleo supraquiasmatico con el transplante de este
núcleo.
El papel de diversos neurotransmisores en la integración de conductas
tanto innatas como aprendidas o en procesos patológicos, se analiza en
varios laboratorios. La introducción de técnicas para detectar
las proteínas de genes de expresión temprana, por ejemplo, fos,
han permitido a muchos grupos relacionar la actividad neuronal en ciertas
areas cerebrales con diversas funciones o acciones: la conducta sexual,
la conducta maternal, diversos tipos de aprendizaje o con diversos tipos de
estimulación sensorial, como la olfatoria y la visual.
B) Con respecto a los aspectos celulares de las neurociencias, se distinguen
líneas dedicadas al estudio de neurotransmisores en el sistema nervioso
central y periférico, así como aquella dedicada a la
transmisión sinaptica y su regulación nerviosa y
hormonal. La comunicación de la célula con el exterior la
realiza la célula a través de proteínas membranales,
receptores que tienen la capacidad de reconocer a un agente exterior, como una
hormona, un neurotransmisor, una droga, para transmitir la
información al interior de la célula, a través decadenas
de moléculas intracelulares que constituyen los llamados sistemas de
señalización. El estudio de estos procesos puede
considerarse como fisiológico o bioquímico dependiendo de la
orientación e intereses del investigador. El estudio de receptores
membranales constituye uno de los temas mas activos en la
biología experimental y comprende desde su caracterización, es
decir su estructura, farmacología que incluye la definición de
los compuestos que modifican al receptor, lo activan agonistas o lo inhiben,
antagonistas, su conexión con mecanismos de señalización
específicos y sus llamados segundos mensajeros, y su posible participación
en funciones definidas, al estudiar las modificaciones en un proceso
determinado por la administración de un agonista o un antagonista del
receptor seleccionado. El grupo pionero en México en el estudio de
neurotransmisores fue el dirigido por Guillermo Massieu y sus asociados
Herminia Pasantes, Bertha Ortega, Ricardo Tapia, Pérez de la Mora en el
laboratorio de bioquímica del Instituto de Biología. Este
grupo se orientó inicialmente al estudio del neurotransmisor inhibitorio
y otros neurotransmisores gaba para posteriormente estudiar la taurina,
el glutamato, ya en el Instituto de Fisiología Celular, con Ana
María López Colomé, Roció Salgado. Por otra
parte en el mismo instituto, Adolfo García Sainz ha constituido un grupo
para estudiar sistemas de señalización en receptores
adrenérgicos ligados a proteínas g. Varios grupos en la unam y
Cinvestav estan estudiando el papel funcional de varios segundos
mensajeros, entre otros ampc, y diacilglicerol.
C)El tema de la biofísica de membrana, que se iniciara por la
década de 1970, ha tenido un desarrollo constante sobre todo en el
estudio de canales iónicos, uniones estrechas y uniones
comunicantes. Como habíamos mencionado, ya a partir de la
década anterior se crean grupos que continúan trabajando hasta la
fecha, dedicados al estudio de los mecanismos de transporte en la membrana
celular, Jorge Aceves y Erlij; así como de las estructuras y
moléculas involucradas en la organización membranal como sustrato
de estos procesos, Carlos Gitler, Sergio Estrada Orihuela, Mauricio Montal
y Alberto Darszón. A mediados de la década de 1970
una serie de técnicas y enfoques novedosos se regresan al estudio de las
membranas por varios investigadores que se incorporan del extranjero. Marcelino
Cerejido introduce en México el estudio de las uniones fuertes, tight
junctions y la polarización en la ubicación de ciertos
componentes membranales; mientras que Fidel Ramón inicia el estudio de
las uniones comunicantes, gap junctions. Particularmente importante para
la biofísica y fisiología mexicanas fueron los trabajos de Enrico
Stefani en canales íonicos, utilizando las técnicas de patch
clamp. Un grupo importante de sus estudiantes fue la base para el
establecimiento del Centro Universitario de Investigación
Biomédica en Colima.
D) Otra línea importante que se ha cultivado en México es el
estudio de los procesos endocrinos, sobre todo en los aspectos relacionados con
procesos reproductivos como la ovulación, la lactancia, el parto,
así como el mantenimiento de la homeostasis y el stress.
En la década de1970, el area empieza una serie de estudios sobre
el efecto de las hormonas esteroides sexuales: estrógenos,
andrógenos y progestinas, sobre la actividad de efectores centrales y
periféricos como el útero, las vesículas seminales y el
epidídimo. El papel del metabolismo de estas hormonas en sus
acciones. Y finalmente un analisis de los posibles mecanismos
celulares involucrados en sus acciones, Carlos Beyer, Gregorio Pérez
Palacios, Ana Elena Lemus y Carlos Kubli. Esta última línea
incluye estudios de Mario Caba, Ignacio Camacho y Gabriela
Gonzalez-Mariscal entre otros, sobre las características y
la localización de los receptores a esteroides en sus órganos
blancos. A raíz de la formación de Departamento de Investigación
Científica del imss se inicia una línea muy activa para estudiar
la biología, la estructura, y la fisiología celular de los
gametos particularmente del espermatozoide, Hicks, Reyes, Hernandez,
Delgado. Esta línea iniciada por Adolfo Rosado y su grupo en el
imss, se continúa en la uam-Iztapalapa y produce conocimientos
importantes sobre procesos, como la capacitación del espermatozoide y la
fertilización.
El grupo de Flavio Mena ha continuado el estudio sobre las bases
neuroendocrinas de la lactancia. Una de sus derivaciones ha sido el
analisis de los procesos celulares asociados a la secreción de
prolactina. Carmen Clapp y sus asociados han estudiado los diferentes
tipos de prolactina y su posible participación no sólo en la
lactancia sino en procesos de angiogénesis. El estudio de la
bioquímica de gonadotropinas particularmente de la fsh y el
significadofuncional de diversos procesos, glecosilación, ha sido el
tema de estudio de Alfredo Ulloa y sus asociados.
Los grupos Moralí, Beyer, Alonso Fernandez, Rodríguez
Manzo, Javier Velasquez, Raúl Paredes, Gabriela
Gonzalez-Mariscal y Oscar Gonzalez-Flores analizan las bases
neuroendocrinas de varias conductas innatas: la sexual, la maternal y la
agresiva. Pablo Pacheco, Javier Velazquez, Jorge Manzo y Margarita
Martínez analizan la modulación de estas conductas por diversas
situaciones experimentales.
E) Desde sus inicios en la década de 1940, la farmacología
experimental ha estado dirigida primordialmente al efecto de drogas sobre el
sistema cardiovascular, y sobre todo al estudio de diversos tipos de drogas
endógenas: neurotransmisores, hormonas. Y exógenos:
tranquilizantes, neurolépticos, sobre el comportamiento y sus
trastornos, la ansiedad, la agresividad y la epilepsia. La
psicofarmacología se establece desde la década de 1970 como una
de las areas mas activas, y estudia el efecto de diversas drogas.
Fernandez-Guasti estudia agonistas o antagonistas de neurotransmisores,
péptidos y hormonas esferoidales; Luisa Rocha sobre
comportamientos como la ansiedad, la depresión y la epilepsia; y
Cervantes, Moralí, y otros, analizan las acciones de diversas
areas del cerebro sobre la actividad neuronal, así como su
capacidad para proteger a éste del daño cerebral producido por
traumatismos o anoxia.
Resultados
A partir de la década de 1970 se da un crecimiento muy importante en el
número de investigadores en biología experimental, que en gran
parte ocurre: 1) por la expansión de lasinstituciones tradicionales,
debida al aumento en el número de las plazas y al crecimiento de la infraestructura,
como en la unam y en el Cinvestav; 2) por la creación del
Departamento de Investigación Científica del imss y sus unidades
foraneas; y 3) por la fundación de la uam en 1974.
En los siguientes 25 años después de la fundación de la
uam, sólo tres nuevas universidades se establecen en provincia,
pequeñas y con escasos recursos para la investigación: la
Universidad de Quintana Roo, la Universidad del Carmen, en Campeche y la
Universidad de Tlaxcala. En los últimos años el gobierno
federal ha creado varias instituciones de educación terciaria en
provincia como las universidades tecnológicas, politécnicas e
interculturales, pero no contemplan la investigación como una de sus
finalidades. El crecimiento de la investigación en biología
en la provincia se da como resultado de una ampliación de estas
actividades en universidades ya establecidas como las de Puebla, San Luis
Potosí, Veracruz, Guanajuato, Colima y Guadalajara. Este periodo
se caracteriza por la diversificación de la tematica, ya que en
México se cultivan practicamente todos los tópicos de
investigación actual en la biología, desde el nivel molecular
hasta el nivel integrativo. También se dispone de casi todas las
metodologías de analisis de los procesos vivos, si bien
concentradas en las instituciones principales.
Una proporción importante del trabajo en biología experimental se
publica en revistas internacionales indexadas ¿qué relevancia
tienen las publicaciones en biología experimental realizadas por
investigadorestrabajando en México? En un estudio sobre la
actividad científica en América Latina, realizado por
Pérez Angón y Torres Vega, se analizó la producción
de artículos indexados en sci en varias disciplinas: física,
química, medicina clínica, biología molecular y
genética, y su impacto citacional relativo en el periodo de 1981 a 1995.
En este estudio se ve, que si bien el número de artículos en el
area médica se mantiene mas o menos constante, su impacto
citacional se incrementa considerablemente, de 0.39 a 0.65. Por el
contrario, en el caso de la biología molecular y la genética, si
bien el número de artículos publicados casi se dobla durante este
período, el impacto citacional relativo pasa de 0.53 en 1985, a 0.35 en
1993. Estos valores se han mantenido, como se mencionó
anteriormente, según datos del 2005. Es interesante señalar
que el impacto relativo bajó y su tendencia decreciente en la
biología molecular y la genética ocurre en otros países de
América Latina: Brasil, Chile y Argentina. Un estudio del 2005 del
Institute for Scientific Information en el que se analiza el impacto
relativo de la producción mexicana por disciplina en el periodo
2000-2004, confirma un claro déficit en las areas de la
biología experimental respecto al promedio mundial, valor 1.0. Las
neurociencias alcanzan de calificación 0.52, la farmacología 0.59
y la biología molecular 0.47. Es interesante comparar estas cifras
con la ecología 0.75, la taxonomía, plantas y animales 0.59, y la
medicina 0.81. Como se había mostrado en el estudio de Pérez
Angón y Torres Vega, si bien estas ramas mas integrativas
tampocoalcanzan el valor internacional promedio,
sí son significativamente mayores que las alcanzadas en las
neurociencias y en la biología molecular.
El resultado de este analisis es sorprendente cuando se le compara con los
datos obtenidos en 1970 por la misma institución en su Citation Index,
en que en un parametro los investigadores mexicanos se encontraban por
encima del promedio mundial.
En relación con los países latinoamericanos, el impacto relativo
de la ciencia mexicana, no sólo de la biología experimental, se
ubicaría en el noveno lugar y estaría por debajo de Argentina,
Chile, Colombia, Perú, Panama y Costa Rica y sólo
ligeramente por encima de Brasil y Venezuela. Estos datos son
preocupantes sobre todo considerando que las diferentes ramas de la
biología experimental en México como toda la investigación
basica, tiene como objetivo explícito alcanzar una buena
difusión y un impacto importante en la comunidad científica
internacional. Los datos anteriormente mencionados sugieren un
estancamiento, si no un retroceso, en la investigación en
biología experimental en los últimos años, lo que debiera
llevar a una evaluación objetiva y cuidadosa de nuestra política
de ciencia. El tema desde luego rebasa los objetivos de este
artículo pero se podría proponer una serie de explicaciones a
este resultado.
Futuro de la biología experimental en México
Una proporción muy alta, el 71% de la biología experimental
en México se realiza en las instituciones de educación superior.
La actividad en esta area que se desarrolla en instituciones ligadas a
la salud, como el imss y los Institutos deSalud ha disminuido
significativamente al considerarla correctamente como investigación
basica y favorecer la investigación biomédica directamente
vinculada con problemas de salud. Esta tendencia se ha visto reforzada
por analisis recientes acerca de la investigación en
México, como los de la oecd, que recomiendan el privilegiar la actividad
científica ligada al desarrollo o a problemas nacionales
específicos. Esta tendencia por otra parte se observa
también en los países del primer mundo. El caracter
analítico de una gran parte de los estudios realizados en la
biología experimental, requiere para su operación de
tecnología sofisticada e insumos costosos. Esta tendencia
inclusive se refuerza con los programas de investigación a realizar en
el futuro en los países líderes en ciencia. Por ejemplo, el
programa de la National Science Foundation en Estados Unidos que se
propondra al congreso para su financiamiento el en 2008, enfatiza
el desarrollo de nuevas tecnologías que permitan registrar varios
procesos celulares simultaneamente, así como el desarrollo de
nuevas técnicas para analizar estos resultados. El entendimiento,
por otra parte, de que la comprensión de los procesos biológicos
demanda un analisis a diversos niveles y de diferentes sistemas requiere
de la interdisciplinaridad y de la colaboración de múltiples
grupos frecuentemente ubicados en diferentes instituciones. Esta
característica tan patente en la ciencia moderna muy raras veces se da
en México, en donde se tiende a trabajar aisladamente utilizando
recursos instrumentales y mentales propios.
Es seguro y deseable quese continúen líneas de
investigación con enfoques moleculares y analíticos dentro de la
biología experimental en México. Sin embargo, estas
líneas sólo se podran desarrollar en nuestras
instituciones centrales, que ademas de contar con la infraestructura
adecuada pueden asegurar su continuidad. Paradójicamente, una
proporción muy elevada de los posgrados nacionales en biología
tienen una orientación analítica y muchos de sus egresados
continúan su formación en el extranjero en laboratorios
orientados en esa dirección. Un problema resultante es que estas
pocas instituciones “adecuadas” estan ya
practicamente saturadas, y por consiguiente, al regresar a México
estos jóvenes investigadores tendran que ubicarse en
universidades de provincia en donde el recurso es escaso y sus posibilidades de
continuar una carrera productiva se ven muy disminuidas. Es necesario
pues, reorientar a través de los programas de posgrado a los futuros
biólogos experimentales a las areas integrativas, no sólo
menos costosas, sino que pudieran ofrecer ventajas comparativas con el
extranjero. Por ejemplo, la investigación fundamentada en el uso
de animales resulta mas barata en México, por el bajo costo de la
producción de animales. Por otra parte, existen numerosas
señales provenientes inclusive de países del primer mundo, de la
necesidad de reorientar la investigación en esa dirección.
La percepción de esta tendencia, así como los factores limitantes
antes señalados, seguramente van a resultar en un resurgimiento
importante de la biología experimental integrativa en los
próximos años.