Geomorfología
La geomorfología es la rama de la geografía que
estudia la superficie terrestre, el cual es el resultado de un balance dinámico
—que evoluciona en el tiempo— entre procesos constructivos y destructivos,
dinámica que se conoce de manera genérica como
ciclo geográfico. El término geomorfología proviene del griego:
Γηος, es decir, geos (Tierra), μορφI® o
morfeé (forma) y λÏŒγος, logos (estudio, conocimiento).
Habitualmente la geomorfología se centra en el estudio de las formas del
relieve, pero dado que estos son el resultado de la dinámica litosférica en
general integra, como insumos, por un lado, conocimientos de otras ramas
geográficas, tales como la climatología, la hidrografía, la pedología, la glaciología
y, por otro lado también integra insumos de otras ciencias, para abarcar la
incidencia de fenómenos biológicos, geológicos y antrópicos, en el relieve. La
geomorfologia es una rama muy desarrollada tanto en la
geografía física como
en la geografía humana (por causa de los riesgos naturales y la relación hombre
medio) y en la geografía matemática (por causa de la topografía).
En un comienzo inseparable del resto de la geografía, la geomorfología toma
forma a finales del siglo XIX de manos de quien fue su padre, el renombrado
geógrafo William Morris Davis, quien también es considerado el padre de la
geografía americana. En su época la idea predominante sobre la creación del relievese explicaba a través
del catastrofismo como si fuera el supuesto de la gran
inundación bíblica. Davis y otros geógrafos
comenzaron a creer que otras causas eran responsables del modelamiento de
la superficie de la Tierra y no eventos catastróficos. Davis,
dentro del marco del
uniformitarismo, desarrolló una teoría de la creación y destrucción del paisaje, a la que
llamó «ciclo geográfico». Trabajos tales como The Rivers and Valleys of
Pennsylvania, The Geographical Cycle y Elementary Physical Geography, dieron un
primer y fuerte impulso seguido por sus numerosos sucesores tales como Mark
Jefferson, Isaiah Bowman, Curtis Marbut, quienes fueron consolidando la
disciplina, sin dejar de participar en el contexto de la geografía y también
profundizando en otras ramas.
Factores generadores de los procesos geomorfológicos
El relieve terrestre va evolucionando en la dinámica del ciclo geográfico mediante una serie de procesos
constructivos y destructivos que se ven permanentemente afectados por la fuerza
de gravedad que actúa como
equilibradora de los desniveles; es decir, hace que las zonas elevadas tiendan
a caer y colmatar las zonas deprimidas. Estos procesos hacen que el relieve transite por diferentes etapas. Los
desencadenantes de los procesos geomorfológicos pueden categorizarse en cuatro
grandes grupos:
Factores geográficos: El relieve se ve afectado tanto por factores bióticos como abióticos,de los cuales se consideran propiamente
geográficos aquellos abióticos de origen exógeno, tales como el relieve, el suelo, el clima y los
cuerpos de agua. El clima con sus elementos tales como la presión, la
temperatura. los vientos. El agua
superficial con la acción de la escorrentía, la acción fluvial y marina.
Los hielos con el modelado glacial, entre otros. Son factores
que ayudan al modelado, favoreciendo los procesos erosivos.
Factores bióticos: El efecto de los factores bióticos sobre el relieve suele
oponerse a los procesos del
modelado, especialmente considerando la vegetación, sin embargo, existen no
pocos animales que colaboran con el proceso erosivo tales como los caprinos.
Factores geológicos: tales como la tectónica, el diastrofismo,
la orogénesis y el vulcanismo, son procesos constructivos y de origen endógeno
que se oponen al modelado e interrumpen el ciclo geográfico.
Factores antrópicos: La acción del
hombre sobre el relieve es muy variable, dependiendo de la actividad que se
realice, en este sentido y como
comúnmente pasa con el hombre es muy difícil generalizar, pudiendo incidir a
favor o en contra de los procesos erosivos.
Aunque los distintos factores que influyen en la superficie terrestre se ven
incluidos en la dinámica del
ciclo geográfico, sólo los factores geográficos contribuyen siempre en
dirección al desarrollo del
ciclo y a su fin último; la penillanura. Mientras queel resto de los factores
(biológicos, geológicos y antrópicos) interrumpen o perturban el normal
desarrollo del
ciclo. De la interacción de estos elementos resultan los procesos
morfogenéticos o modelado:, dividido en 3 etapas o:
tres procesos sucesivos, a saber, la erosión, el transporte y la sedimentación.
Este proceso es, en gran parte, causante del modelado de la superficie
terrestre teniendo en cuenta una serie de circunstancias.
Ramas de la geomorfología
De carácter descriptivo y clasificatorio en sus orígenes, la geomorfología fue
evolucionando, como
toda ciencia, hacia una disciplina exploratoria de las causas e interrelaciones
entre procesos y formas. Desde la última mitad del siglo XX, gran
sector de los geógrafos de la especialidad se ha enfocado particularmente en
encontrar relaciones entre procesos y formas. Este enfoque, conocido como
geomorfología dinámica, se ha visto beneficiado enormemente con el avance
tecnológico paralelo y reducción de costos en equipos de medición y el
incremento exponencial de la capacidad de procesamiento de las computadoras. La
geomorfología dinámica trata de procesos elementales de erosión, de los agentes
de transporte, del
ciclo geográfico y de la naturaleza de la erosión.
Otras ramas de la geomorfología estudian diversos factores que ejercen una
marcada influencia en la formas de la tierra como por ejemplo el efecto predominante del clima o lainfluencia
de la geología en el relieve. Las principales son:
La geomorfología climática estudia la influencia del
clima en el desarrollo del
relieve. La presión atmosférica y la temperatura interactúan con el clima y son
los responsables de los vientos, las escorrentías y del continuo modelado del ciclo geográfico. La diversidad de
climas representa distintas de velocidades en la evolución del ciclo, como es
el caso de los climas áridos con ritmo evolutivo más lentos y de los climas muy
húmedos con ritmos evolutivos más altos, como también el clima representa el
tipo de modelado predominante; glacial, eólico, fluvial, etc. Este conocimiento se sintetiza en lo que se denomina “dominios
morfoclimáticos”.
La geomorfología fluvial es la rama especializada de
la geomorfología que se encarga del
estudio de los accidentes geográficos, formas y relieves ocasionados por la
dinámica fluvial. Este subcampo suele traslaparse con el campo de la
hidrografía.
La geomorfología de laderas es aquella que estudia los fenómenos producidos en
las vertientes de las montañas, así como también estudia los
movimientos en masa, estabilización de taludes, etc. Se relaciona con el
estudio de riesgos naturales.
La geomorfología eólica es la que se encarga de estudiar los procesos y las
formas de origen eólico, en especial en los dominios morfoclimáticos donde la
acción eólica es predominante, por ejemplo en las zonas litorales,los desiertos fríos y cálidos, y las zonas polares.
La geomorfología glaciar se encarga de estudiar las formaciones y los procesos
de los accidentes geográficos, formas y relieves glaciares y periglaciares.
Esta rama está íntimamente ligada con la Glaciología.
La geomorfología estructural, prioriza la influencia de estructuras geológicas
en el desarrollo del
relieve. Esta disciplina es muy relevante en zonas de marcada actividad
geológica donde por ejemplo fallas y plegamientos predeterminan la existencia
de cumbres o quebradas, o la existencia de bahías y cabos se explica por la
erosión diferencial de afloramientos de roca más o
menos resistentes.
El éxito de la capacidad predictiva de algunos modelos y potenciales
aplicaciones en los campos de planificación urbana, ingeniería civil, estrategias
militares, desarrollo costero, entre varios más, da inicio en las últimas
décadas a la geomorfología aplicada muy destacada en la geografía francesa, en
especial gracias al instituto de Geografía Aplicada, fundado por Jean Tricart.
Esta aplicación se centra básicamente en la interacción entre acciones humanas
y las formas de la tierra, en particular enfocándose en el manejo de riesgos
causados por cambios en la superficie de la tierra (naturales o inducidos)
conocidos como
georriesgos. Estudios de este tipo incluyen
movimientos en masa, erosión de playas, mitigación de inundaciones, tsunamis
entre otros.