Nacida en Rangún, el 19 de junio de
1945, es hija de Aung San, héroe nacional que firmó en 1947 el
tratado de independencia con el Gobierno britanico antes de ser
asesinado. Tras diplomarse en Oxford, trabajar en la Secretaría de las
Naciones Unidas y ser profesora en la India, Aung San Suu Kyi regresó a
Birmania en 1988 y participó en el 'segundo combate en pro de la independencia
nacional'. Este combate se inspiró en el ejemplo pacífico de
Gandhi y en su fe budista, que le llevó a
propugnar una 'revolución del
espíritu que se manifiesta mediante el reconocimiento de la necesidad del dialogo y la
compasión por los mas humildes'. A pesar de estar arraigada
en la tradición birmana, supo evitar las manipulaciones nacionalistas
basando su lucha en 'los principios sagrados de la moral',
insistiendo en la necesidad de reconciliar a las etnias de su país,
profundamente divididas.En 1989 fue sometida a arresto domiciliario en
Rangún. Asumió la dirección de la Liga
Nacional para la Democracia, que ganó las elecciones en 1990 por
mayoría aplastante. Como
las autoridades militares se negaron a tener en cuenta este
resultado, su partido no pudo formar un gobierno civil. Aung San Suu Kyi,
sujeta a estrecha vigilancia, prefirió permanecer al lado de su pueblo
dando testimonio de su fe en 'la idea del bien yde lo
justo'.
Recibió sucesivamente el Premio Thorolf Rafto de
defensa de los derechos humanos y el Premio Sajarov de libertad de
pensamiento.
Reconocida como prisionera de conciencia por Amnistía Internacional, su
propósito de que el drama birmano no cayera en el olvido fue
recompensado el 14 de octubre de 1991 con el Premio Nobel de la Paz gracias al
cual dio a conocer su combate al mundo entero rechazando el exilio que se le
proponía a cambio de su silencio.
En 1992 el Premio Simón Bolívar recompensó el combate de
una mujer visionaria que combina el idealismo y el pragmatismo ilustrado siendo
consciente al mismo tiempo de que otros movimientos similares en Asia se han inspirado, en la
lucha pacífica de la Liga.
En 1995, las presiones ejercidas por los Estados Unidos condujeron a su
'liberación' (por poco tiempo) de su residencia y ella se
dirigía cada fin de semana a una muchedumbre atenta a su mensaje de
aliento antes de que las manifestaciones estudiantiles provocaran la
represión, la detención de dirigentes de la oposición y el
establecimiento de un bloqueo en torno a su domicilio.
Sometida de nuevo a arresto domiciliario en 1996, rara vez ha podido recibir
visitas, aunque consiguió enviar a las Naciones Unidas algunos mensajes
grabados que denuncian el empeoramiento de lasituación de los derechos
humanos en su país, pidiendo a la comunidad internacional que conceda la
prioridad a los derechos políticos de la Liga Nacional cuya
dirección sigue asumiendo.
La Junta de gobierno que mantiene el poder en su país, no ha ahorrado
las invitaciones de exilio a la reclusa, jugando con el elemento de la
separación familiar, como una manera rapida de deshacerse de
ella. Un capítulo de esta tactica de
acoso psicológico sucedió cuando su esposo, Michael Aris,
murió de cancer de próstata en marzo de 1999, sin volver a
ver a su mujer, esperando la visa que el gobierno birmano nunca le
concedió. Otro capítulo sucedió en abril de 1999 cuando al
hijo menor, Kim Htein Lin, se le permitió reunirse con su madre por unas
horas en el aeropuerto de Rangún.
Se encuentra en arresto domiciliario desde 2003. En
septiembre de 2007 fue trasladada a un nuevo recinto
penal debido a las manifestaciones que se realizan en todo el país
exigiendo democracia.
El 3 de octubre de 2009 se reunió con la junta militar para dialogar por
primera vez en la Casa de Huéspedes del Estado en Rangún, un
día después de que una corte rechazara la apelación que la
activista había hecho contra su sentencia de 18 meses de prisión
por violar los términos de su arresto domiciliario.
Premios y reconocimientos [
ThorolfRafto Memorial Prize (1990)
Premio Sajarov (1990)
Premio Nobel de la Paz (1991)
Premio Internacional Simón Bolivar (1992)
Eleanor Roosevelt Award for Human Rights
Presidential Medal of Freedom (2000)
Jawaharlal Nehru Award
Olof Palme Prize
Companions of the Order of Australia
Premio Internacional Cataluña (2008)
Premio Trumpet of Conscience de Realizing the Dream (2008)[6]
Campaña por su liberación
El 11 de agosto de 2009, un tribunal del gobierno militar birmano volvió
a condenarla a dieciocho meses mas de arresto domiciliario, tal y como
se puede consultar el siguiente artículo. Algunas organizaciones como
Amnistía Internacional o Avaaz tratan de ejercer presión sobre el
gobierno de Birmania y sobre otros dirigentes para que tomen cartas en el
asunto. El problema no es, desde luego, baladí: Aung San Suu Kyi es
sólo una mas entre los estimados 700 presos de conciencia en este país.
Esta acción ha finalizado. La petición
para que el gobierno de Myanmar reconozca los derechos humanos y ponga en
libertad con la maxima urgencia a Aung San Suu Kyi y a los demas
presos de conciencia se promovió con motivo del 60º aniversario de
la Declaración Universal de Derechos Humanos. La acción
pedía también que los gobiernos, entidades públicas y
privadas respeten los derechos humanos y se comprometanen la defensa de su
universalidad, indivisibilidad e interdependencia, promulgadas en la
Declaración.
A esta ciberacción, que ha logrado el apoyo de 33.000 personas, se
unieron acciones encaminadas a lograr el apoyo a la vigencia de la
Declaración Universal de Derechos Humanos por parte de entidades,
organizaciones y administraciones públicas en todo el territorio
español. Se obtuvieron declaraciones públicas por parte del
Congreso de los Diputados, 12 Parlamentos autonómicos (Andalucía,
Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Cataluña, Castilla y
León, Galicia, Madrid, Navarra, País Vasco y Valencia), un
Gobierno autonómico (Castilla-La Mancha) y 300 ONG y entidades sociales
y ciudadanas.
Petición original:
Seis décadas después de la adopción de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos, esta por cumplir
el respeto de unos derechos humanos universales e indivisibles, que permitan
hacer efectivo el derecho a un nivel de vida digno y el ideal del ser humano
libre. Sólo en 2007 1.252 personas fueron ejecutadas en 24
países, se documentó tortura y malos tratos en 81 países,
en 45 países hay presos y presas de conciencia, 854 millones de personas
sufren la tortura del hambre y 1.100 millones no tienen acceso a una vivienda
digna.
Aung San SUU