Orígenes de la revolución: En primer lugar, se habían producido profundos
cambios en el ámbito de las ideas y de las concepciones del mundo. Los “filósofos” de la ilustración habían destronado a la teología.
Pero esta separación ponía en tela de juicio las bases de la
monarquía absoluta. La naturaleza divina del poder real no
era aceptada por los filósofos que propusieron una nueva instancia de
legitimaciones, la opinión publica. Los cafés, los salones, los periódicos
habían creado la esfera pública de la política, espacios donde los individuos
hacían un uso público de la razón. Era un espacio de discusión, de comunicación y de intercambio de
lasideas. Además, es esa nueva esfera pública, las personas que hacían uso de la razón podían ser considerados “iguales”. La
“opinión publica” era la opinión de los hombres
ilustrados. Desde esta perspectiva, los hombres ilustrados eran quienes debían
erigirse en “representantes” del pueblo.
La nueva cultura política reflejaba la crisis de legitimidad de la monarquía
absoluta que alcanzaba a amplios sectores sociales, a
los campesinos, a las clases populares urbanas. En los cuadernos de Quejas
quedaron explícitos los cambios en las imágenes del rey. La crisis
política se conjugaba con una peculiar situación social y económica. Francia
fue la principal rival económica de Inglaterra en el plano internacional.
Pero, a diferencia de Inglaterra, Francia era la más poderosa
monarquía absoluta de Europa.
Los economistas de la ilustración habían planteado soluciones.
Consideraban que era necesaria una eficaz explotación de la
tierra. Criticando las bases del capitalismo, consideraban que
la riqueza no estaba en la acumulación sino en la producción, por lo tanto era
necesario levantar las trabas, dar libertad a los productores, a las empresas,
al comercio.
En síntesis, el conflicto entre los intereses del antiguo régimen
y el ascenso de nuevas fuerzas sociales era más agudo en Francia que en
cualquier otra parte de Europa. La “reacción feudal” fue la chispa que encendió
la revolución. Para algunos historiadores la revolución fue el producto del
conflicto entre la aristocracia feudal y las burguesías vinculadas a las nuevas
actividades económicas.
Las etapas de la Revolución: La participación deFrancia en la guerra de
independencia de los Estados Unidos había agravado los problemas financieros. Para sanear el déficit fiscal habían intentado el cobro
de un impuesto general a todas las clases
propietarias. Ante esto, la Asamblea de Notables exigió a la corona la convocatoria
de los Estados Generales. Estos Estados representan a los estamentos de la
sociedad (el clero, la nobleza y el estado llano)
En síntesis, la revolución comenzó con la rebelión de la nobleza que intentaba
afirmar sus privilegios frente a la monarquía. Pero los
efectos fueron distintos a los esperados.
Los Estados Generales aun recogían la visión de la sociedad
expresada en el modo de los “tres ordenes”. Los dos
primeros Estados reunían a los órdenes privilegiados, el Tercer Estado incluía
a los campesinos y a todos los grupos que carecían de privilegios. Los
Estados Generales se reunieron en Paris,
comenzando con los debates sobre las formas de funcionamiento. Ante la falta de
acuerdos el Tercer Estado se auto-convocó en una Asamblea Nacional. Pero los
objetivos de sus integrantes cambiaron: se propusieron a redactar una
Constitución que limitaba el poder real.
1S etapa de la revolución (1789-1791): Las intenciones de Luis XVI de disolver
la Asamblea Nacional por la fuerza provocaron el levantamiento popular que
agudizo el proceso: el 14 de julio de 1789, la toma de la fortaleza de La
Bastilla simbolizo la caída del absolutismo y el comienzo de un periodo de
liberación. Oleadas de levantamientos campesinos, el llamado “Gran Miedo” en
solo dos semanas quebraron la estructura institucional de Francia.En agosto de
1789, la revolución obtuvo su manifiesto formal: la Asamblea aprobó la
Declaración del hombre y el ciudadano. La Declaración se basaba en los
principios de la libertad, igualdad y fraternidad. También se hacía necesario
socavar otro de los fundamentos del
antiguo régimen: las bases del
poder de la Iglesia. A fines de 1789, se nacionalizaron los bienes del
clero.
En septiembre de 1791, se probaba la Constitución que establecía un sistema de monarquía limitada. El poder
monárquico quedaba controlado por una Asamblea Legislativa.
2S etapa de la revolución. La republica jacobina
(1792-1794): Dentro del Tercer Estado pronto
comenzaron a diferenciarse las distintas corrientes,
que se agrupaban en distintas asociaciones o clubes políticos. Algunos de estos clubes estaban reservados a la elite política.
Pero también los sectores populares más radicalizados, es decir, los sans
culottes, se agrupaban en sociedades que se reunían en los barrios de las ciudades
con un ideario democrático e igualitario. Esta red de
asociaciones que cubría el país se transformó pronto en el motor de la
agitación.
Las distintas tendencias se expresaron en la Asamblea Legislativa y quedaron
definidas por el lugar que ocupaban en el recinto de sesiones: en la “derecha”
se agrupaban los sectores más conservadores; en la “izquierda”, los más
radicales. Si los más conservadores consideraban que la Revolución había
concluido, los acontecimientos no se desarrollaron a su favor. En primer lugar, una serie de malas cosechas llevaron a una crisis
económica que favoreció la movilización popular. En
segundolugar, el peligro de la contrarrevolución y de la guerra afirmó la
influencia de los sectores más radicalizados.
Ante el desarrollo de los acontecimientos, Luis XVI junto con su familia había
intentado huir para reunirse con los nobles exiliados
en Austria.
Pero la huída fue descubierta y la familia real fue llevada a
la fuerza a París. El intento de huída y la intención del rey de unirse a los exiliados que
complotaban en contra de la revolución para restaurar el poder absoluto fueron
percibidos como
un acto de “traición a la Patria”. Y el descrédito de la monarquía afirmó el
prestigio de los más radicalizados que habían comenzado a trazar un ideario republicano.
Estaba también el peligro de la guerra. Para las
coronas de Austria y de Prusia colaborar con la restauración del absolutismo era
una medida defensiva: evitar la expansión de esas ideas y de esos movimientos
dentro de sus propios reinos.
El estallido de la guerra favoreció la radicalización del proceso. En este clima, el rey fue depuesto y enviado a prisión, se
disolvió la Asamblea Legislativa y se la reemplazó por una Convención Nacional.
Se iniciaba así la segunda etapa de la revolución, etapa en
la que la guerra impuso su propia lógica.
La mayoría de las regiones estaban sublevadas y desconocían al gobierno., Era necesario tomar medidas excepcionales: tal
fue la acción de los jacobinos que pronto ganaron el control de la Convención.
Para asegurar el orden y acabar de raíz con la oposición interna se impuso esa
rígida disciplina que se conoció como el “Terror”. Los sectores más
radicalizados plantearon la necesidadde condenar a muerte al rey por su acto de
traición: Luis XVI fue ejecutado en la guillotina.
En 1793 se había promulgado una nueva Constitución, de
carácter democrático. Pero esta Constitución casi no
tuvo vigencia. Su aplicación fue suspendida por Robesperrie, que
estableció una dictadura para profundizar la política del
Terror.
3S etapa de la Revolución. La difícil búsqueda de la
estabilidad (1794-1799): La república jacobina pudo mantenerse durante la época más difícil de la guerra, pero hacia
mediados de 1794 las circunstancias habían cambiado: la Convención daba por terminadas
sus funciones y sancionaba la Constitución del año III de la República.
La Constitución de 1795 establecía un poder
legislativo bicameral y un poder ejecutivo, el Directorio, integrado por cinco
miembros.
En una situación de difícil equilibrio, el gobierno del
Directorio se encontró jaqueado tanto por los
sans culottes y los políticos más radicalizados, como por la reacción aristocrática. Y el delicado equilibrio fue mantenido básicamente por el ejército,
responsable de reprimir y sofocar las periódicas conjuras y levantamientos.
El ejército se transformó, de esta manera, en el soporte del poder político.
El ejército fue uno de los hijos más brillantes de la
revolución. Pronto mostró su capacidad en la guerra.
Un ejército burgués. Los grados y ascensos no se
debían al privilegio ni al nacimiento, sino que se
debían al mérito. Uno de esos militares de carrera, Napoleón Bonaparte, fue
quien puso fin a la revolución, al mismo tiempo que institucionalizó sus
logros.